The Second Time I Meet You [L.S]

4. Lovers in poems

El fin de semana de Louis había sido muy caótico.

Primero había asistido a la despedida de soltero de su mejor amigo, luego se encontró con su ex-novio de hace cuatro años y se besó con él, además de que creía seguir perdidamente enamorado de éste. Y por último —y como si lo anterior no fuera suficiente—, su otro mejor amigo había comenzando a ser demasiado cariñoso con él, algo que si hubiese sucedido tiempo atrás antes de que apareciera Harry, a Louis no le molestaría.

Tenía su vida muy organizada y ahora todo era un caos. Sentía que sus emociones se desbordaban y no le permitían pensar con claridad. Creía que llevaba todo el peso del mundo sobre los hombros y que necesitaba con urgencia unas vacaciones.

Louis sacó los exámenes ya corregidos de su bolso y fue entregando uno por uno a cada alumno correspondiente.

—Estoy muy orgulloso. Se nota que sí estudiaron. Espero que continúen así —Los felicitó Louis cuando terminó de entregar cada uno. Se dirigió a su escritorio y se sentó—. Para la próxima clase de literatura voy a querer que me traigan un poema escrito por ustedes basado en dos amantes de la época que prefieran. Eso también tendrá nota para la materia de historia. Elijan el año y situación que quieran, pero que no sea muy corto. ¿Alguna duda?

Louis al ver que ninguno de sus estudiantes presentaba ninguna, siguió con la clase.

Su hora de clases había llegado a su fin y Louis ya estaba listo para irse. Se encontraba solo en el salón de clases y terminaba de guardar sus cosas cuando una de sus alumnas entró.

—¿Puedo hablar con usted un momento, profesor Louis? —Le preguntó ella a él suavemente.

Louis dejó lo que estaba haciendo y le prestó atención.

—Claro, Valerie.

Ella, quien estaba en el marco de la puerta, avanzó unos cuantos pasos para adentrarse y terminó parada frente a Louis.

—Respecto a la tarea que nos asignó sobre el poema... —comenzó ella con una nota de nerviosismo en su tono—. Mire, no soy buena escribiendo, ni siquiera me sé expresar correctamente. Y tengo cero imaginación.

—Valerie, no te presiones. No les pido un poema muy largo y estructurado. Solo quiero ver que está puesto en sus capacidades para escribir. Tu nota va a estar basada en el esfuerzo que le hayas puesto al poema, en si yo veo si pusiste tu corazón a la hora de escribirlo.

—Lo que pasa es que mi falta de imaginación también es otra historia —agregó de manera pesimista.

—No tienes que inventarte nada. Si quieres incluso toma la historia de dos personajes conocidos o que a ti te gusten, como Anne Elliot y Frederick Wentworth.

Valerie parecía un poco más segura y convencida ahora.

—Creo que no sería tan difícil de ese modo.

—¿Lo ves? —Louis le sonrió.

—Muchas gracias. Tomaré muy en cuenta sus consejos y le daré el mejor poema que haya leído de alguien de esta escuela.

—Eso espero.

La vio irse por la puerta y Louis volvió a quedar solo, pero no fue por mucho, ya que Zayn ingresó al salón justo cuando el castaño ya había terminado de guardar todas sus cosas.

—¿Quién rayos es Frederick? —preguntó a Louis. Al parecer había escuchado su conversación con su alumna.

—Un personaje literario —contestó sin ofrecerle mucha importancia a aquel asunto—. ¿Estás emocionado por esta noche? —Cambió de tema, refiriéndose a la boda.