EN TÚ CORAZÓN. (Liskook/lizkook)

Cap 21

Jungkook emprendió su viaje a Winsord, no tenía las palabras exactas para explicarle a Jin lo que estaba a punto de hacer, pero trataría de ser lo más sincero posible con él.

Al llegar a la mansión del príncipe su esposa Irene lo recibió, y le indico que Jin se encontraba de cacería pero que no tardaba en llegar.

Mientras hablaba con Irene y sobre su nueva vida en Winsord decidió contarle a ella la noticia.

—Le he propuesto matrimonio a la princesa —, soltó sin más el duque. Pero Irene no emitió palabra.
—¿No estás sorprendida? — indagó él.
—No, digo, sí, solo que, me tomaste por sorpresa ¿cómo sucedió?, Estoy impresionada—, comentó Irene.
—No sabría por dónde comenzar, pero debo de decírselo a Jin—, informó el duque.

En ese momento Jin llegaba a la sala cuando escucho a su amigo.

—¿Que debes decirme? —, cuestionó Jin acercándose a Jungkook para abrazarlo.
—Iré a la cocina por algunos bocadillos, no cometas una locura mientras no estoy, amor—, le ordenó a Jin sarcásticamente.
—Es algo dominadora—, susurró Jungkook.
—Y muy enojona—, dijo divertido el príncipe.
—¿Aun no ha podido? —, indagó el duque.
—No, pero no quiero que ella piense en eso, me duele verla desanimada por eso—, expreso Jin.
—A veces tener un hijo es algo que todas las mujeres desean y más si se trata de un futuro rey—, manifestó Jeon.
—Mientras ella esté bien, no me importa nada Jungkook, mi madre me tuvo a mí y al final murió trayéndome al mundo, solo quiero que Irene este bien—, aseguró Jin.
—He pedido la mano de la princesa—, soltó sin más el duque. Sabía que Jin no era de rodeos y su visita inesperada solo significaba una sola cosa, <<algo de entera importancia>>.

Jin se quedó en silencio, no entendía porque Jungkook haría algo así.

—¿Mi hermana está loca?, ¿porque harías tú algo así? —, indagó el príncipe.
—Porque quiero casarme con ella—, aseveró el duque.
—¿Y desde cuándo?, Te recuerdo que en la casa de Meretriz hay muchas cortesanas que pasarían un buen rato contigo—, ironizó el príncipe.
—No se trata de pasar un rato Jin. Quiero hacer mi esposa a Lisa. —, aseguró Jeon.
—¡Pero es como tú hermana! —, gritó el príncipe.
—¡Pero no la veo así! — ,

—Ustedes son diferentes, tu vives para seguir las reglas, ella vive para romperlas. Ningún hombre la soporta, ¿porque tú lo harías? ¿Perdiste alguna apuesta con ella?, ¿Te ofreció su dote a cambio de librarla de mi madre?, ¿Te está obligando? —, todas esas preguntas hechas por Jin solo confirmaba algo y es que Jin conocía perfectamente a su hermana, pero Jungkook no podía explicarle que había caído en la seducción de un virgen y se había acostado con ella. Ahora ella tenía un arma en su contra que era su virtud. Si su padre o Jin se enteraran de que él había tomado su virtud serían capaz de llevarlo a la guillotina en medio de una plaza.
—Amo a tu hermana, y estoy seguro de ello. Conozco a la mocosa perfectamente y se lo manipuladora que puede llegar a ser, pero esto es real—, sentenció el duque.
Luego de esas declaraciones el príncipe y el duque habían llegado a un acuerdo, pero Jin no estaba del todo convencido sobre la idea de un matrimonio entre su hermana y su mejor amigo. Jungkook le había dicho que la reina no había tomado con buena cara la decisión de su hija al aceptar casarse con él, pero debía presentarse ante ella.

Después del duque culminar su visita, debía dirigirse a Londres. Tenía intención de hablar con la reina misma, pero ver la forma como había golpeado a Lisa simplemente le había provocado aflicción, aun no se unían en matrimonio y ya ella había empezado a sufrir por su causa.
Des pues de dos días el duque solicitaba una audiencia con la reina y aunque dudo por un momento que esta la aceptara se sorprendió a recibir un mensajero del castillo notificándole que la reina lo esperaba.
Esa misma tarde caminaba por los pasillos del castillo para encontrarse con la reina. El mayordomo real le abría la puerta para hacerlo pasar al interior de aquel salón.

