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Mi corazón se enredó, desde entonces, en tu corazón.
💘

   Cinco veces en las que Fedyor e Iván se toman de la mano... y significa algo.

[1]

   Cuando Iván conoció al joven Fedyor de diez años, estaba furioso con la orden de tener que guiarlo en el Pequeño Palacio. Él no quería estar a cargo de un mocoso demasiado sonriente, demasiado parlanchín que le irritaba con su simple presencia. Cuando Iván conoció a Fedyor, supo de inmediato que nunca se llevarían bien. La diferencia entre ellos era abismal, no tenían nada en común. Ni siquiera podía soportar su compañía, pero el pequeño Grisha era obstinado. No lo entendía, si debía ser sincero. Desde su llegada allí, Iván se hizo un lugar entre los sobresalientes, se esforzó por crearse una reputación que, por sobre generar respeto, intimidara. Así nadie le molestaría, así nadie creería que podía ser su amigo, así se mantendría en la seguridad de una vida sin lazos emocionales innecesarios.

Pero entonces aparece este chico, niño, demasiado brillante para su bien. Lentamente se acerca, intenta sobrepasar los límites, no le teme. Iván debe hacer algo sobre eso, tiene una imagen que mantener ante los soldados de grupos superiores, no puede andar por allí con un pequeño-

—¡Iván! —Botkin le grita. —La cabeza en el entrenamiento, no en las nubes. —le regaña, lo cual era bastante inusual, por lo que se gana las miradas de los demás. Iván se las regresa, lo que les hace apartar rápidamente la vista. —Aquí, una pequeña distracción no puede parecer nada. —inicia. —Pero allá afuera, cuando sea su turno de estar entre los soldados que luchan, puede significar la muerte. —Iván lo sabe, no es un novato allí, pero se siente molesto por la lección. —¡Kaminsky! —llama en un grito completamente innecesario. El pequeño niño corre al frente, la típica sonrisa suya en el rostro.

A Iván le irrita, no lo entiende ¿Por qué siempre luce tan feliz? No había, ni allí dentro del castillo ni fuera de el, por lo cual estar feliz.

—Combatiran. —Botkin ordena. —El primero que se rinda ayudará al personal con la limpieza. —los demás estudiantes comienzan a murmurar, los trabajos domésticos eran lo peor en un lugar como el Pequeño Palacio, el cual en el momento de la limpieza lo que menos se sentía era "pequeño".

Iván se siente algo desconcertado, no le parecía adecuado pelear con alguien mucho más pequeño que él. Fedyor, si no mal recordaba, era unos tres años más joven. Pero no parece importarle, porque salta adelante listo para darle pelea. Iván sabe que será sencillo derrotarlo aún sin su habilidad, por lo que se dice que no será tan duro con él. Sin embargo...

—¡Lo logré! —Fedyor celebra cuando Iván cae sentado contra el suelo. Tiene una expresión incrédula en el rostro, para rápidamente cambiarla a una de molestia.

—Otra vez. —Iván se levanta, sacudiendo la tierra de su uniforme. Botkin había dicho que perdía quien se rindiera, y él no estaba haciendo eso. La pequeña celebración de Fedyor no tenía significado alguno, lo había conseguido sólo porque Iván había sido suave con él, ahora entendía que fue un error. Está vez no sería sencillo vencerlo.

—¡Otra vez! —Fedyor, quien ahora esta en el piso, grita mientras se levanta y limpia la tierra de su cara. Iván lo había mandado al suelo con bastante facilidad en el segundo enfrentamiento. Iván quiere burlarse, era obvio que no podría ganarle. Botkin permite que continúen, después de todo, ninguno se estaba rindiendo.

...

—Otra... —Fedyor ni siquiera puede seguir hablando, está exhausto, tirado en el piso con el uniforme completamente hecho girones. Iván está igual. No puede creerlo, ese pequeño soplyak*

Amantes Heartrender [Fivan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora