Quiero Alguien que se Atreva/ Emilio Lara

capítulo 3.2

||Abril||

El regalo eran 4 boletos para ver el partido de vuelta en el estadio Azteca el sábado 13 de Mayo.

Emilio Lara fué quién entregó los boletos, y a lado de él había un hombre, calculo que tendría unos 45 años.

Al llegar me llamó por mi nombre para confirmar que era yo

Debían tomar una foto para dar evidencia de que recibí el premio. Emilio se acomodó a lado de mí, mamá me volteó a ver, no sé de qué color habré estado que mamá soltó una risa, y me dijo que me tranquilizara un poco.

Estaba nerviosa, no sabía que hacer, sentí como la mano de Emilio se acomodó a un costado de mí; pude respirar su perfume, un perfume muy fresco y juvenil.

Sus manos, grandes y con dos anillos. La playera no era suficiente para disimular lo marcado que estaba su abdomen.

Desde el perfil que veía, Emilio tenía una nariz un poco larga, pero respingada, unos ojos que, al sol, se veían claros.

Su cabello estaba un poco alborotado y el olor del gel que usa, llegaba a mi nariz también.
Sus labios. Recién humedecidos, podía notarlo.

Deseaba tanto poder besarlos.

Fué en eso cuando Francisco hizo una seña de que la foto estaba lista.

Nos dispersamos todos, y nos despedimos.

Antes de irme sentí que alguien tocó mi hombro, al voltear sentí como mis mejillas se pintaban de color carmesí.

-Disculpa- dijo Emilio, se notaba nervioso.

-Dime- dije tratando de disimular mi nerviosismo.

-Eres muy guapa, ¿Te lo habían dicho?- soltó sin más.

Si ya estaba sonrojada, para este momento estaba más roja que un tomate.

G-gra- gracias -solté tartamudeando.

-Te puse nerviosa eh- soltó en un tono burlón Emilio.

-Sí, un poco- Solté, no podía disimular lo nerviosa que estaba.

-Y te voy a poner todavía más nerviosa, porque quería preguntarte si me podrías dar tu número- Dijo Emilio.

Ahora sí que estaba a nada de desmayarme.
Emilio Lara ¿Pidiendome mi número?. Había de dos, o estaba soñando o esto era real.

¿Mi número?- pregunté - ¿Mí número de celular?.

-sí, tú número- respondió a mi pregunta- Solo si quieres y puedes- siguió Emilio.

Sí, claro, Sin problema.- contesté un poco rápido.

||Emilio||

Notar el nerviosismo de Abril, hizo que el mío se fuera, y me sentí más seguro de mí mismo.

Podía notar como cada vez se sonrojaba más, y cómo le costaba pronunciar algunas palabras. Sin duda eso me encantaba.

Sin dudarlo me dictó su número, el cuál estuve pendiente de anotarlo de manera correcta.

Para despedirnos dió un beso en mi mejilla. Me puso nervioso.

Salí del club y pasé a casa de un amigo, ya estaba Oscureciendo, por lo que fuí directo a casa, mamá y mis hermanos ya me esperaban.

-Ya regresé - Avisé al entrar.