Mi regalo para ti

895 77 5
                                    

Dear wolf, este cap es para ti, felicidades, siempre supe que lo lograrías.

Disfrútalo.





Subí antes de que terminara por completo la celebración mientras que terminaban de darle a Thomas sus regalos.

Me doy un baño rápido, me perfumo y me pruebo el vestido de seda aperlado que me dio Hoyt.

Me queda perfecto, el escote de corazón ayuda bastante y los listones largos hacen una bonita decoración.

Me miro en el espejo, decidiendo si me dejo el cabello atado o si lo suelto.

Opto por eso último, cepillándolo hasta que queda sedoso y suave.

Me pongo en alerta cuando lo escucho subir por las escaleras de madera.

Creí que era Hoyt hasta que los pasos siguieron hasta nuestra puerta.

Me acuesto en la cama y me arropo con las sábanas, escondiendo todo mi cuerpo, menos mi cara.

Efectivamente, Bubba entra por la puerta con un semblante algo cansado pero aún mantiene su buen humor.

Se me acerca depositando un beso en mi frente y se mete al baño, poco después escucho como el agua de la ducha corre.

Es el momento.

Pateo las sábanas y me doy un último vistazo al espejo.

Quiero verme bonita para él.

Espero lo que se me antoja una eternidad y el corazón casi se me sale del pecho cuando lo escucho cambiarse dentro del baño.

Los nervios invaden mi estómago y las manos me tiemblan un poco.

Creo que nunca me había sentido así.

La puerta se abre y Tommy sale del baño, secando su cabello con una toalla que tiene sobre los hombros.

Al verme, abre los ojos como platos y retrocede un paso, puedo leer en su expresión que está atónito.

-Hola de nuevo- sonrío nerviosa -Todos ya te dieron sus regalos pero...- me muerdo el labio por los nervios mientras me acerco a él -Falta el mío.

Rodeo su cuello con las manos y él se inclina hacia delante, quedando a mi altura.

Aprovecho esta acción para besar su frente.

-¿Puedes sentarte?- señalo con la mirada la cama y este asiente, tomando asiento en la orilla -Desde que llegué con los Hewitt tú te has encargado de cuidar de mí- acaricio su pecho y subo lentamente a sus hombros -Es mi turno de cuidar de ti, ¿Puedo?

Este asiente con la cabeza y desato delicadamente su máscara, deslizándola por su barbilla hasta que se la quito por completo, dejándola sobre la mesita de noche.

El que ya no intente cubrir su rostro me da una enorme calidez en el pecho.

Me acerco de nuevo y beso sus labios.

Él toma mi cintura con sus grandes manos mientras que nuestros labios se mueven en sincronía.

Nos separamos cuando el aire se va volviendo más delgado hasta que nos falta por completo.

Sonrío al ver como sus mejillas se van sonrojando más, entonces me mira con esos ojos expresivos, pidiéndome permiso.

Asiento con la cabeza y me atrae más a él, sentándome sobre su regazo con las piernas a cada lado de su cuerpo.

Un jadeo se escapa de mis labios cuando siento un bulto formarse bajo mi entrepierna.

Suelta un gruñido gutural y delinea mi cintura con sus manos hasta que estas llegan a mi pecho, donde desata el moño en el escote con ambas manos.

My dear presentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora