Reyes de la mafia

Objeto perdido

Capítulo 4

Suga llegó completamente agotado de la tortura de su madre, era casi de noche cuando la señora Kim decidió que ya era hora de volver. Su padre y sus hermanos habían vuelto y platicaron un poco durante la cena, más tarde suga por fin regresó a su habitación colocando el seguro en la puerta y despojándose de sus prendas para proceder a entrar al baño. Quería privacidad y despejar su mente mientras el agua mojaba cada parte de su cuerpo, llegó a escuchar del nuevo reglamento, pero eso no era problema para suga ya que prefería estar en casa escuchando música o haciendo alguna otra actividad con su tiempo.

Salió del sitio con la toalla alrededor de su cintura y con la otra secando los mechones de su cabello, se sobresaltó un poco al notar al castaño sentado en la cama apoyando su espalda sobre la cabezera mientras veía una revista.

- qué rayos haces aquí?... -

Este volteo a verle ignorando la pregunta - deberías ocultar mejor estas revistas, Dumpling -

El menor le arrebató la revista de las manos - sal de aquí -

- así tratas a tus visitas? -

- tú no eres una -

- claro que sí -

- eres un intruso - espetó - acaso no sabes de la nueva regla? -

- lo sé - giró hacia las bolsas de compras al lado de la cama y tomó una - pero si algo aprendí de Jungkook fue a ser escurridizo - sacó una camisa colorida del interior - ahora te volviste hippie? - miró incrédulo.

- deja de tocar mis cosas y lárgate - dijo arrebatando su camisa de las manos contrarias - a qué vienes en realidad? -

- pues... - se levantó para verle - vine a hablar -

- de qué? -

- del beso - dijo directo y suga volteo la mirada.

- no tengo nada que decir - dirigiéndose a su armario

- acaso no te gustó? - suga no respondió a la pregunta y solo abrió su armario buscando una pijama - tu silencio dice mucho - se burló.

Este suspiró cansado - vete - fue lo único que dijo, pero Jin le vio extrañado y caminó hacia el.

- fue solo una broma, Dumpling - le volteo para verlo de frente, pero al girarlo pudo notar que sus mejillas tenían un tono rojizo mientras mordía levemente su labio inferior y tenía la mirada baja por vergüenza como un niño que no quería ser descubierto - si te gustó, eh? -

- claro que no - negó pero Seokjin tomó el mentón del chico para obligarlo a verle acercando sus labios a los ajenos.

- es tierno cuando intentas negar lo evidente - murmuró cerca de él.

- q-que haces? -

- intento que me digas la verdad - llevó su mano hacia la cintura del menor comenzando a dejar suaves y húmedos besos por su cuello provocando escalofríos al chico.

- j-jin - soltó con dificultad - no deberías estar aquí -

- eso quieres?... - susurró acariciando el lóbulo de su oreja - que me vaya? -

- s-si te descubren aquí... - exhaló

- No lo harán - dijo viéndole, sus narices casi rozando una con la otra - amenos que me delates -

- Qué te hace pensar que no lo haré? -

Este alzó una ceja - en verdad no planeas besarme? - el menor tragó pesado ante sus palabras - porque en este momento yo deseo follarte - Suga abrió los ojos en demasía, sus mejillas tomaron un tono más rojizo y empujó al contrario casi por instinto.