Capítulo 5

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⊱ Sanción injusta

ㅡ¡No huyas, buena para nada! ㅡLos gritos incesantes de la alfa no paraban nunca, y obviamente las ganas de seguir corriendo para Jennie aumentaban palpablemente.

Luego de un par de crueles segundos, la rubia percibió no muy lejos de ella, la gloriosa y gran puerta de su salón. Aquella que sería su salvación ante cualquier ataque que Lisa quisiera hacerle. Festejó internamente al notar que estaba entreabierta, por lo cual su llegada sería estruendosa pero muy significativa para ella.

Cualquier cosa lejos de la pelinegra era bien recibido.

Sin embargo, su proyección para el futuro cercano se vio interrumpida cuando el rector de disciplina y valores, se interpuso en la puerta, haciéndola detener abruptamente.

ㅡJoven Kim. ¿Qué cree usted que hace? ㅡrápidamente la tomó de la muñeca, reforzando el agarre.

ㅡB-buenos días, señor Chang.

El sonido potente de un silbato resonó junto a otro grito. ㅡ ¡Oiga, joven Manobal. Diríjase hacia acá!

Para la omega ya no era novedad alguna que el rector supiera los nombres de todos los alumnos, al fin y al cabo ese era su trabajo: procurar por el orden y el cumplimiento de las normas que incumben a los estudiantes, ya sean nuevos o antiguos en la escuela.

Lisa bufó desde la cierta distancia que tenía con los otros dos. ㅡNi de broma me acerco. ㅡmurmuró para sí misma.

ㅡ¡Acérquese en este mismo instante! —volvió a gritar, enojado por la desobediencia de la pelinegra.

ㅡ¿Qué es lo que está pasando? ¿Qué es todo este escándalo? ㅡcuestionó de repente el profesor Do, cerrando la puerta detrás de él para observar a su alumna junto al rector.

ㅡBuenos días, maestro Do. Ciertamente lo que pasa aquí es alarmante, la joven Kim ha estado atravesando el pasillo de manera indisciplinada junto a la estudiante recién ingresada.

Do mostró una mueca escéptica, no podía creer que una de los mejores de su clase estuviera haciendo tremendo desorden.

ㅡN-no es así. Lisa Manobal estuvo siguiéndome, ella q-quiso golpearme.

ㅡ¡¿Qué, cómo es eso posible?! ㅡde inmediato Chang se alarmó, mirando nuevamente a la alfa pelinegra. ㅡ ¡Venga en este mismo instante, ahora! ㅡgritó con aura demandante.

Lisa en cambio estaba por huir, de no ser porque la odiosa voz de su prima se coló por su mente.

"¿Quieres meterte en más problemas?"

"¡Lisa, tus padres dijeron que si recibías una queja más por parte del director ya no volvían a matricularte en otro colegio! ¡¿No crees que ya es mucho?!"

Y quizás lo que más odiaba es que Minnie tenía malditamente la razón.

ㅡ¡Lalisa Manobal, es la tercera y última vez que la llamo por voluntad propia!

La mencionada frunció el labio, lanzando una mirada de odio hacia la omega. Al parecer una enemistad se había creado.

ㅡBuenos días. ㅡhabló con desinterés.

ㅡEs usted muy inteligente al venir, joven Manobal. ㅡel rector soltó a Jennie para colocarla cerca de la alfa, ambas vigiladas también por la mirada neutra del maestro Do. ㅡ Porque me acabo de enterar que usted agredió a un alumno días antes y, ahora, anda violentando la tranquilidad de la joven Kim.

ㅡ¡¿Qué?! ㅡexclamó enojada. Era claro que lo primero dicho si era cierto pero... ¿Violentar contra Jennie? ¡Eso no era cierto!

ㅡDos incidencias en menos de una semana, sumando una tercera si es que cuento sobre su reacia actitud a desobedecerme por sobre lo permitido en este colegio.

ㅡAjá, sí. ㅡsusurró, cruzándose de brazos para escuchar el posible sermón que le dirían comúnmente. Ahg, estaba tan aburrida de eso.

ㅡJoven Manobal, le pido su atención a esto. No estamos jugando ninguna broma y tampoco soportaremos actitudes como la suya. ㅡaclaró Do. ㅡ Por lo que a mí respecta, debido al haber interrumpido mi clase y siendo exactamente mis alumnas a esta hora de la mañana, les dejaré un extenso trabajo de investigación y exposición que valdrá la mitad de su promedio en este bimestre.

ㅡ¿Qué? P-pero profesor... ㅡJennie intentó quejarse, ella nunca había sido regañada y mandada a hacer tal tipo de actividades repentinas.

ㅡY según el libro de reglas y sanciones reescritas por el comité de disciplina, ambas alumnas: Manobal y Kim, quedan sancionadas con ayudar al servicio de limpieza en este centro cuando la jornada estudiantil termine.

ㅡ¡Me deben de estar jodiendo! ㅡgruñó la pelinegra.

ㅡ¡Joven Manobal! Le prohíbo que ande manipulando ese vocabulario soez en el colegio o me veré obligado a mandarla a la oficina del director. Las espero a ambas en el horario de salida para hablar más sobre el tema. Cuidado con pasarse de listas y escapar, tengo registrado los números telefónicos de todos los padres de familia. ㅡadvirtió seriamente. ㅡ Bueno, profesor Do, lo dejó encargado de ambas. Hasta luego.

ㅡManobal, Kim. ㅡlas llamó. ㅡ Al salón, ahora.

Las aludidas siguieron el paso del maestro, dándose leves empujones en el proceso.

ㅡEl trabajo que mencioné allá afuera ㅡhabló pausadamente ni bien tomó asiento, cerciorándose de que los demás estudiantes siguieran con la lectura. ㅡ, lo harán juntas.

ㅡ¡¿Qué?! ㅡchillaron al unísono.

ㅡNo, no, no. Profesor Do, no me haga esto, puedo cumplirlo, pero yo sola, por favor; por favor. ㅡempezó a rogar la omega, con las palmas juntas y la mirada arrepentida. ㅡ Nunca volveré a causar molestias, pero por favor, déjeme hacer mi trabajo de manera individual.

Lisa rodó los ojos. No pensaba hacer ninguna mierda.

ㅡNo hay objeciones, lo harán juntas y ya. El comportamiento de ambas deteriora la disciplina estudiantil como todos los jóvenes que se atreven a hacerlo. Joven Kim, usted sabe cómo manejo a los alumnos y cuáles son sus sanciones. ㅡla observó fijamente, dejándole en claro que era la autoridad máxima en esas cuatro paredes. ㅡ Así que todo reclamo es en vano, les daré un tema y ustedes me lo presentarán en tres semanas.

Jennie hizo un -casi- imperceptible puchero. ¿Cómo se supone que haría ese proyecto con Manobal?

 ¿Cómo se supone que haría ese proyecto con Manobal?

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Bad girl | Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora