El Pequeño (Gran) Crush de Kageyama {Kagehina Omegaverse}

"Tournament Berry."

Kageyama amaba el Volleyball desde que tenía memoria.

No desaprovecharía jamás la oportunidad de jugar con gente mucho mejor que él, emocionado por saber y conocer más, siempre queriendo superarse.

Y Hinata no era diferente.

Cuando Ukai les dijo, en compañía de Takeda, la oportunidad de ir a un campamento, todo el equipo estuvo de acuerdo, sobre todo el dúo del Karasuno, con Kageyama emocionado en silencio y Hinata saltando emocionado como es él, demostrando la misma emoción que Tobio.

Él se expresaba por ambos.

Así que ahí estaban, ambos sentados el uno al lado del otro.
Kageyama se moría de ganas de poner su mano contra la del Omega, mientras el pelirrojo dormitaba en el hombro izquierdo del Alfa.

Al llegar a Tokio, Shoyo fue el primero en salir de la van a saludar a Kenma. El Alfa saludó a su amigo con su expresión sencilla y monótona, con una suave sonrisa en su cara. Kuroo llegó detrás de Kenma y puso su mano sobre la cabeza de Shoyo.

Tobio solo los veía en silencio, viendo como Shoyo saltaba sosteniendo los hombros de Kenma, después de unos segundos, Kuroo había empezado a molestar a Tsukishima, que solo lo evitaba lo más que podía. Su vista regresó a Hinata cuando Lev, otro Alfa bastante cercano a Shoyo, llegó a presumir su crecimiento de tres centímetros al bajo Omega.

¡Eran muchísimos Alfa (2) alrededor de Hinata!

-Te estás muriendo de celos.- Llegó detrás de él Noya. Kageyama saltó en su lugar y volteó a ver al bajo Beta. Tanaka se paró del lado contrario a Nishinoya.
-Te gusta mucho Hinata, ¿Verdad?-
Había preguntado ahora el rapado, Kageyama solo se sonrojó ante lo evidente.
-Ajá...- Tobio se cohibio y agachó la cabeza. Ambos Beta se vieron mutuamente y esbozaron una sonrisa cada uno.
-¡No te preocupes, Kageyama!- Exclamó Nishinoya.
-¡Tus Senpais te ayudaremos a conquistar a Hinata!- Continuó Tanaka.

Kageyama solo se abstuvo a tragar duro.

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Un Alfa dominante llegaba al campamento en compañía de su equipo.
El Inarizaki terminaba de bajar de su autobús, cuando el Miya rubio posó su mirada en un bajo Omega de cabellos alborotados andando al lado de Kageyama, ambos mirándose ensimismados el uno en el otro.

Los movimientos de Shoyo eran bastante toscos si eran comparados con los de otros Omegas, además de su sonrisa bastante llamativa y alegre.
Su vista se posó después en el Alfa a su lado.
Era evidente que le gustaba ese Omega. Y a Miya le gustaba incluso más molestar.

Kageyama tuvo un escalofrío, volteó la cabeza y su mirada se encontró con la mirada de Atsumu. No estaba seguro si lo veía a él o si veía Hinata, pero esa sensación de incomodidad no desapareció.

Posó su brazo sobre los hombros de Hinata y lo atrajo hacia él. Ya no quería que ningún Alfa se interesara por Hinata. ¡Se iba a declarar pronto (si dios quiere)!

-Quitate, Tsumu.- Su hermano lo empujó del camino, bajando del autobús.
-¡Samu!- Le respondió a su gemelo, Osamu siguió caminando como si no hubiera tirado a su hermano.

Ambos gemelos empezaron una discución infantil, principalmente Atsumu peleando con Osamu y su hermano estando particularmente serio.

-Kageyama... ¿Por qué me abrazas?- Las palabras del Omega sacaron al azabache de sus pensamientos, notando que abrazaba a Hinata con fuerza. Se sonrojó, pero no quería quitar su brazo.
-Ah- Por n-nada...- A punto de mover el brazo, Shoyo lo agarró con ambas manos.
-¡Está bien, Kageyama! Me gustan mucho tus brazos...-

Kageyama explotó en rojo al escuchar la declaración de Hinata.
-¿Q-qué?-
Hinata abrió los ojos.
¡¿Le acababa de decir a Kageyama que le gustaban sus brazos?!
-¡Ah! Sí, p-porque son fuertes y-y sirven mucho para el v-volley, no lo digo porque sean atract-tivos... ¡Osea, si son atractivos pero no lo digo por eso! ¡Quería decir abrazos! ¡A-brazos! ¡Me confundí!- Hinata ya no sabía como excusarse y solo soltaba frases al azar.

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Atsumu seguía viendo como el Omega con aroma a naranjas y el Alfa con aroma a moras jugaban Volley, siendo un par bastante interesante.

Kageyama sonreía cuando levantaba el balón para Hinata. El rubio podía jurar que ambos eran bastante buenos, pero Shoyo se adaptaba a Tobio.

Hinata tenía más potencial que explotar y eso a él le llamaba la atención.
O solo pensaba que Hinata era bonito y no quería decirlo en voz alta.

El Miya rubio se acercó al dúo del Karasuno después de su partido de práctica.

-Shoyo, ¿Verdad?- Le preguntó al Omega sudoroso, el mencionado volteó a ver a Atsumu mientras recibía su botella de agua de las manos de Yachi.
-Ajá... ¿Quién eres?- Le respondió tomando agua de su botella.

Kageyama se aguantó las ganas de reír al ver la cara de Atsumu.

-Soy Atsumu, juego en el Inarizaki, quería presentarme.- Le sonrió a Hinata antes de estira su mano al Omega y empezar a soltar sus feromonas, tratando de demostrar autoridad sobre Hinata y Kageyama.
Shoyo tomó su mano y la apretó.

-Deja de hacer eso.- Le reprochó sobre las feromonas que estaba soltando.
-¿Por qué?-
-No me gusta. Hueles picante.- Shoyo hizo más presión en la mano de Atsumu.
-Que agarre tan fuerte.- Shoyo soltó la mano de Atsumu tras la respuesta del teñido y le sonrió con simpleza.
-¡Adiós,Atsumu-san!- Como si nada hubiera pasado, Hinata se acercó a Kageyama con una sonrisa para empezar a hablar de cosas triviales.

El Miya rubio sonrió para sí mismo. Un balón azotó contra su cabeza.
-¡Tsumu, Kita-san dice que regreses!- Dijo su gemelo, Atsumu se sonrojó por el ruido sordo que había hecho el balón.
-¡Deja de lanzarme cosas, Samu!-

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-Yo creo que Hinata y Kageyama deben compartir cuarto.- Dijo Noya a la hora de organizarse para dormir. Iban a estar divididos en habitaciones por pareja.
-¡Sí! Kageyama y Hinata deberían dormir en el mismo cuarto.- Respondió Tanaka apoyando la idea de Nishinoya. Ambos Betas levantaron sus pulgares en forma de apoyo a Tobio.

El azabache estaba muy avergonzado, volteo a ver disimuladamente a Shoyo quien estaba jugando con sus dedos mientras miraba al suelo.

-No.- Respondió Daichi.
El dúo del Karasuno levantó la mirada tras lo dicho por su Senpai.
-¡¿Por qué?!- Preguntaron ambos Betas al unisono.
-Porque son Alfa y Omega. Kageyama, ¿Cuándo es tu próximo celo?- Respondió Sugawara en su lugar.
-Ah... No estoy seguro...- Kageyama no perdía el orden se su celo porque su madre se lo recordaba. Era muy poco organizado con eso.
-Bueno. Hinata, ¿Qué hay de tí?- Volvió a preguntar Suga.

-¡Aún faltan dos semanas más! Y yo si quiero compartir cuarto con Kageyama...- Hinata había bajado la mirada tras decir eso.
Kageyama se sonrojó un poco.
-Yo... No le haría nada a Hinata, si eso es lo que les preocupa.- Respondió Kageyama, apoyando a Hinata. Daichi suspiró.

-Bien.-

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Kageyama veía el techo nervioso, a unos pasos de su cama, estaba Shoyo cambiándose.

No iba a voltear. No debía voltear.

Apretó los ojos con toda la fuerza de su cara y después giró su cuerpo, dándole la espalda a Shoyo.

-Buenas noches, Kageyama.- Dijo el pelirrojo una vez se terminó de cambiar y se acomodó en las cobijas.
-Ajá. Buenas noches.-