Viaje al corazón - Historias del Grand Line III

16. Interrogatorio - Coral.

El día estaba siendo muy duro, me habia levantado con dolor de cabeza, dolor que se paso con uno de los remedios de Vera, que no dejo pasar su confusión a que padeciera una dolencia tan humana, no siendo normal en los elementales tenerlos. 

- Tomate esto si no se te pasa o si t vuelve a los pocos días me lo dices - su preocupación era demasiado, vamos hombre era solo un maldito dolor de cabeza ni que fuera algo tan grave. 

- Tranquila, de pequeña los tenía, es como una migraña elemental por falta de sueño - y más que lo sabía durante mi secuestro al dormir poco los dolores de cabeza algunas veces hasta eran bien recibidos, ya que me centraba en ellos para abstraerme de lo que realmente pasaba o me dolía más. 

Pero este dolor de cabeza no era esa migraña por falta de sueño, era algo más y creo que todo comenzaba a venírseme encima de nuevo, escuchar a más chicas destrozas contando como el cabrón que en estos momentos teníamos bajo arresto y protegíamos para que no se autolesionara y nos contara lo que queríamos había dejado que les hicieran o que el mismo habia hecho. Aun así eso no había sido lo peor de todo eso, si no el enterarnos por  uno de los exámenes médicos que una de las cuatro chicas rescatadas estaba embarazada de pocas semanas. 

Vera estaba intentando calmar a la chica que no paraba de llorar rodeada de sus hermanas, solo tenia 25 años y aunque en muchos lugares se considera que puedes tener hijos o ya deberías de ir por el segundo, esa noticia tendría que ser motivo de alegría, si mañana fuera Vera la que decía alegre un "Marco y yo estamos esperando un bebe" me alegraría por ella, pero para Jessie la mediana de las hermanas. 

- No quiero, no quiero....- sollozaba y negaba con la cabeza. Sus hermanas aunque estaban al lado de ella la miraban sin saber que decir, ninguna de las presentes sabíamos que decir. Salvo Vera que no era la primera vez que se encontraba con esta situación, pues otras chicas que estaban aquí habían llegado con el mismo "problema". 

- Primero que nada lo mejor es que te calmes - sonrió y le dio una mirada a sus hermanas para que la dejaran un rato con ella - Ahora se que es todo muy abrumador, asusta y da miedo enfrentarse a todo esto - la verdad es que cada vez me sorprendía ver como trataba a las mujeres que habían pasado por este trauma, lo que mas era que no usaba su poder para calmarlas, simplemente era el encanto de Vera. - Quiero que sepas que tienes opciones, muchas mas de las que crees y no tienes que tomarlas hoy, por suerte aun estamos a tiempo de hacer varias cosas y que lo pienses con calma - eso pareció calmar a la chica que sorbio las lagrimas y asintió. 

- ¿Qué opciones? - con sus ojos ámbar miro a la castaña que sonrió. Estas conversaciones siempre las manteníamos entre las dos, Vera las calmaba y yo daba las opciones. 

- Primero que nada que sepas que nadie e juzgara por lo que decidas y que tampoco serás extorsionada por nadie para tomar la decisión -  Este era un discurso que habíamos perfeccionado con los casos y sabía que ahora era el turno de Vera. 

- Solo serás informada en todo momento de la situación en la que estas y si te llegas a sentir presionada o de alguna forma agobiada quiero que sepas que no estas sola. - miro hacia sus hermanas que la miraban sonriendo y preocupadas, se veía que eran muy unidas. 

- Entiendo....- se le veía nerviosa pero segura de escucharnos. 

- Vale, te diré como tus estudios revelan - leí la hoja del informe medico que nos había pasado Marco - Tienes entre cinco y seis semanas de embarazo, lo que podria ser que no fueras embarazada dentro del periodo de secuestro. - Trague duro ya que esto era muy difícil - Según tus hermanas hace un mes o mas que fuisteis secuestradas - ella asintió - entiendes que te pregunte si cabe la posibilidad de que el bebe que esperas sea por una relación consentida - ella negó.