3."UNA SEPARACIÓN"

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Carlos De Gales

—su majestad—menciona diana mientras hace una reverencia a mi madre.

—es un gusto verte, diana—dice mi madre con amabilidad mientras le brinda una sonrisa.

Miro el reloj en mi mano por quinta vez desde que llegué aquí, tenía que verme con Camila en unos minutos y no sabia que haría para salir de este lugar.

Mi madre había pedido vernos, sabía que esto no era nada bueno, ya que no pidió la presencia de los niños. Se que tiene conocimiento sobre los problemas que hay en mi matrimonio, gracias a las constantes discusiones en el palacio. Un sermón nos esperaba nuevamente y yo tenía que ir con Camila.

Ella era mi escapatoria de todo esto, con Camila podía ser transparente sin necesidad de fingir, sin tener la preocupación de hacer algo mal y ser juzgado, ella es mi libertad.

—tomen asiento—dice mi madre mientas apunta con su mano uno de los asientos.

Miro a diana pasarme por un lado y tomar asiento en el lugar que mi madre apunto, levanto la mirada hacia mi padre, el cual me mira con severidad. El es el más apegado a diana y se que la aprecia demasiado, seguramente ya se entero de nuestros problemas al igual que mi madre.

Me doy la vuelta y me siento junto a diana, conservando mi distancia.

Miro a mi padre ir junto a la reina y sentarse a su lado en forma de apoyo, mi madre toma una postura recta y no muy amigable, puedo ver el enojo en su rostro.

—supongo que saben el porqué están aquí—la reina menciona.

—lo intentamos madre, pero definitivamente, diana y yo no tenemos nada en común—le respondo con sinceridad, sabía a donde iba con todo esto.

—las discusiones son constantes y recibo quejas a diario, no pueden ni siquiera sentarse a convivir juntos en la mesa. No son dos adolescentes, tienen dos hijos, a los cuales les afecta su comportamiento, no crean que por su corta edad no se percatan de lo que sucede, en especial William—mi madre dice con severidad, miro de reojo a diana quien mantiene la cabeza baja e intenta no mover sus manos.—pensé que después de tu ruptura con la señora Parker, las cosas mejorarían.

No dije nada al respecto, mi madre pensaba que había dado por finalizada mi relación con Camila, cuando no era así y al parecer diana no se lo había contado.

—¿de que ruptura habla su majestad?—pregunta diana un poco incrédula.—Carlos aún mantiene su relación con Camila y precisamente ella es el tema principal de nuestras discusiones.

El rostro de mi madre se torna en una confusión, mientras yo solo siento el frío hacerse presente en mi cuerpo, malditacea esto me traerá problemas.

—¡Te dije que terminaras con esa relación, que es lo que te pasa, pensé que había criado un hombre de verdad, no un idiota que no sabe entender!—mi padre levanta su tono de voz y me reprocha con severidad.

—¡son ustedes los que insisten en mantener este matrimonio, aún sabiendo que vivo un maldito infierno, que cada día es peor!

—no eres el único—la voz de diana se hace presente en el lugar y un silencio profundo acoge la habitación y todas las miradas se dirigen hacia ella. No era muy común que diana interviniera o diera su opinión sobre este tema, así que también me tomo por sorpresa.—vivo un infierno a diario a tu lado, créeme que un amor no correspondido, duele más que casarse con alguien por obligación.

Su mirada y la mía se conectaron al instante, sus ojos estaban por llenarse de lágrimas pero ella las contenía, sin embargo en su rostro no presentaba algún tipo de afecto, algo que siempre había podido ver en diana.

Yo amaba a Camila, la amo y estoy seguro que es con la mujer que quiero estar, pero una sensación extraña se hizo presente al ver el dolor reflejados en la mirada de diana.

—esto se va a solucionar, diana. Carlos tendrá que dejar su relación con esa mujer, porque además ella también es casada—mi madre finalmente habló.—así que terminaras con esa relación.

—no lo haré—mire a mi madre, reaccionando al instante.—Camila es la mujer que amo y todo este matrimonio se hizo gracias a que ustedes no la aceptan. No dejaré mi relación con ella porque es la única persona que realmente me entiendo, ¡Porque ella es a quien amo y no a diana!

—¡No es necesario que lo recuerdes y quédate tranquilo, no tienes que acabar con esa relación, porque ahora tengo tus mismos intereses, quiero el divorcio!

El silencio se hizo presente en el lugar por segunda vez, pero ahora era un silencio tensionante y que pesaba demasiado.

Era la primera vez que esas palabras eran mencionadas por diana, el divorcio era algo que ella intentaba alejar y hacer que nuestro matrimonio funcione, aunque yo quería el matrimonio, escuchar que ella mencionara eso realmente me sorprendió.

—no, el divorcio no es una opción para ustedes—dijo mi madre con notable preocupación, pero haciendo ver su autoridad.

Diana me miraba esperando una reacción de mi parte.

—hagamos esto, ustedes no se pueden divorciar, pero si quieren separarse, adelante, dentro de Kensington hay demasiadas habitaciones y es un lugar muy grande, lo suficientemente para que no se crucen y los niños, permanecerán cerca de diana—mi padre dice y miro como mi madre lo voltea a mirar con sorpresa, pero después de unos minutos ella vuelve a vernos.

—si no se entienden, adelante, separense. Pero esto, solo se quedará en la familia, frente a los medios ustedes siguen siendo un matrimonio feliz—todo esto me toma por sorpresa, aunque claro, todo esto no es una separación del todo.—por último, espero dejen las niñerías y por lo menos logren entenderse por los niños.

Los dos se levantan y después de eso diana y yo también lo hacemos.

—solo aceptamos esto por la tranquilidad de las personas que trabajan en Kensington, pero recuerden, nunca llegarán a firmar un divorcio.

Dice por último y los dos salen del lugar, diana y yo hacemos una reverencia, hasta que el sonido de las puertas cerrándose inunda el lugar, aún así ese se pierde poco a poco.

—ya tienes lo que querías—menciona diana sin muchas ganas.

—no, lo que yo quiero es el divorcio.

—yo también—dice ella y voltea a mirarme.—lastimosamente estamos amarrados a este matrimonio, que realmente es un infierno. Pero solo te quiero decir que, no desquites tu odio hacia mi con William y Harry, ellos no tienen la culpa de nada, espero lo tengas presente.

—diana—la detuve al ver que quería darse la vuelta.—tu lo has dicho, estamos atados a esto y sabes que tu cambio me parece extraño.

—¿por qué? Era lo que querías no? No logramos obtener el divorcio, pero nos veremos lo menos posible dentro del palacio.

—espero no haya nadie que interfiera en este cambio—no sabía de donde salían mis palabras, pero odiaba imaginar que su cambió se debía a eso, pero es lo único que en este momento pasaba por mi mente.

—no...—mire como diana se detenía a si misma.—no es algo que te importe, después de todo, si tu estas con Camila, yo también puedo estar con alguien más.

¿ODIO O AMOR?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora