1 Año Después
Tener que haberme recuperado mentalmente después de haber perdido un bebé me fue difícil y duro: la ropita que Lu me había regalado, la pequeña habitación que estaba en proceso y las tantas ideas que había pensado para decorarlo. Cuando habia cruzado el umbral y ver las paredes en blanco, y la ropita doblada en una pequeña caja, se me quebró el corazón una y otra vez y tuve que respirar profundamente para no derrumbarme. Pero Jack apareció a mi rescate y me abrazo dándome su consuelo, su amor y contención. Fue difícil superar una pérdida así: Jack le dolía verme destrozada, llorando cada noche en silencio pero había veces que me daba mi espacio y después volvía para darme su mano, y darme a entender que no estoy sola en esto. Me prometió tener una familia en el futuro y que seríamos felices.
Lu tuvo un nene y una nena: Raquel y Demian dos hermosos bebés que nacieron tomados de la mano. No se separaron en ningún momento tampoco podían ponerlos en una encubadora porque sus manitos pequeñas estaban tan unidas que tuvieron que ponerlos juntos. Fue un momento hermoso, y feliz para Lu: ella lloraba de emoción, de alegría y Nicolas no podía estar mas satisfecho por su nueva ahora familia. Ese día al volver a casa otra vez volvieron esos sentimientos y esas emociones envolviendome y arrastrándome a la marea: Jack me abrazo fuerte y lloré en sus brazos hasta quedarme dormida. Porque había deseado ese momento desde que supe que estaba embarazada, y me daba coraje no haber llegado a ese final feliz. En donde conoces el verdadero amor en un ser tan pequeño que das vida y viene al mundo. Fue tan doloroso para mi y feliz, era todo una mezcla de emociones en mi pecho que no podía controlar.
¿Mis padres? Ellos siguen resentidos de la vida. Lu ya no va a la casa de ellos y yo decidí alejarme para siempre. Porque mamá siempre me dirá algo que no me gustará y papá siempre estará de acuerdo con mi madre. No quise seguir estancada ahí y se lo mucho que me hacía mal si volvía ahí con la esperanza de que algo cambiaría, pero no, todo sigue igual en ellos y creo nunca cambiarán. Lucca. Él se recuperó, tuve que denunciarlo y Jack fue testigo por mis heridas, mis hematomas, y las veces que presenció situaciones agresivas de parte de Lucca. Fue sometido a un psiquiátrico por tener ataque de ira, por ser psicótico y psicópata. No sentí culpa, no sentí lástima en realidad todo lo contrario: me sentí liberada y que por fin algo se había cerrado. Deje a Lucca atrás, lo deje al fondo de mi corazon y se que jamás reaparecerá en mi vida para volver hacerme daño.
Tuve esos momentos que daba un paso y después sentía que retrocedía cinco casilleros y me frustraba, lloraba pero era parte del proceso de la sanación. Jack algunas veces estaba ahí para mi pero otras veces él debía irse a trabajar, sabía que no podía estar pendiente siempre de mi. En esos días él me vino con una noticia, una gran noticia que cambiará nuestras vidas y tal vez en mi vida también.
Nos mudamos a Canadá. Un lujoso lugar y espectacular. Viajamos en avión en primera clase, miramos películas en el viaje, reímos, mirábamos el cielo por la ventanilla y todo era perfecto. Jack se estaba ganando la vida siendo ayudante a los mas necesitado, sus proyectos son un éxito y tiene demasiada ganancia. La casa es perfecta, es... Muy perfecta. Habíamos dejado nuestras maletas, y recorrimos desde la cocina, el living, el patio trasero, la segunda planta: nuestra habitación, el baño, el balcón y su oficina.
Lo único que me importa ahora es nuestra nueva vida en Canadá y ha pasado un año desde que nos mudamos. Desde que me puso el anillo de compromiso: fue en noche buena, nevaba demasiado y cenamos en casa, me pidió ser su esposa con lágrimas en sus ojos y me prometió hacerme feliz para toda la vida y ahí supe que lo bueno había tardado pero valio la pena esperar. Jack habrá estado por ahí por el mundo y después cayo en mi como un príncipe azul. No se cuando nos casaremos, no tenemos prisa con eso porque ahora que llevo un bebé dentro de mi y esta dulce niña que crece cada día que pasa. Me hace sentir completa y llena de amor.
—¿Como estas? —Acaricia mi vientre abultado. Ya estoy de seis meses la panza es enorme.
—Bien pero con mucha hambre. —Me llevo a la boca una frutilla con crema. Él sonríe mirándome. El anillo brilla por el reflejo del sol.
—Tenemos que ir pensando cuando nos casaremos.
—Sera después de que nazca la pequeña Rose. —Digo comiendo. — No quiero verme gorda y fea...
—Estas preciosa. —Se acerca a mi rostro y besa mis labios manchandose de crema. — Entonces si eso quieres, lo haremos así.
—De acuerdo...¡Oh! —Llevo mi mano a mi panza.
—¿Que ocurre? —Jack se alarma mirándome y hago que apoye su mano donde la pequeña ha pateado. Ella lo vuelve hacer cuando siente la mano de su padre. — Hola pequeña. —Ella se mueve.
—Rose deja de moverte demasiado estas haciendo que le duela a mami. —Hago una mueca de dolor. Me encanta sentir que se mueve pero a veces es tan fuerte sus movimientos que me hacen doler demasiado, aunque tal vez es un dolor que vale la pena. — Te quiero.
—Te queremos. —Jack sonríe y luego me mira a mi. — Te amo.
—Te amo.
—Yo te amo. —Besa mis labios.
—No yo... —Ambos sonreímos.
Si el amor era así tan intenso y dulce. Entonces quiero el amor de Jack para toda mi vida. Su emoción cuando le conté que estaba embarazada, se puso a llorar y a saltar de alegría: me prometió que me cuidaría, que estaría al tanto de mi siempre y que cualquier antojo que tenga él se encargaría de darme lo que quisiera. Pero con él ya tengo suficiente.
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CICATRICES
Teen FictionAlice Cooper una mujer o una joven llena de sueños, metas. Ella cree que su vida es perfecta, todo es perfecto en sus ojos, su novio, su familia, su hermana pero no es así. Su novio Lucca es manipulador, infiel esta atada a él de por vida, cree que...