"Mi Secretaria" Joel Pimentel // TERMINADA

23

— Amor, ya está todo listo, Liz y yo nos quedaremos aquí y tú traes a Richard, a y porfa ir tráeme mis cosas bebé. — estaba hablando con TN por teléfono ya que ella estaba con Liz en la cabaña.

— Claro hermosa, cuidense, te amo. — colgué y guarde nuestras cosas, los chicos ya estaban en el auto, subí mis cosas y ahora sí iríamos a la cabaña, eran las cuatro de la tarde, las chicas estaban desde temprano allá.

Después de una hora y pico de viaje llegamos, las chicas estaban en la cabaña pero en la parte trasera donde estaba la sorpresa preparada, bajamos y a Richard le vendamos los ojos, obviamente iba haciendo Miles de preguntas, llegamos ahí se quedó parado mientras que Liz empezaba a hablar, mire a mi novia que se miraba muy linda, le tire un beso y ella sonrió.

— Hola amor. — dijo Liz. — Primero que nada quiero que sepas que eres el amor de mi vida, eres el hombre con el que tanto soñe y está tarde con esta sorpresa se que nos uniremos aún más, desde que llegaste a mi vida trajiste luz y mucha felicidad a mi vida mi amor, antes de que los chicos te quiten la venda quiero que sepas que te amo desde la primera ves que te ví en ese antro, te veías tan guapo, tan lindo y tan bien muchacho que no me equivoqué, ahora seremos una hermosa familia mi amor. — nos hizo señas para que le quitamos la venda.

Richard tenía cara de confundido, Liz le dió una caja para que el la abriera, al abrirla se encontró con otra caja y luego otra caja y luego otra, otra ,otra y otra, era como diez cajas y ya estaba desesperado, hasta que llegó a la que era la sorpresa, la iba a abrir cuando Liz lo interrumpió.

— Espera, aún no, TN, el video por favor. — TN proyecto un vídeo de fotos y videos de ellos dos y en el vídeo había pequeños textos donde decía cada cosa que hacían en cada foto, al terminar los dos estaban en un mar de lágrimas, mire a TN y estaba igual, solo que ella trato de que no la viera y seco sus lágrimas, ahora sí Richard iba a abrir la caja cuando hablo.

— Lizbeth, no tengo la menor idea de lo que allá en la caja, antes de abrirla quiero que sepas que eres el amor de mi vida, eres con la persona que quiero estar, no quiero a nadie más que no seas tú, no quiero compartir mi vida con nadie más que no seas tú, es por eso que tome una decisión muy importante para los dos. — me entrego la caja y de su saco saco una cajita muy pequeña, Liz quedó en shock al momento de que Richard abrió la caja dejando ver un lindo anillo con un diamante en el centro.

— Amor, no te creo. — dijo con unas lágrimas en sus ojos, Richard se arrodilló ante Liz.

— ¿Te quieres casar conmigo? — dijo sacando el anillo para ponerlo en la mano de Liz.

— Claro que si... te amo — Richard le puso el anillo y la beso, me encantaría algún día poder pedirle a TN que se case conmigo.

— Michas felicidades amigos, les deseo... perdón, les deseo lo mejor, no puedo esto es tan lindo. — dijo TN llorando, me acerqué a ella para abrazarla, era muy sentimental que lloraba con cualquier cosa.

— Michas gracias TN, te queremos. — dijeron ellos, todos los felicitamos y ahora si Richard tomó la caja para abrirla, la abrió y su sonrisa se desvaneció, Liz también lo miro triste, todos estábamos como una película de suspenso por la reacción de Richard.

— Esto ¿Es enserio? — Liz asintió, una sonrisa se dibujó en su rostro, entonces suspiramos aliviados. — VOY A SER PAPÁ, amor es la mejor noticia que me pudiste haber dado, te amo preciosa. — la cargo en sus brazos y nuevamente la beso

— Vamos a ser papás. — dijo Liz, todos estábamos muy felices por eso.

— Felicidades bro, vas a ser el mejor papá, sin duda. — le dijo Chris abrazando a Richard.

— Si bro, serás un buen papá, te queremos. — le dijo Zabdiel.

— Oigan, Liz también será una buena mamá. — dijo Erick ya que nadie Felícita a a Liz.

— Muchas gracias Er. — dijo y lo abrazó.

Seguimos hablando del embarazo de Liz, se hizo de noche y no metimos a la cabaña porque estábamos muy cansados. TN entró a bañarse mientras yo revisaba mis redes, salió y entré a bañarme, no tarde mucho al salir estaba TN acostada esperándome con una hermosa lencería, mordí mi labio al verla, se veía jodidamente sexy.

— Ufff, no me provoques nena. — dije mirándola de pies a cabeza.

— O si no que, ¿Que hagas al respecto? — dijo acercándose a mi, esta mujer me vuelve loco.

— Estoy cansado pero contigo se me quita eso. — la cargue y la acórtale a la pared, claro que la haría mía en este momento.

— Estas tan bueno papi. — me dijo besando mi cuello.

La recosté en la cama y quite sus lencería, empecé a besar su zona y ella gemía de placer, la deseaba tanto, seguí lamiendo cada parte de su zona V mientras con mi mano jugaba con sus pechos, metí uno de mis dedos en su vagina y después otro, al parecer le encantaba lo que hacía, después de un rato se corrió en mis dedos.

— Me toca. — dijo agitada.

Bajo mi bóxer y metió mi pene a su boca, sin duda alguna ella era la mejor en todo, lo hacía tan bien que no paraba de gemir.

— ¿Te gusta? — dijo pasando su dedo pulgar por sus labios.

— Me encanta mamacita. — dijo con un gemido.

Volvió a meter mi pene en su boca, tome su cabello y la empuje para que lo metiera todo, me vine en su boca y ella no dudó en tragarlo. Se levanto y lamió sus dedos.

— Me encantas. — dijo subiéndose arriba de mi.

La volteé quedando yo arriba, metí mi miembro en su vagina haciendo que gimiera. En la habitación solo se escuchaban nuestros gemidos, mis embestían eran rápidas y fuertes, sabía que eso le encantaba a TN ya que a ella no le gustaba que se lo hiciera lento, gimió fuerte anunciando su orgasmo y después de unos segundos yo también me vine. Salí de ella y me acosté a su lado, nuestras respiraciones eran demasiado rápidas, la abracé y nos quedamos dormidos.

— La pasaron muy bien anoche verdad. — dijo Chris al vernos bajar las escaleras.

— ¿Como sabes Christopher? — dije serio.

— Bro, sus gritos se escuchaban hasta mi habitación, le dieron duro a la cama. — dijo riendo, nos causó gracia, TN se puso detrás de mi ya que estaba roja que parecía un tomate.

— Chris ya basta, estás incomodando a TN. — dijo Alessa, si, aún seguía aquí con nosotros. — Discúlpalo TN. —

— No te preocupes Alessa. — dijo acercándose a la mesa.

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