<Extra> 💫Una noche tranquila💫 (Juan y Spreen)

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Juan, el chico del que todo el pueblo habla últimamente, "el mago idiota", nombrado así por el Oso Argentino.
Dudaba mucho sobre lo que estaba haciendo, prácticamente, no sabía que si seguir las palabras de su padre estaba bien, no estaba seguro de si lo que hacía realmente estaba bien, no tiene un soporte de apoyo, ya que nadie confía en el para ayudarlo.

—"Esto es estresante."— Sus palabras al estar solo no iban dirigidas hacia nadie, no sabia hacia donde iba, ni siquiera tenía una razón para haber salido de su santuario. Sus ojos miraban al cielo, ya oscureciendose.

No solo estaba solo y sin apoyo, si no que, no podía contar con la palabra de su padre, ya que el no reaccionaría poniéndose en el lugar de su hijo, ayudándolo y apoyándolo, Juan dudaba de aquellas acciones de su padre, dudaba que su padre realmente fuese buena persona.

No tardo mucho para llegar al lago, aquel lago que se encontraba en el pueblo central, aquel lago que siempre usaban para pescar y para pasar el rato, al verlo, le trajo muchos recuerdos cuando estaba con sus amigos.

Caminó un poco, acercándose a aquel lago, sin embargo, pudo visualizar a alguien allí, alguien que reconoció en seguida, por sus orejas de Oso, cabello negro, camisa verde, claramente se sabe de quién se habla.

Solo se quedó mirando desde la lejanía, para ver que era lo que aquel Oso hacía.

Notó que se quitó sus zapatos y se subió el pantalón hasta las rodillas, para luego, meterse al agua y caminar un rato allí, algo que a Juan le llamó la atención.

El mago se intentaba acercar un poco más, para ver lo que el peli negro hacía, pero pisó una rama, que se rompió al momento del contacto con su pie e hizo un ruido.

"Mierda..."— Pensó Juan y miró a su pie con molestia. Su expresión cambió cuando vio que Spreen lo volteó a ver, aquella mirada seria y enojona de siempre fue lo que le dio un escalofrío a Juan.

—"¿Qué hacés acá, Gafotas?"— Preguntó el híbrido de Oso al verlo, ese acento era lo que causaba algo de terror, por creerse agresivo usando el tono.

—"Hola, Oso... Venía del templo, quería tomar aire fresco..."— Contestó el de gafas con un tono de nerviosismo, mientras se rascaba un poco la nuca en un intento de calmarse.

No surgió mucha reacción del Oso a primera vista, Spreen solo volteó la cabeza hacia el mar, lo que Juan dudó un poco.

—"¿Y tú? ¿Qué haces aquí?" — Una pregunta con un tono de ternura, como si quisiera restaurar relación con sus amigos nuevamente. Aquello que pasó con su padre hizo que Juan perdiera contacto con sus amigos.

—"Me dijo Mariana que un roce con el agua calma el estrés. Total, quería intentar porque lo necesito."— Respondió el Argentino, mientras se ponía a caminar en el agua nuevamente.

Juan no quería preguntar la razón de su estrés, y se sentó frente al lago viendo a Spreen. Soltó un suspiro pesado y con su mano derecha, metió sus dedos en el agua, realmente, el también lo necesitaba.

—"Spreen..."— Juan le dirigió la palabra al Argentino. Su mirada de pena y tristeza no desaparecía de su rostro. El Oso volteó a mirada al Mago, esperando a que dijera lo que debía. —"¿Tu creés que haya una forma de restaurar todo lo que hice con mis amigos?" — Preguntó. Movía sus dedos con suavidad en el agua.

—"Y, yo creo que si. Pero depende de lo que hayas hecho. Desde mi punto de vista, vos no hiciste nada malo. Descubriste quién era tu papá y te pusiste a restablecer relación con él. No sé que tiene de malo por ahora."— Spreen le hablaba con más normalidad a Juan, lo que lo sorprendió un poco, nunca se trataron bien, hoy era diferente. —"Además, si hay algo mal que vos hiciste, tenés que ponerte a pensar en lo que pudo haberles afectado lo que hayas hecho." — Aconsejó mientras caminaba en el agua, se le notaba más tranquilo que de costumbre.

《-Extrañamente idiota.-》- Spreen TortillalandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora