Del Odio Al Amor Solo Hay Un Paso 🏳️‍🌈

Capítulo 13

Capítulo 13.

Adams

Otro día más de clases sin nada interesante que suceda, después de ese encuentro en los vestidores no eh vuelto a ver a Adnels a solas, me sorprendo de mi mismo de lo que hice esa tarde.

No puede evitar irlo a ver cuándo me dijo que iba a estar entrenando, me escondí a lo lejos en unos de los pilares para que no me viera, se veía tan bello con su traje de baño, nadando en una sincronía increíble, su cuerpo brillaba con los movimientos continuos de sus brazos y piernas, no podía dejar de mirar cada unos de sus músculos. Lo ví nadar durante media hora hasta que todos se fueron quedando el solo en la piscina, pronto dejo de nadar y se fue a los vestidores, sin el darse cuenta lo seguí en silencio. Pero me tropecé con un carrito de toallas sucias haciendo ruido.

—¿Quien está allí?— lo escucho preguntar.

No respondo y sigo caminando.

—¿Quien está allí? No respondo con lo que pueda hacer— vuelve a preguntar.

Me río por eso. Me acerco más presionando mis pasos a propósito para que se escuche por todo el lugar. Me asomo lentamente y mis reflejos me ayudan a cubrirme con los brazos rápidamente para evitar que Adnels me golpee con algo.

—¡No! ¡Soy yo Milo!— Grito fuerte para que me oiga.

—¿Milo?— repite retrocediendo y bajando el palo de escoba. —¿Estás loco? Me asustaste, casi te golpeó— dice molesto caminando de un lado a otro.

Me río.

—Lo siento, no quería asustarte— 

—Aunque ese era el objetivo— afirma la voz en mi cabeza.

—No te rías que no es gracioso, además ¿Que haces aquí?—

—Recuerda que me retaste y vine a cobrarme los besos—

—¿Que?—. Él retrocede, puedo ver qué no se esperaba esa respuesta por qué se sorprende abriendo los ojos como platos.

Le dedico una media sonrisa y me acerco.

—Es-estas loco— balbuceo retrocediendo hasta que choca con los casilleros.

—Si estoy loco pero por ti— me acerco más y lo arrincono apoyando mis manos en dichos casilleros.

Sus ojos están fijados en los míos, y hacen que me pierda en el azul de los suyos, pequeñas gotas de agua bajan por su rostro desde su cabello todo alborotado hasta su cuello. Me muerdo el labio inferior por la tensión que siento que sube por todo mi cuerpo, de estar así tan cerca de él a unos sentimientos, no puedo soportar más esta tortura y estampo mis labios con los suyos.

Están húmedos cargados de deseo dejándonos llevar por la pasión que ambos sentimos, pego mi cuerpo y puedo sentir que su corazón late demasiado rápido igual que el mío, coloco mis manos en su cintura y lo presiono más con mi cuerpo, la adrenalina aumenta estar así pegado con Adnels prácticamente desnudo que solo nos separa la tela elástica de su traje de baño, mis manos viajan tocando cada parte de su cuerpo, las subo por su espalda, toco sus hombros, su cuello, mientras lo sigo besando con más desesperación, las bajo por su pecho hasta su abdomen, y él tiembla por mi tacto, levanto un poco la tira elástica del traje para introducir mi mano y tocarlo más.

—Para— susurra Adnels pegado en mi labios. Dejo reposar mi frente con la suya y nuestras respiraciones están aceleradas.

—Dejame solamente tocarte, no pasará nada más que eso, te lo prometo—