Capítulo 41

2.4K 232 28
                                    

Cuando la campana resonó, indicando el tan ansiado receso para los jóvenes, Jennie trató de meter rápidamente todas sus pertenencias en la mochila porque tenía un solo objetivo por el momento.

Mas cuando estuvo lista y miró hacia el fondo del salón, soltó un largo suspiro al comprobar que, efectivamente, dicha alfa pelinegra con la que deseaba hablar, había salido con celeridad hacia quien sabe dónde.

Oh, pero esto no podía seguir así. Jennie no tenía pensado dar su brazo a torcer. Por supuesto que no.

La omega sabía que debían conversar y eso es lo que harían así tenga que saltarse el receso, ignorar a sus amigos y caminar por cada rincón hasta encontrar a Lisa.

Dando rápidos pasos y siendo decidida, emprendió su recorrido hasta que algo hizo clic en su cabeza y se detuvo abruptamente. Como si hubiera podido viajar entre sus recuerdos y traer de vuelta una escena que se proyectaba en su memoria, una sonrisa tímida y algo triste se dibujó en sus labios.

Subiendo por las escaleras y adentrándose por los pasillos, supo que no se había equivocado cuando el característico aroma de la alfa la envolvió suavemente.

Lisa estaba en el salón de música.

Aquel lugar que aprendieron a compartir luego de esa noche en que la alfa declaró sus sentimientos, aquel lugar que casi siempre permanecía desolado pero que se llenó de la calidez que emanaban en cada receso y en cada oportunidad que tenían de ser solo ellas dos, aquel lugar que llamaron suyo.

Del que comentaban que siempre lo recordarían aún cuando se graduaran y pasaran los años, porque les pertenecía tácitamente. Porque ellas creían en su para siempre por más cursi que sonara para otros.

Cuando Jennie dio un paso para adentrarse al salón, Lisa se levantó de inmediato del suelo, tratando de borrar todo el rastro de pesadumbre que pudiera notarse en su rostro y en su decaído porte.

ㅡTenemos que hablar. ㅡse atrevió a romper el silencio.

Lisa suspiró con pesadez, tratando de no observar detenidamente el bonito rostro de la omega porque sabía que no podría ser fuerte y terminaría besándola como añoró en todo el lapso del tiempo que se mantuvo alejada.

ㅡYa no es necesario, me ha quedado bastante claro con lo sucedido ese día.

ㅡBasta, sabes que no es cierto. Lamento mucho lo que pasó, en serio, pero es que ni yo misma puedo entender a mi madre. De todas formas ella no importa en absoluto, no cuando nosotras...

ㅡJennie. ㅡmencionó con un tono tan neutral e indiferente que encogió un poco la seguridad que la omega trataba de mantener. ㅡ Ella es tu madre, siempre querrá lo mejor para ti. Y yo... ㅡdando una agria pausa, trató de continuar. ㅡ Yo creo que tiene razón.

Jennie no quería escucharla porque empezó a tener miedo acerca de a dónde estaba dirigiéndose la conversación. Pero aún así necesitaba entenderla. ㅡ ¿A qué te refieres?

ㅡSerá mejor que lo dejemos aquí.

ㅡ¿Disculpa?

Inevitablemente y como era de esperarse, los gatunos ojitos de la omega se cristalizaron, acumulándose de saladas gotas que demostraban cómo se estaba sintiendo en ese instante.

ㅡSé que lo sabes, Jennie.

ㅡNo, no lo sé. ㅡrefunfuñó, viéndose dolorosamente adorable para Lisa. ㅡ ¿Acaso estás terminando conmigo? ¿Cómo puedes...?

ㅡEs lo mejor para ambas, créeme.

ㅡ¡No es verdad! ¿Por qué estás haciendo eso?

Lisa tragó saliva con dificultad, sacudiendo su cabello con una frustración que la estaba agotando.

ㅡPorque es lo mejor, ya te lo dije. Tal vez ahora no puedas comprender lo que trata de hacer tu madre, pero verás que con el tiempo le darás la razón. ㅡNo pudo evitar hacer contacto visual con esos bonitos orbes que la mantuvieron encantada desde hace tanto tiempo atrás. ㅡ Ella quiere lo mejor para ti y yo no soy nada de eso

ㅡ¡Ya deja de mencionarla! ㅡinesperadamente se aproximó hacia la alfa, dándole débiles golpe en el pecho sin saber de qué otra forma reaccionar. ㅡ¡Ella no tiene nada que ver aquí, esto es entre nosotras!

ㅡJennie... ㅡdijo destilando tristeza pero cariño a la vez, tomó suavemente las muñecas de la omega para que pudiera calmarse. ㅡ¿Acaso no lo entiendes? Tal vez soy lo que quieres, pero no soy lo que necesitas.

ㅡClaro que te necesito y te quiero conmigo, siempre.

ㅡLa gente como yo solo traen problemas, personas como yo solo rompen cosas bonitas. ㅡreiteró, acariciando la mejilla de Jennie. ㅡ Durante estos días lo he pensado, aún si no quise hacerlo. Entendí que te mereces a alguien mucho mejor que yo... Y yo no merezco tener a alguien como tú.

ㅡLili, no digas eso, no es cierto. ㅡsafándose del agarre en sus muñecas, alzó sus palmas y acunó el rostro de la alfa. ㅡ Yo te quiero y tú también me quieres, eso es más que suficiente. ¿Qué pasó con la alfa que todo le daba igual? ¿Que le traía sin cuidado alguno lo que los demás dijeran?

Lisa se alejó, haciendo añicos un poco más el corazón de la omega. ㅡ Es que no se trata de ellos o de mí. Se trata de ti... Mereces estar con alguien como Minnie, alguien como Sooyoung o ese tal Christopher. Un alfa que no traiga líos a tu vida, un alfa que tome tu mano y todos sepan que es el indicado para ti.

ㅡ¡Lo eres, tú lo eres para mí! ¡Los demás pueden irse a la mierda!

Lisa se sorprendió ante las palabras de Jennie, ya que nunca antes la había visto actuar ni decir algo así.

ㅡNo puedes ir en contra de tus padres y tampoco puedo permitir que los confrontes y tengas problemas por mi culpa. No puedo hacerte eso, Jennie.

La omega se limpió con rapidez y brusquedad las lágrimas que se deslizaban por sus mejillas, tratando de no ceder. Eso no era justo.

Cuando quiso replicar una vez más, el estresante sonido de la campana aturdió sus oídos y fue perfectamente el momento para que Lisa decidiera irse.

ㅡ¿Así que solo te rindes y ya? ¿Tan fácil es esto para ti? ㅡse cruzó de brazos, mirando por sobre su hombro cuando los pasos de la alfa se detuvieron por unos milisegundos.

ㅡNo... No es eso, Jen... ㅡcarraspeó, negando con la cabeza. ㅡ Solo... Solo creo que es lo mejor, sé que lo entenderás.

Cuando no hubo más rastro de la presencia de Lisa, la rubia omega trató de tranquilizarse y respirar lentamente en busca de poder calmarse. Esto no significaba nada, Jennie podía con ello. Solo sería un obstáculo que ambas debían aprender a superar.

Jennie lo sabía, ella no iba a rendirse tan sencillamente. Y estaba mucho más segura que esto no era precisamente lo que Lisa quería, solo tenía miedo e inseguridades propias que ella se encargaría de aceptar y abrazar.

Porque se querían y eso era suficiente para ella.

Porque se querían y eso era suficiente para ella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 27, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Bad girl | Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora