E.122 Una decisión difícil

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Candy estaba muy emocionada porque visitaría su casa. Fue en esa visita cuando supo que Tom tenía novia y que pensaba casarse muy pronto: Dorothy, la que había sido mucama de los Leagan; y mucama de Candy, cuando ella había vivido en la mansión de los Andrey. Candy se sentía tan contenta, que decidió ir a visitar a Tom a su rancho. Ahí se encontró con Dorothy después de casi cinco años de no verla. Dorothy había sido requerida en el rancho de Steve y fue así que Tom se enamoró de ella. Dayiana se había dado cuenta de su edad tan joven y había aceptado que Tom se casara; además, últimamente había convivido mucho con Jimy, en el rancho del sr. Cartwright, y no se sentía sola.Durante ese tiempo, la srita. Pony y la hna. María aconsejaron a Candy que fuera a Inglaterra, como su amiga Flamy lo había hecho. Y aunque ellas y los niños la extrañarían demasiado, la animaron a que se enlistara por el bien de los soldados y de las personas que sufrían en la guerra. La srita. Pony y la hna. María sabían exactamente que Candy sería una ayuda indispensable de gozo y ánimo para las almas lastimadas y angustiadas que vivían en la guerra, en Europa. Candy recordó a su amigo Stear, quien había sido víctima de la guerra. Recordó a su colega y médico Michael, y a su compañera admirable, Flamy. Y ahora, era tiempo de que Candy fuera también, porque era su trabajo y deber como enfermera.Una mañana muy temprano, Candy se despertó con la necesidad de revelarles su verdadera identidad a sus mamás. Pasaban tiempos críticos y tarde o temprano ellas lo sabrían. Candy quería ser la que les revelara el secreto. Así que, Candy tuvo un tiempo con ellas a solas, donde les enseñó el libro, regalo de Albert, donde revelaba toda la historia secreta de Candy. La srita. Pony y la hna. María no se notaron tan impresionadas. Parecía que no era nuevo para ellas. Simplemente sonrieron, y le explicaron a Candy que cuando había sido adoptada por la familia Andrey, el mismo tío abuelo William, o mejor dicho, el mismo Albert, les había escrito una carta contándoles todo. Albert había hecho mucho énfasis en no revelarle a Candy su verdadera identidad sino hasta que éste fuera el presidente de la familia Andrey. Y que por mientras, siguieran al cuidado de Candy como lo habían hecho durante toda su vida. Les agradecía por todo lo que habían hecho por Candy, y se comprometía a siempre estar al cuidado y al pendiente de ella.A Candy le dio tanto gusto saber que Albert se había tomado la molestia de contárselo a la srita. Pony y a la hna. María. Era un peso menos el que cargaba Candy y se sentía segura de que sus mamás lo supieran, y que tuvieran el apoyo incondicional de Albert.


Fue así que, con fuerzas renovadas y con nuevos panoramas del porvenir, Candy emprendió su viaje a la guerra. Decidió llevarse a su Clynn, para que la acompañase. Se despidió por última vez de todos sus amigos del hogar de Pony: de Tom, de Dorothy, el sr. Cartwright y de Jimmy; el sr. Marsh; y claro, de sus hermanitos y mamás queridas que no dejaban de llorar.

FINAL de Candy, para todas y todes los soñadores!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora