- Deberíamos irnos ya - me susurró Lu para que sólo la escuchara yo
En media hora habíamos quedado con Pedri y Gavi.
Asentí y nos despedimos de nuestras familias, prometiendo a Martí que mañana los llevaría con los chicos.
- ¿Qué te vas a poner? - le pregunté cuando llegamos a la habitación
- Tu conjunto naranja - dijo sacándome la lengua
- Siempre igual - reí, siempre me quitaba ropa
- Ponte mi vestido verde, a Gavi se le va a caer la baba - dijo
Me fui a la ducha y al salir me puse su vestido, era suelto y cortito con la espalda al aire, precioso. Unas sandalias y lista. Al momento, tocaron a la puerta.
- Hola rey - dije sonriendo al ver a Pedri - pasa, Lu está terminando
- Qué guapa Juls - me dijo sonriendo
- Gracias, tú también - respondí devolviendo la sonrisa - ¿y tu garrapatilla dónde está?
- Terminando también, no se decidía por la camiseta que ponerse - dijo rodando los ojos
- Estoy - dijo Lu sonriendo al ver a Pedri allí
- Perfecto, vámonos - dijo él - algún día tenemos que hacer cita de 4 - confirmó mientras que me revolvía el pelo
Ojalá. Ojalá nos dé tiempo a eso.
Al rato volvió a sonar la puerta, y eran sus golpecitos de siempre.
- Joder - dijo mirándome de arriba a abajo
- ¿Qué te pasa Pablito?
- Que eres un bombón - dijo acercándose para darme un beso en la mejilla
- Bobo - reí
- Te tengo una sorpresa - me dijo acariciando el pelo
- Verás
- Vamos anda - dijo sonriendo
Me llevó a las afueras y vi desde lejos una mesita con vino blanco y un ramo de flores.
- ¿Esto es para mí? - dije mirándolo con la ilusión de una niña pequeña
- Para quién sino - rió
- A lo mejor para Susan - dije, y él me miró con los ojos entreabiertos y frunciendo el ceño
- Ya te cargaste el momento - respondió
- Es broma tonto, muchas gracias, esto es genial - dije agarrando su carita y dándole un beso en los labios
- Me encanta que por fin podamos hacer esto - sonrió
Nos sentamos y estábamos como dos tontos mirándonos y sin decir nada, hasta que rompió el silencio.
- Mañana tienes ensayo, ¿no?
- Sí, y miedo - respondí
- Juls no te vas a ir a España, eres muy buena en lo tuyo - me consoló él
- Bueno, que sepas que mañana mientras que yo ensayo tú tienes visita - dije
- ¿Martí? - dijo él con una risita
- Sí, si no me lo traigo para que juegue con vosotros me va a dar la tabarra un mes
- Claro, sabes que encantados tonta - respondió sonriendo - y... ¿has vuelto a saber algo de Isaac?
- Lo he intentado llamar para ver cómo estaba, pero me ha bloqueado de todos lados, y mis padres dicen que tampoco los han vuelto a ver - respondí
- No has hecho nada mal Juls - dijo mirándome
- Sí Gavi, me podía haber esperado, pero lo he dejado en Tokio cuando él ha venido a verme... - dije cabizbaja
- No le importó mucho cuando se fue a los 10 minutos con Susan - respondió
Tenía razón.
Estuvimos un rato más hablando y riendo, me sentía bien con él, me hacía sentir que lo conocía de toda la vida y me daba miedo sentir que estaba empezando a gustarme más de la cuenta.
Una vez que empezó a anochecer volvimos a las habitaciones para cambiarnos y bajar a cenar.
- Por fin, pensaba que no llegabas a tiempo - dijo Lu cuando entré
- ¿Qué tal tu tarde? - le pregunté
- He hecho una locura - dijo rascándose la nuca
- Lucía qué has hecho - dije mirándola fijamente
- Me ha pedido salir y le he dicho que sí - respondió
- ¿¡QUÉ!? - dije tapándome la boca
- Sé que es precipitado, sé que puede que a partir de pasado me tenga que ir, pero Julia, Pedri me ha hecho volver a sentir lo que es estar enamorada, no quiero perder el tiempo, no con él - respondió con los ojos brillantes
Le brillaban como hacía tiempo que no lo hacían, estaba tan feliz que no podía debatir nada.
- Me alegro muchísimo por ti mi niña - dije abrazándola - Pedri es muy buen chico
- Es genial Juls - dijo sonriendo como tonta
- ¿Cómo ha sido? - le pregunté mientras que me cambiaba de ropa
- Hemos estado dando un paseo y hemos llegado a un mirador precioso, hemos estado hablando de todo y bueno, me lo ha dicho
- Ay Lu - dije sonriendo - qué bonito
- ¿Les decimos luego que vengan a ver una peli? - me preguntó
- Claro - sonreí - pero venga vámonos que es muy tarde
Nos pusimos el chándal y bajamos a cenar, estaban Eric, Ansu y Asensio en una mesa y nos sentamos con ellas.
- ¿Cómo están mis niñas? - dijo Eric al vernos
- Muy bien - sonrió Lu
- ¿Queréis mañana que nos saltemos la comida esta de mierda y vayamos a comer a algún sitio? - dijo Ansu
- Nos comemos multa - dije yo
- La pago yo si hace falta, no aguanto más esta comida - respondió Eric
- Yo digo sí - confirmó Lu - y ella también
Asentí porque quién sabía si era nuestra última comida allí, y no quería que fuese alguna de las cosas que nos ponen aquí.
Cenamos entre risas y después subimos a nuestra habitación, ya que Lu había invitado a Zipi y Zape para ver una película.
- Ya estamos - me sorprendió Pedri entrando
- ¿Te sabes nuestro código? - dije confusa
Las puertas iban con códigos numéricos y me extrañó que Pedri lo supiera.
- He sido yo - escuché la risita de Lu
- Vaya dos - dijo Gavi de fondo
- Hemos traído palomitas - dijo Pedri riendo - ¿te gustan no cuñi? - me miró y no pude evitar reír
- ¿Cuñi? - rió Lu
- Estamos juntos y vosotras sois como hermanas - respondió Pedri digno
- No puedo más con la ñoñería - dijo Gavi
- Tú mejor cállate Pablito que eres igual - reí
Nos tumbamos los 4 en la cama y pusimos una peli de miedo, Gavi entrelazó sus dedos con los míos y yo me sentí en casa.
Me iba a volver loca.
Lucía y yo estábamos bien jodidas.
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Olimpiadas, ¿destino o casualidad?
FanfictionJulia, 18 años, gimnasta artística desde los 7 años. Tras la presión del sueño frustrado de mi madre de nunca consiguió llegar a lo más alto, mi nombre y el de mi mejor amiga Lucía sonaban como el futuro español en gimnasia rítmica. Las jóvenes prom...