—Buenas tardes, majestad—, saludaba el duque realizando una venia.
—Duque Jeon—, anunciaba la reina mirándolo fríamente.
El ambiente se tornaba algo tenso pensó el duque y aún no había iniciado la conversación.
—Comience, usted ha pedido una audiencia con su reina—, ordenaba Hyoyeon
—Mi reina sabe el motivo de mi visita, he pedido la mano de la princesa al rey—, expreso sabiamente Jungkook.
Hyoyeon conocía el poder de persuasión del duque, todos en Londres conocían su habilidad para ganar cualquier conversación, el mismo Jin se jactaba de decirlo, pero si el duque pensaba que ella sería un hueso fácil de roer, estaba equivocado.
—¿Por qué desea casarse con mi hija? Los hombres de su clase no se enamoran, tal vez Lisa sea una niñata inexperte, pero su madre no—, manifestó la reina.
—No estoy aquí para probar mi amor, estoy aquí para pedir su aceptación en el compromiso y su bendición—, declaro firmemente el duque.
Jeon no daría su brazo a torcer delante de la reina, podía ser la madre de Jin y Lisa, la reina de Inglaterra, pero si algo lo caracterizaba en todo Londres era su instinto feroz en las negociaciones y la reina veía a su hija como una.
—¿Qué ganaría yo con permitir esto? Si casara a la princesa con algún príncipe tendríamos uniones comerciales, dos grandes familias se unirían, alianzas militares sin contar que sería heredera al trono de alguna nación. ¿Por qué permitiría que una princesa se convirtiera en duquesa, cuando puede llegar a hacer reina? —, indico Hyoyeon.
—¿Acaso valora tan poco la vida de su hija?, ¿Es la princesa algún animal para comercializarla a cualquier hombre que le ofrezca beneficios?, ¿Sacrificaría a la princesa condenándola a un matrimonio forzoso? Confiaba en la sabiduría de mi reina—, comento el duque pacientemente.
—Jeon, todo lo que tocas lo destruyes, tu madre, tu padre; ¿qué diferencia existe entre condenarla a ti a condenarla a otro? ¿Crees que la princesa te ama?, nunca ha puesto un pie fuera del castillo excepto para los bailes. ¿Qué le hace pensar que ella conoce tal sentimiento?, Es una niña caprichosa y mimada por su padre—, 
—¿Entonces la reina ha fallado?—, reto el duque llamando la atención de la reina.
—¿Qué dice?—, espeto Hyoyeon.
—La reina ha fallado en la crianza de la princesa. Le ha entregado a Londres una princesa caprichosa y mimada, y también a su futuro esposo—, sentenció Jungkook.
—Es un insolente Sr. Jeon, casare a Lisa con cualquier príncipe que haga una propuesta, enviare cartas alrededor del mundo si es necesario hasta asegurarle un esposo digno de esta realeza, y esto solo será parte de una triste e insignificante historia para usted—, vociferó la reina.
—Este insolente es el único que puede casarse con su hija, majestad—, 
—¿Y que lo hace estar tan seguro? —, indago la reina.
—La prueba de la virtud de la princesa yace sobre mi cama, esta arruinada. Yo he tomado su inocencia y ningún hombre excepto yo, tocara a la princesa—, ladró Jungkook.
La reina Hyoyeon rabio en colera, poniéndose en pies para mirarlo con desdén.
—¿Qué ha hecho? —, inquirió la reina.
—El oprobio amenaza con consumir la familia real si se niega a aceptar esta unión—, manifestó Jungkook, poniéndose en pies.
—¿Acaso me está amenazando? El rey se enterará de esto y Jin nunca aceptaría esta unión, sabe que usted es un liberto—, grito Hyoyeon.
—El rey sabe de la deshonra de su hija y Jin me ha dado carta para presentarla delante de la reina, acepta la unión. El príncipe sabe que soy un libertino, pero también sabe que no hay otro hombre en toda Inglaterra más honorable que yo—, afirmó el duque.
—¿Qué pasara si no acepto esto? —, indago la reina.
—Majestad, con todo respeto, usted es quien vive de la sociedad y sus apariencias; la vergüenza de la princesa recaerá sobre la reina—, declaro él.
—Nadie jamás ha amenazado a la reina, y quienes lo han hecho no viven para contarlo—, 
—Lo sé. El hijo y el nieto de Lady Choi murieron de una forma desconcertante, aun no me explico cómo su carruaje cayo por ese despeñadero, cuando los dos venían ante el rey, para denunciar a su padre, el duque. Su padre tomo las tierras que pertenecían a la familia Chou majestad, ¿no lo sabía? —, declaro Jeon.
La reina se quedó en total silencio, no entendía como el duque Jeon. comentaba sobre esto. Hace ya varios años que su padre había muerto, el duque, era un conquistador de tierras, y haber logrado convencer al rey  de que su hija Hyoyeon era la candidata perfecta para ser su esposa, solo era parte de su plan. Tener a unas de sus hijas como reina de Inglaterra solo había logrado afirmar su poderío sobre los más pobres.
—¿Cuándo seria le fecha del compromiso Sr. Jeon?, debe hacerse público un mes antes de la boda—, indico la reina finalmente.

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