Jenna Ortega O.S

𝑉𝑜𝑙𝑣𝑒𝑟

-No puedo creer que ya llevemos un año desde que nos fuimos de Woodsboro- Mi hermana y yo estamos en la sala de la casa tomando café.

-Si, el tiempo se pasa rápido-

-¿Aún piensas en ella?- su pregunta me tomó por sorpresa, fruncí el ceño para después dejar mi café en el suelo y reincorporarme en el sofá.

-Las cosas con Lily se están dando, pienso decirle mañana que estoy lista para intentarlo- respondí mirando al suelo, después de unos segundos miré a mi hermana con una sonrisa.

-No es lo que pregunté.

-Por favor, Jane.

-Pero estoy muy feliz por ti, ya es tiempo de que sigas con tu vida y que lo que hiciste no te detenga, todos cometemos errores.

-Gracias, ahora debo irme, quedé de llevar a Lily al centro comercial- me levanté y tomé las llaves de mi auto.

-¿No estarás con ella allá?.

-No va a hacer compras, ahora trabaja allá- dejé un beso en su mejilla- No tardo, le avisas a mamá que salí, por si te llama y pregunta por mi.

-Claro que si, no le voy a mentir diciendo que estás dormida.

Reímos y salí.

.

Después de dos horas llegué a mi casa, entré a la sala y ahí está mi hermana hablando por celular preocupada.

-_______ acaba de llegar, hablamos después- cortó la llamada y la miré confundida.

-¿Qué sucede?.

-Por favor mantén la calma, ¿está bien?- eso no ayudó en nada porque me empiezo a desesperar.

-¡Dilo!- alcé un poco la voz- Lo siento, por favor, dime de una buena vez que pasa.

-Es Tara, alguien con una mascara intento asesinarla anoche con un cuchillo- Sentí que mi mundo se vino al suelo.

-¿De que...?- mis ojos se cristalizaron- Debo verla- salí de mi casa rápido y mi hermana me sigue.

-_______ detente- me tomó del brazo pero me solté- Iré contigo, ella está bien, está en el hospital recuperándose.

-Está bien, vámonos ya. Conduce tú.

.

Después de cinco horas de camino, llegamos. En recepción pregunté por Tara y fui camino a su habitación. Tomé un respiro antes de abrir la puerta, hace un año no sé nada de ella.

Abrí la puerta lentamente y la vi, estaba hablando con su hermana pero al escuchar la puerta ambas me miraron.

-Tara- logré decir con mis ojos cristalizados. Me acerqué a ella y la abracé con cuidado de no hacerle daño, tardó un poco en corresponder pero lo hizo. No pude evitar contener mis lágrimas. Me separé y tomé su cara con mis manos. -Lo siento mucho, de verdad. Lo lamento tanto.

Ella negó con lágrimas en sus mejillas.

-No es tu culpa, _______. Está bien, no te lamentes.

Me levanté de la camilla y respiré hondo secando mis lágrimas.

-Hola Sam.

-¿Qué haces aquí?, debes irte, vete.

-Samantha, por favor...

-Sam, está bien, déjanos un momento solas- Miré a Tara sonriendo un poco, ella solo miró a otro lado y eso me dolió.

-Bien- pasó por mi lado chocando mi hombro y suspiré. Salió de la habitación junto a un hombre.

-No había visto a ese sujeto, ¿Quién es?.

-El novio de mi hermana. ¿Quién te contó lo que pasó?- Me senté de nuevo en la orilla de la cama.

-Mi hermana me contó pero no sé quien le dijo a ella, no pensé en eso en ese momento.

-¿Viniste sola?.

-No, mi hermana me trajo, está afuera de esta habitación. Lamento mucho lo que te sucedió, desearía haber estado contigo...

-Pero no fue así- me interrumpió y asentí, miré al suelo mientras contuve mis lágrimas- Perdón, yo solo...

-Está bien, de hecho me lo merezco, te hice mucho daño y es algo de lo que me siento muy arrepentida.

-Nunca me buscaste.

-Creo que debemos hablar de lo que pasó- ella asintió- pero en otro momento, ahora necesitas descansar.

-Está bien.

-¿Puedo pedirte algo?- Tara solo me miró- ¿Me dejas quedarme contigo al menos por unos días hasta que salgas del hospital y atrapen al maldito que te hizo esto?.

-No lo sé, _____-

La puerta se abrió dejando ver a Sam con su novio, la oficial Judy, Amber y Jane.

-Querida- mi hermana se acercó a Tara y la abrazó- recupérate pronto.

-Gracias Jane.

Me levanté y me quedé al lado de Tara.

-¿Que crees que haces aquí? ¿Después de todo lo que le hiciste a Tara te atreves a aparecerte aquí?.

-No quiero problemas, Freeman. Me preocupé por Tara y vine a verla, no es asunto tuyo.

-Si se trata de Tara si lo es.

-Ya basta- la oficial me miró seria y asentí- ¿Cuándo volviste?.

-Hace unas horas llegamos, no sabía nada de ellas ni ellas de mi.

Después de que nos interrogó por lo que pasó con Sam, se fue y Samantha pidió hablar un momento con Tara. Todos salimos del cuarto.

-Iré por algo de tomar, ¿quieres algo?.

Negué y mi hermana fue a la cafetería, Amber se puso frente a mi con sus brazos cruzados.

-Te pediré el favor de que te vayas de una maldita vez y no vuelvas- esta chica empieza hacerme perder la paciencia.

-No puedo ayudarte con ese favor, a menos de que Tara me lo pida no me iré- me acerqué a ella- Y ambas sabemos que ella no lo hará.

-No estés tan segura, la Tara de hace un año no es la misma de ahora.

-Puede que tengas razón, pero no me iré si ella no me lo pide, entiende.

Amber se fue muy molesta, empezamos a escuchar a Tara gritando, Sam salió llorando, entré a la habitación y la abracé sin pensarlo, rompió en llanto y la abracé con un poco más de fuerza sin lastimarla, cuando se calmó me alejé.

-¿Me dejas quedarme contigo?.

-Quédate, está bien- sonreímos.

-Gracias.