XXIII

367 43 9
                                    

- Agente del FBI Kim HyungSeo - la mujer alta y guapa se presentó - Me gustaría comenzar el interrogatorio ahora. Prefiero interrogarla a solas, Srta. Manoban sin tener a sus colegas en la misma habitación. Si puede pedirle al Dr. Kim que espere afuera, sería perfecto.

- Taehyung...

- Puedo escucharla bien, agente Kim. Estaré en la otra
habitación - se acercó a mí - Si necesitas algo, no dudes en llamarme.

Asentí.

La puerta de la habitación se
cerró.

La Agente Kim era pelinegra, con ojos oscuros, aunque no era una estrella de cine hermosa, tenía algo atractivo que le haría a cualquier persona arrodillarse.
Probablemente por la forma en que se comportaba y el poder radiante de la autoridad.

La habitación también estaba ocupada por dos hombres: Los detectives Park y Kang respectivamente.

Me miraban atentamente, como los halcones.

El agente Park estaba preparado con un iPad, tecleando.

- ¿Qué te gustaría tomar? ¿Un poco de agua, té o café? - me preguntó Kim.

- Gracias, pero estoy bien - dije.

Sabían cómo iban a traer toda la cantidad de líquido que solicitara y luego, cuando quisiera ir al baño, lo negarían hasta que la verdad estuviera saliendo de mi boca.

No iba a dejar que usaran "un baño" como cebo.

Además, no tenía nada que
ocultar.

- Srta. Manoban, ¿cuál es su relación con Jennie Kim?

- Fue mi paciente y yo fui su
enfermera asignada- respondí.

-¿Nada más que eso? - ella preguntó.

- No - dije.

Jen me había dicho que me
amaba, era una atracción que consumía mucho por ambos lados, pero no podía estar segura de lo que Jennie pensaba porque era muy manipuladora y lo podría haber dicho para beneficio
personal.

Ella era lo suficientemente
inteligente como para saber que tan pronto como saliera de aquella cabina, estaría aquí rodeada de policías
interrogándome y analizándome.

El agente Park continuó
escribiendo en el dispositivo
frenéticamente.

- Después de que fue secuestrada, señorita Manoban, ¿a dónde la
llevó?

- No puedo estar segura de la
ubicación porque no estaba
consciente. Cuando me desperté, noté que estaba en una cabaña, una muy modesta rodeada de
montañas y bosque.

Ella asintió lentamente.

- ¿Te lastimó?

- No lo hizo. Jen atendía sus
asuntos durante el día y regresaba a la cabaña por la noche.

Los agentes me miraron con
escepticismo.

Y podría apostar que no estaban creyendo una palabra de lo que dije.

Sin apartar los ojos de los míos, continué manteniendo el contacto visual.

Si pensaban que me iban a
intimidar y confesar las cosas que no sucedieron, estaban equivocados.

- ¿Mencionó a dónde iba? ¿O qué clases de asuntos atendía?

- Nunca dijo ni una palabra sobre lo que hacía, nunca me dijo nada.

-¿Nos está diciendo la verdad?

-Sí - dije.

-¿Dónde estaba Kim cuando
asesinaron a la enfermera Rosanne?

𝐌𝐞𝐧𝐭𝐚𝐥 𝐀𝐬𝐲𝐥𝐮𝐦 ➙ 𝐽𝑒𝑛𝐿𝑖𝑠𝑎Where stories live. Discover now