Diario de un loco

Día 5: Unerwarteter Besuch

Ayer hablé con OMS y dijo que no tenía nada, que estaba perfectamente sano y cuidado.

Por una parte me halagó y por la otra me puso en duda.

Si no es un tema médico, ¿qué me pasará?

¿Será una enfermedad instantánea?

Creo que me estoy montando mucha paranoia.

Tenía el día libre y no podía estar más aburrido.

Estaba tirado en el sofá con Alena encima mío, ambos descansando.

En la televisión se reproducían las noticias de la tarde, lo típico: China haciéndose el "neutral", Rusia al borde del colapso, Ucrania en su papel de víctima, USA tentando a su suerte y a la de todo el mundo...

En serio, ¿tanto les cuesta revelar sus verdaderas intenciones?

¿Podrían al menos molestarse en disimular que no están buscando cualquier excusa para matarse entre ellos?

¿De verdad era totalmente necesaria otra guerra?

¿Por qué están tan sedientos de sangre?

Son todos unos asquerosos hipócritas.

Los único que no fingen lo que quieren, no tienen miedo a lo que les digan, por muy fuerte que sea el asunto, son Rusia y sus amigos.

Saben que tienen mucho que perder y poco que ganar y, aún así, siguen luchando por lo que creen.

Verdaderamente, los admiro; no muchos se atreverían a hacer lo que ellos hacen día tras día.

Totalmente hundido en mis pensamientos no escuché abrirse el cerrojo, como tampoco noté que Alena se había bajado de mí.

Al percatarme la llamé para estar juntos un rato más, pero ella no contestó.

Escuché pasos dirigirse a donde estaba yo, poniéndome los pelos de punta.

Giré la cabeza rápidamente hacia la puerta logrando ver a mi perra seguida de alguien más.

Vi a mi hermano gemelo RDA plantado en el marco de la puerta, sonriéndome como si la casa fuera suya.

Obviamente, corrí a abrazarlo; hacía por lo menos un año que no lo veía y le echaba de menos.

Seguía prácticamente igual a como lo recordaba: pelo negro azabache algo despeinado recogido en una coleta, ojos rojos escarlata que brillaban con un no se qué especial, su sonrisa fanfarrona de siempre, camiseta de tirantes, pantalones por las rodillas y botas militares estilo soviético.

Aunque sea un revolucionario y temerario, realmente no me importa, lo quiero como siempre lo he querido, tal vez más.

Nada más llegó se puso a hacer su "trabajo" como hermano mayor, que obviamente era puro desparpajo.

Pasamos una tarde de risas y comentarios que no se considerarían demasiado bien vistos por la sociedad.

Pero estábamos entre hermanos; lo que hablamos ahí se queda ahí, siempre fue así.

También se quedó a comer bajo petición mía, una peno que no quiso quedarse a dormir.

Comimos salchichas y cenamos Palmeni hechos por RDA.

Tengo que admitir que me encanta ese plato, y más hecho por él.

Me encanta como puede hacer un plato típico ruso con su toque alemán, simplemente exquisito.

Tras una cena maravillosa, muchas risas y comentarios mordaces calló la noche.

Apesadumbrado tuve que aceptar que mi hermano no se iba a quedar para dormir, por mucho que insistiera.

Se despidió de Alena con mucho cariño y de mi con un fuerte abrazo con sus fornidos brazos y un beso en la frente.

Salió de mi casa para teletransportarse a la suya.

Fue un día maravilloso la verdad, hacía mucho que no le veía y le echaba mucho de menos.

Creo que voy a ir a verlo mucho más a menudo a partir de ahora.

28/03/2023

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Una pequeña curiosidad; los países pueden teletransportarse en su territorio.

Por ejemplo: España podría ir desde Sevilla a Madrid en apenas 1 segundo. Pero esto sólo es posible en su territorio, no puede ir a Portugal así; a menos que Portugal se transportase tocándole.

Vamos, en su país, solo; tocando a otro país, a ese mismo país.

No sé si me he explicado, cualquier duda me preguntáis.

Cualquier falta también me dicís.

Nos leemos!