Capítulo 21

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—Ah, maldito alfa. Lo amo tanto. — JiMin se dejó caer en su cómoda cama mientras murmuraba aquello con tanta emoción. Aún se encontraba enojado, pero ahora estaba arrepentido por la forma en la que se desarrollaron las cosas. 

No obstante, hace rato cuando pelearon, estaba demasiado enojado con YoonGi como para pensar correctamente. Aún así, ya no podía salir de su casa, la noche había caído y las calles eran peligrosas para un omega en celo, y aunque ya había tomado sus supresores para calmar su calor, eso no le garantiza gran protección. 

Sobre todo porque sus celos suelen ser demasiado fuertes. 

Sin embargo, puede que ahora esté llevando mejor las cosas debido a la situación en la que se encontraba. Estaba más arrepentido y triste que caliente y necesitado. 

—Esto me pasa por idiota. — volvió a decir, formando un puchero con sus gruesos labios. 

Trataría de dormir un poco, mientras que The Hunger Games se reproducía en la televisión frente a él. Ver la saga lo había distraído un poco, pero aún seguía sintiéndose tan mal. 

Bostezó cuando sus ojos ya casi no podían seguir abiertos, se estaba durmiendo mientras la televisión seguía reproduciendo la película. Iban en la parte donde anunciaban la nueva regla de los ganadores de los juegos, cuando alguien golpeó la puerta de su habitación con apuro. 

JiMin saltó en su cama al haber perdido el sueño en segundos. Balbuceó unas cuantas maldiciones y se levantó con flojera de su cama. Le había dicho a su madre que no quería que lo molestaran. ¿Por qué se empeñaba en hacerle esto? 

—JiMin... — la voz de aquel alfa lo llevó a alzar la mirada para observar al mayor. 

Frunció el ceño confundido. 

—¿Namjoon? ¿Qué mierda haces aquí?— cuestionó el omega, dando un paso atrás pero aún sin dejar pasar al alfa. 

—Yo... disculpa por llegar de esta manera, necesitaba hablar contigo. 

El omega negó, dándose cuenta de que era muy sospechoso que el alfa estuviera ahí. Y por si fuera poco, no podía dejarlo entrar, estaba en celo y aunque se sentía tranquilo, el alfa frente a él podía no estarlo. 

—NamJoon, no sé cómo entraste, pero tienes que irte. No es bueno que estés aquí.

—Ya sé que no es bueno... pero por favor. Déjame hablar contigo un segundo, necesito-

—NamJoon, ya te dije que no. Tienes que irte, es en serio. — demandó con enojo al ver que el tipo no se daba por vencido. 

—JiMin, si tan sólo me dieras una oportunidad... 

El castaño jadeó con agresividad y el disgusto en su rostro se hizo presente. Su semblante de pronto cambió a alguien más serio, estaba enojado e incómodo, quería dormir, disfrutar del resto de su noche y descansar bien porque su celo no le agradaba si no estaba en compañía de YoonGi. Así que sí, estaba por explotar contra NamJoon porque de nuevo volvía a insistir con lo mismo. 

—Kim NamJoon, ya basta por favor. Quiero estar solo, no sé por qué estás aquí y ni siquiera quiero saberlo, déjame en paz. 

Trató de cerrar la puerta de su habitación, pero el alfa la empujó haciendo que el omega retrocediera con sorpresa. 

—Si tan sólo me escucharas, te darías cuenta de que estoy demasiado enamorado de ti. Por favor, ni siquiera tienes una relación con YoonGi, puedes simplemente darme una oportunidad y-

—¡Cállate! Dios, llevas insistiendo desde hace tanto tiempo que me he cansado de decirte que no. NamJoon, ¿no lo entiendes? No eres mi predestinado, tampoco el alfa que me gusta. Yo amo a YoonGi, así que- 

HEARTLESS TRUTHS | YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora