Salvando una vida

Capitulo 6

Jungkook

Me sorprendió cuando Seokjin me invitó a salir a tomar algo. Sabía que no se refería a una cita, pero, aun así, fue una sorpresa... yyyyyy voy a fingir que es una cita porque Seokjin está caliente. No puedo esperar para saber más sobre él. Parece algo callado y reservado, pero puedo decir que hay más dentro de él que está esperando para salir.

Llego antes que Seokjin y me siento en el banco afuera del bar/restaurante a esperar. Echo un vistazo a la cuadra y realmente tengo que hacer una doble toma cuando lo veo doblar la esquina. Dios mío, el hombre es absolutamente impresionante. Sus largas piernas están envueltas en unos vaqueros oscuros perfectamente ajustados y lleva una bonita camiseta a rayas granate y azul marino con cuello en V, que se extiende cómodamente sobre sus anchos hombros y su pecho. El dobladillo de la camiseta descansa sobre la hebilla de su cinturón, lo que ayuda a dirigir mi mirada hacia la parte delantera de los vaqueros del hombre, donde están ahuecando su paquete, dejando poco a la imaginación.

Maldita sea, estoy perdido. Este tipo está haciendo cosas estúpidas a mi corazón y apenas lo conozco. Me pongo de pie cuando se acerca y me froto las manos en la parte delantera de mis pantalones para asegurarme de que no estén sudorosas. Seokjin sonríe, haciendo que mi corazón salte un latido. Tiene una sonrisa deslumbrante, tan recta y blanca.

—Hey, hombre —saludo.

Nos estrechamos las manos y nos golpeamos los hombros.

—Hey —responde Seokjin.

—¿Tienes hambre?

—Sí, definitivamente.

—Bien yo también. Entremos y comamos algo.

Seokjin asiente y me sigue. Llegamos en la sección del restaurante donde están todas las mesas. Nos sentamos uno frente al otro, ambos agarrando un menú para mirar. La camarera se acerca y recibe nuestros pedidos de bebidas mientras revisamos el menú.

—¿Cómo le está yendo a Spencer con la terapia de grupo?

—Realmente le gusta mucho. Definitivamente creo que será bueno para él —responde Seokjin.

—Bien.

Seokjin se mueve incómodamente en su silla mientras mira el menú. —¿Qué vas a pedir?

—Creo que voy a pedir una hamburguesa, ¿y tú?

—Si, lo mismo.

Ambos dejamos nuestros menús mientras la camarera regresa con nuestras bebidas.

Ella toma nuestro pedido de comida y luego se va. Él se mueve nervioso, tocando la etiqueta de su botella de cerveza.

Me parece extraño que el tipo esté tan nervioso. Estamos aquí como amigos, no es como si tuviera que impresionarme. Sin embargo, realmente quiero conocerlo mejor, así que decido preguntar por su difunta esposa, esperando que eso me ayude a comprender su personalidad.

—Entonces, ¿cuál era el nombre de tu esposa?

Me mira rápidamente antes de mirar su botella de cerveza, encontrando la etiqueta fascinante de nuevo.

—No tenemos que hablar de ella si no quieres —agregué rápidamente, maldiciéndome incluso por haber sacado el tema. Imbécil.

Se encoge de hombros como diciendo: "No importa".

—Justine.

—¿Cómo se conocieron?

Seokjin me cuenta cómo se conocieron en la universidad y se enamoraron locamente. Me cuenta que Spencer no fue planeado y en realidad nació antes de que se casaran. También me dijo que incluso estaban hablando de tener un hijo más justo antes de que ella muriera.

—Teníamos planes. Planes para hacer cosas, ir a lugares, y envejecer juntos. Ahora se ha ido y ya no hay planes. Mi vida se estancó cuando ella murió, —dice Seokjin, sacudiendo la cabeza—. Todo lo que una vez disfruté se ha arruinado porque nada es igual sin ella.

Asiento con tristeza, sintiéndome mal por el tipo con todo lo que ha pasado. —Toda la vida como la conocías fue arrebatada de ti en un instante, así que es comprensible que te sientas así —le digo, cayendo en modo consejero.

Seokjin suspira, sonando agravada. —Pero ya no quiero sentirme así. Ella se ha ido y no hay nada que pueda hacer al respecto, ¿por qué no puedo seguir con mi vida?

—No hay un tiempo establecido para el duelo, Seokjin. A algunas personas les toma más tiempo que a otras.

Se pasa la mano por su cabello oscuro. —Es jodidamente irritante.

Yo murmuro de acuerdo. —Sí, puede ser. Pero lo conseguirás. Quiero decir ¿cuándo fue la última vez que saliste con un amigo así?

Los labios llenos de Seokjin se elevan ligeramente. —Ha pasado mucho tiempo.

—¿Ves? Ya estamos avanzando. —Sonrío, y le hago un guiño.

Seokjin se sonroja ligeramente y asiente.