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Hugo despertó, se preparó para otro día de trabajo, desde hace un mes que está investigando las desapariciones del pueblo de Marsella, algunos creen que se trata de algo más que coincidencia.

Después de comer una tostada con café, abrió la puerta, pero antes de salir casi olvida su placa, volvió por ella y salió rumbo a la estación de policías del pueblo, fue en un auto negro, un poco viejo, pero le servía para su transporte.

Al llegar a la estación vio algunas madres que le exigían respuestas frente a todas las desapariciones, él se paró un minuto y les dijo que haría todo lo posible, que tuvieran un poco de paciencia para que se hiciera justicia.

Hugo entró a la estación allí se reunió con un equipo, los encargados de investigar las desapariciones.

-Buenos días chicos cómo vamos - dijo Hugo - ¿Algo nuevo?

-jefe este caso no tiene como resolverse, solo son chicas que huyeron.

-son demasiadas para creer eso, aparte la primera apareció enterrada sin ojos, así que no podemos descartar nada.

-¿Usted cree que es el mismo que el asesino de Dubái?

-claro porque más aparecería sin ojos eso no tiene sentido.

-¿Pero por qué lo enterraría? El asesino de Dubái nunca lo hacía.

-porque uno de sus ojos quedó mal, tal vez no le gustó el resultado y decidió enterrarlo.

-¿Pero por qué el resto de cuerpos no aparece?

-Eso es lo que debemos averiguar, vamos denme ideas, alguien.

-están enterrados en algún lugar, cambió de sitio, no quería ser encontrado, no sé porque, pero si no hemos encontrado el cuerpo, debe ser por eso.

-¿alguien más?

Todos guardaron silencio.

-bueno pues vamos a empezar a buscar en los alrededores, buscaré un equipo que se especializa en esto.

Hugo fue hasta su oficina y tomó el teléfono buscando alguien que le ayudará con un equipo para la búsqueda.

consiguió el equipo y esa misma tarde salieron a buscar en los alrededores del pueblo, Higo fue a hablar con los que analizaron el primer cadáver, fue hasta su consultorio.

-Buenas tardes doctor.

-detective, que sorpresa verlo por aquí.

-se que va a odiarme por esto, pero de verdad necesito que me recuerde un poco la memoria con la chica que encontramos enterrada hace unas semanas.

-si claro, pues como te dije le faltaban dos ojos, fue transportada hasta el lugar del entierro, pero si no mal recuerdo no fue muy profundo, y según uno de sus muchachos parecía que estuviera recién enterrada.

-si, pero eso no me dice nada.

-Hugo ¿Quién dio el aviso del lugar?

-bueno alguien llamó a la línea de la policía, no dio nombre solo dijo que parecía algo raro como una tumba.

-¿No has considerado que sea el mismo que llamó?

-si, pero no tendría sentido, si quiere los encontramos ¿Por qué no ha vuelto a hacerlo?

-algo cambió.

-él problema sería ¿por qué?

-o ¿por quién?

-claro.

-te lo digo porque aunque esto no lo puedo demostrar, te acuerdas que te dije que un corte en el ojo era demasiado limpio y cuidadoso, pues el otro fue muy malo, pero creo que deberías considerar que ese corte malo sea de alguien más.

Asesino SueltoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora