Reyes de la mafia

Disculpa

Capítulo 13

...

Lo primero que hizo Félix al ver su moto fue correr hacia ella y abrazarla como si fuese lo más preciado del mundo. Hyunjin estaba en presencia de lo que parecía ser un reencuentro amoroso y puso los ojos en blanco ante tal comportamiento por parte de su hermano. Le dejó en su momento tan íntimo para adentrarse a la mansión en busca del pelinegro, camino ahí se topó con ji won quien llevaba una sábanas blancas en manos.

- oh...joven Hyunjin - dijo al verlo llegar.

- cómo está, ji won? -

- haciendo mi trabajo, como siempre - le regaló una cálida sonrisa.

- lleva eso a la habitación de taehyung? -

- así es -

- déjeme ayudarle, yo lo llevo - se ofreció.

- está bien... - no protestó - es la última puerta... -

- lo sé, no se preocupe - había olvidado que ambos hermanos no solo eran empleados de Woo Bin sino también amigos de Taehyung.

- bien... - finalizó antes de alejarse.

Hyunjin caminó hacia la habitación del pelinegro con las sábanas dobladas en manos, estaba a punto de tocar a la puerta hasta que esta se abrió dejando a la vista a la castaña quien sostenía un vestido color rojo.

- oh... Hyunjin -

- señorita jisoo, no pensé que estuviera aquí...lo siento -

- oh, no, tranquilo... - dijo viendo que sostenía unas sábanas - puedes entrar - le dió paso al interior - el idiota de mi hermano salió hace poco -

Hyunjin acomodó las sábanas en el interior de los cajones del armario - creí que estaría aquí - terminó diciendo al girar a verla.

- si es por lo de tu arma, está en mi habitación - dijo para proceder a salir de ahí seguida por el peli-rojo.

- porqué estaba aquí? -

- me había vuelto loca buscando este vestido - respondió mostrándole este -
resulta que lo encontré en el armario del tarado de taehyung, ni siquiera sé porqué estaba ahí -

Llegaron a la habitación y jisoo fue la primera en entrar felizmente con su vestido en manos.

- tu arma está por allá - dijo apuntando sin importancia al mueble.

Hyunjin la tomó revisando el interior de esta para verificar si había hecho uso de ella, afortunadamente el cargador estaba completo. Jisoo dejó su vestido en el armario para volver a posar su mirada en Hyunjin, su camisa sin mangas dejaba a relucir sus fuertes brazos, aquellos con los que ella fue envuelta y de los cuales no se habría alejado si la situación hubiese sido diferente. No tardó en notar la marca roja azulada que ella misma le había dejado a causa de su mordida, todo fue tan rápido en ese momento que no se percató de lo fuerte que había sido al morderlo para lograr escapar y que de todas formas no lo había logrado.

El peli-rojo colocó su arma en la pretina de su pantalón a punto de irse, pero fue retenido por la voz contraria.

- Hyunjin... - le llamó acercándose y este le vio atento a cualquier orden - te duele?... - fue algo que no había preguntado hasta ese momento.

- disculpe? - frunció el ceño al no entender hasta que la castaña señaló el brazo ajeno en donde estaba la marca - oh, no, descuide - finalizó sonriente - he aguantado muchas más heridas que esta -

- suena a que presumes tu resistencia -

- creo que estar con taehyung me está afectando - bromeó

- espero que no te vuelvas una versión de él - sonrió viéndole fijo al estar tan cerca de este - me gustas más así... - Hyunjin quedó inerte ante la cercanía de jisoo y pudo sentir la leve caricia de sus manos sobre su pecho.