– Che capo. Capo, despertate. – Una voz muy reconocible despertó a Juan y pudo observar la figura de un Oso, ése Oso...
No podía creer lo que estaba viendo... el mismo cabello negro... con sus orejas de Oso y sus típicos lentes... Su remera verde con mangas negras... su pantalón azul... era el...
– ¿S-Spreen? – Las lágrimas comenzaron a salir de su rostro a poder ver a ese rostro tan reconocible suyo. El híbrido sonrió con amabilidad.
– Si, soy yo, capo. – El Oso ayudó a Juan a levantarse – Lo hiciste bien, hermano. – Dijo dándole golpes en la espalda a Juan.
– ¿Hacer qué? – Juan Preguntó, es verdad ¿Qué hizo?
– Capo... – Miró a Juan atentamente. Se adelantó a la caminata.
Juan, confundido, pudo observar a Spreen con una Aureola en la cabeza.. eso significaba que...
El hechicero observó a su cabeza y si... el también la tenía...
– ¿Spreen? – Miró al Oso tratando de ubicarse mejor.
Spreen se dio vuelta, dejándose ver aquel agujero que el mismo Juan había dejado a su muerte y no pudo evitar llorar.. tantos meses arrepintiendose de haberlo matado y ahora que lo tenía frente a él... no sabia que más hacer.
– ¡LO SIENTO MUCHO, SPREEN! EN VERDAD, PERDÓN, JAMÁS QUISE ASESINARTE, ME DEJÉ LLEVAR POR EL INSTINTO – lloraba sin frenar, mientras se arrodillaba a los pies del híbrido, quien este lo miraba con tranquilidad, no se veía algún tipo de rencor hacia el Mago, a pesar de que Spreen era demasiado rencoroso... no paraba de llorar, seria capaz de quedarse sin voz esperando a que el Oso aceptara sus disculpas.
– Tranqui Gafotas. – Dijo Spreen acercándose a Juan y para luego. Abrazar al Mago, se veía que necesitaba uno de tantos meses que paso sufriendo – Gracias por cuidar a Pelusa todo este tiempo... y fue una buena idea soltarlo... – Spreen agradeció, Juan aún así no paraba de llorar.
El híbrido no parecía estar enfadado, le sonreía al Mago mientras lloraba.
– Tranquilo, bro. – Spreen repetía varias veces, su rostro ya estaba más calmado, mientras que Spreen parecía cansarse de ver como el Mago lloraba.
El lugar... era un mundo en blanco... absolutamente todo blanco... ¿Por cuánto tiempo el Oso estuvo allí? ¿En ese lugar en blanco?
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《-Extrañamente idiota.-》- Spreen Tortillaland
RandomEl exitoso empresario de Tortillaland, Iván Buhajeruk Spreen, tuvo un conflicto con el hijo del profeta, Juan Guarnizo. Aquel Oso robó el cetro que el hechicero tenía resguardado en su santuario. ¿Lo hizo de broma? Tal vez. Pero el hechicero no se l...
