La fiesta de quince años fue excepcional. Hoshi y Naruto lo pasaron de lo mejor rodeados de, cada vez, más amigos.
Cuando la fiesta terminó Hoshi se veía demasiado cansada, dijo no sentirse nada bien y se encaminó a su cama a dormir para no despertar.
—Ha pasado una semana ya y no despierta —reclamó Kakashi golpeando con un puño la pared con impotencia—. ¿Qué está pasando? —preguntó el preocupado padre mientras, levantando la cabeza al cielo, respiraba profundo para no volver a derramar lágrimas.
—No lo sé... pero tienes que tranquilizarte —pidió uno que parecía un poco más sereno, pero que no dejaba de limpiar las lágrimas de su rostro.
—Vamos Ahoshi, despierta —suplicaba Naruto llorando—, tienes que despertarte pronto, Bakaruto te extraña y te necesita mucho... de veras —dijo y lloró aún más, pegando su frente a la mano de la chica que descansaba sobre su vientre.
—Será mejor llevarla a la aldea, Tsunade tiene que saber algo, ¿no? —sugirió un poco esperanzado el peliplata.
—Será mejor no hacernos ilusiones —advirtió el castaño—, Lady Tsunade ya había mencionado que no sabía nada el jutsu, ¿recuerdas?
Kakashi pateó la cama y miró con dolor a su hija.
—Mi princesa —gimoteó llevando la palma de su mano a la cabeza de la chica.
Esa noche se trasladaron a Konoha sin que nadie más se diera cuenta. No sabían qué le pasaba a la chica pero, aun si no sabía nada del jutsu, Tsunade era el mejor médico de la alianza shinobi, eso de algo debería de servir.
—Está... en coma —anunció con demasiadas lágrimas en los ojos la rubia, haciendo llorar a los otros tres—. ¿Qué pasó? —preguntó e Iruka fue el único que pudo hablar, los otros dos solo lloraban intentando asimilar la condición de la chiquilla que amaban.
—Después de la fiesta dijo que estaba cansada, se fue a dormir y no despertó —informó apartando las lágrimas de sus ojos
—No sé qué le pasa —informó la hokage— y no sé cuándo despertará... lo lamento Kakashi.
Tsunade se disculpó mirando a la cama donde una castaña parecía solo dormir.
* *
Casi dos semanas después las cosas parecían más calmadas. Hoshi aún no despertaba, pero ya nadie lloraba, no todo el tiempo, al menos.
Se encontraban en la habitación de la chica Hinata, Naruto y Shikamaru, haciéndole compañía en una que, inconsciente, era incapaz de reparar en la presencia de nadie.
—Gaara va a morirse —dijo la chica—, él de verdad la quiere.
Naruto concordó con su ahora novia.
—Si, esto será terrible, de veras —dijo el rubio y todos se despidieron de la chica que no decía ni una sola palabra.
En la puerta se encontraron a Kakashi que venía con Tsunade.
—Mañana es su cumpleaños, el verdadero, mañana cumple dieciséis —informó la rubia.
—Después de celebrar quince falsos cumpleaños no podremos celebrar un real —suspiro bastante dolido el peliplata, sintiendo la injusticia atropellarle—. Casi ha pasado un año de que la recuperé y la estoy perdiendo de nuevo.
Las palabras del sensei sonaban más a reclamo que a comentario.
—Septiembre se escribe con "S" de sorprendente... quizá mañana todo cambie —sugirió Shizune intentando mostrarse optimista, pero las lágrimas en sus ojos no le dejaron continuar con esa sonrisa que murió antes de lograr el objetivo de reanimar a los que sufrían.
Continúa...
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UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD... MI VIDA CONTIGO
FanfictionNunca pensó en ella, nunca la buscó, pero ahora que está por perderla descubre que la ama con todo su corazón. ¿Será que es demasiado tarde para que Kakashi Hatake le demuestre su amor? Dios o la vida han apostado por él y le han regalado una se...