E.135 El jardín de los recuerdos y re-encuentros

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El corazón de Candy palpitaba aceleradamente. ¿Sería cierto que Terry se encontraba en aquél lugar? Candy volteó rápidamente y divisó la figura elegante y alta de Terry. Sus ojos grandes y azules la miraban tiernamente desde el portal de las rosas. Había estado ahí parado, mirándola. De repente, todas las personas salieron a recibirlo, junto con la prensa. Toda la multitud rodeaba al actor, mientras Candy trataba de acercarse a él, sin éxito alguno.Candy escuchó que la llamaban desde el gran salón. Era Albert, acompañado de su esposa Kelly. "Ven, Candy". Candy acudió de prisa y llegó hasta Albert al mismo tiempo que Terry llegaba también. Albert hizo cesar el escándalo y pidió que la música continuara, pidiendo a la multitud que entrara al salón y gozara de la fiesta. Entonces, se volteó con Candy y le explicó: "Candy, publiqué mi compromiso en el periódico después de haber anunciado tu verdadera identidad. Lo hice a propósito, para que Terry lo viera y viniera. ¡Y funcionó!" Terry rió tiernamente. Candy se sentía dichosa al tenerlo enfrente de ella. "Terry. Estás contento, estás aquí. Terry... Terry...!"Albert se condujo a Terry y le dijo: "Querido amigo, quisiera que te quedaras esta noche aquí en la mansión de Lakewood y pasaras un tiempo aquí con todos nosotros. Sé que estás pasando por momentos difíciles, y creo que te animaría pasar el día de mañana con tus amigos. ¿Qué dices, Terry? ¿Aceptas?". – Terry se veía conmovido. Candy no sabía exactamente por qué Terry pasaba por momentos difíciles, pero igual que Albert, esperaba ansiosa la respuesta de Terry. "Albert, gracias amigo. Me encantará quedarme". Aunque Terry le explicó que ya tenía hospedaje en un hotel, y que pasaría la noche en él, pero que prometía visitar a sus amigos y pasar el tiempo junto con ellos. Albert y Candy se emocionaron mucho, y Albert, tomando la mano de Terry, la unió con la de Candy. "Y ahora, mis queridos amigos, disfruten de la fiesta!". Albert se retiró, y Terry sacó a bailar a Candy en medio de la pista. "Mi querida Julieta, gustas bailar con tu Romeo?" Terry preguntó con su tono bromista a Candy, quien accedió gustosa. Candy reconocía para sus adentros el gran esfuerzo que Terry hacía para mostrar felicidad. No sabía con exactitud la situación difícil que vivía Terry, pero apreciaba la amabilidad con la que Terry había llegado y se conducía en la fiesta, pues ella lo conocía y sabía que sufría internamente. En la pista ya se encontraban las otras parejas de sus amigos bailando también: Archie y Annie; Paty y Stear; Albert y Kelly. Y ahora, Candy y Terry.Terry miraba fijamente a Candy, y ella tampoco podía dejar de verlo. Había tanto que hablar. ¿Qué estaba haciendo Terry ahí? ¿Qué había pasado con Susana? ¿Por qué Terry pasaba por momentos difíciles? ¿Qué pasaría en el futuro? Eso no importaba ahora. Candy bailaba en la mansión de los Andrey, en Lakewood, con el mismísimo Terry. Su amado Terry."¡Candy, Terry, vengan pronto!", gritaron Annie y Stear. "¡Vengan, miren que lindo!" Terry y Candy se unieron a la multitud que había salido a la gran terraza a ver los juegos artificiales en el oscuro cielo azul. Albert había preparado toda una estupenda fiesta. Todos los invitados la disfrutaban, pero Albert se sentía aún más feliz porque Terry había acudido, y Candy estaba con él.¡Qué momentos tan felices! Gratos recuerdos con todos mis amigos aquí. Albert es un hombre muy generoso, y estoy segura que la doctora Kelly será muy feliz a su lado. Stear y Paty se ven tan contentos juntos. Pareciera si llevaran años de matrimonio. Son tan graciosos juntos. Archie está tan enamorado de Annie, al igual que ella de él... Candy, parada al lado de Terry que no soltaba su mano, pensaba para sus adentros. ¡Terry! Aquí está el muchacho que una vez me amó. Oh, Terry... ¡soy tan dichosa! ¡Qué noche tan maravillosa!

FINAL de Candy, para todas y todes los soñadores!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora