Prólogo

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Lo que se escuchaba por los pasillos de aquella escuela era el montón de pisadas producidas por los zapatitos diminutos y las risotadas joviales de los niños que jamás parecían entender lo que la campana significaba, los chicos más grandes de la escuela cedían un poco más rápido y tomaban asiento sin necesidad de que se los dijeran más veces, pero a diferencia de ellos, un salón con 25 niños de 8 años era otra historia. Al ver que todavía había niños fuera de su lugar, la maestra tomó posición al frente y miró a su alrededor, buscando a un niño que estuviera divagando en lugar de obedecer a la campana.

—Por favor tomen asiento —exclamó la señorita Lee—. Sonó la campana, saben lo que significa —de esa manera, los niños se quedaron parcialmente en su lugar. Cuando todos estuvieron sentados y con sus ojos puestos en la pizarra, la señorita Lee esbozó una sonrisa y comenzó a escribir—. La semana pasada la tarea fue escribir un ensayo acerca de su familia. ¿Quiénes...?

—¡Son! —respondieron todos los niños al unísono, algunos con más entusiasmo que otros.

—¿Y qué...?

—¡Significan para nosotros! —volvieron a responder. La señorita Lee tuvo que contener una pequeña risa que amenazaba con salir al escuchar la perfecta tonada con la que los niños respondían sus preguntas.

—Muy bien, quiero que todos saquen sus ensayos —los niños actuaron de inmediato ante la petición de su maestra, sacando orgullosamente la hoja de papel—. Los leeremos frente a la clase, justo ahora.

"Mi mamá dice que mi papá y yo tenemos un apetito saludable". Seungkwan, un adorable niño de mejillas regordetas comenzó con su ensayo.

"Mi mamá y mi papá son muy religiosos. Cuando están en su recámara en la noche, siempre los escucho decir '¡Oh, Dios!', '¡Jesús bendito!'", le siguió Hitomi.

"Mi mamá dice que los ojos de mi papá son cafés porque él está lleno de mier...-" un niño trató de comenzar su ensayo, pero fue detenido abruptamente por la señorita Lee cuando ella le gritó: '¡Kyungsoo!'.

"Mi hermano Junghyun va en octavo grado, me dijo que le preguntara a mi papá qué pensaba de D-Donal.. ¿Donald? T-trumpt... lo hice y mi papá respondió que era un papanatas... eso nos hizo reír mucho". Jungkook comenzó a reír después de su lectura, mostrándole a su grupo una sonrisa que se asemejaba bastante a la de un conejo.

"Siempre que mi tío Changmin viene a jugar póker con mi papá, mi mamá dice que el sótano huele como a cantina de segunda", a Jimin no le quedó más remedio que sonreírle a la maestra cuando ella le mostró una mirada desaprobatoria. Aun así, la señorita Lee no tuvo corazón para reprenderlo, no cuando mostraba ese par de medias lunas en lugar de ojos.

—Bueno... sucedió esto, mi perro se comió mi cuaderno. Lo revisé, pero no lo hizo en la popó —esa fue la excusa del pequeño Kim Taehyung, que era el penúltimo de la clase en pasar a leer su ensayo. Todos en el salón de clases rieron, excepto por la señorita Lee.

—Hermoso pensamiento, señor Kim, tal vez su perro se coma el cero que recibirá también —la maestra se levantó de su asiento frente al escritorio y se acercó a Taehyung para revolver su siempre alocada cabellera castaña.

—¡Oh, cielos! —exclamó Taehyung antes de regresar a su asiento con un puchero en los labios.

La señorita Lee sonrió y trató de ver a la personita faltante, al no aparecer en su campo de visión, se percató de que la pequeña dama estaba sentada orgullosamente al final de la fila como siempre, era algo bajita así que siempre era tapada por el resto de sus compañeros. —Señorita Min, falta usted, es su turno.

La pequeña Min Yoona asintió antes de tomar la hoja de papel entre sus pálidas manos y caminar al frente del salón; Yoona sabía que su maestra la estaba mirando, pues parecía siempre sentirse muy complacida con sus tareas. Yoona acomodó el moño que su papi le puso en el cabello por la mañana y se aclaró la garganta.

—Mi papi dice que la vida se divide en dos categorías: Seúl y todos los demás lugares del país.

Mi papi era un chico de Daegu que se convirtió en el más joven publicista en la ciudad de Seúl, para cuando cumplió veintisiete tenía cien personas trabajando para él y todos lo adoraban.

Mi papi amaba su empleo, pero no tanto como amaba a mi mamá, ella era editora de libros en Seúl. Cuando ella y papi se conocieron, papi dice que sus empleos eran parecidos, ambos hacían ligeras correcciones para sus clientes.

Papi trabajaba tanto que a veces mami sólo podía verlo hasta la noche, papi decía que por eso ambos amaban tanto la ciudad, porque nunca duerme... y tampoco él ni mami.

Pero después de un año en la ciudad de Seúl, papi dijo que era tiempo de mostrarle a mami de dónde venía y la llevó a su casa de Daegu, dice que la hizo pasar por "la más grande prueba que su amor podría enfrentar", es decir, presentarle a mi abuelo. Papi dijo que mami sobrevivió a su primer viaje a Daegu porque era conservadora. El día que ellos se comprometieron, ¡lo celebraron yendo por una pizza! Fue así como llegué yo.

Y después todos vivieron felices por siempre... o, bueno... casi.

Daegu girl [SOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora