¡Una chica toma el lugar de Ranma!
Mayumi solo quería reír y divertirse viendo uno de los animes de su infancia, nunca esperó ocupar el lugar del protagonista de ese anime de un momento a otro.
Esperando poder volver a casa se dedica a vivir cada dí...
—Hoy llega mi futuro hijo... ¡estoy tan emocionado! —expresó entre lágrimas un hombre de mediana edad con cabello largo y bigote —hace tanto tiempo que había esperado este momento, ¡escuchen, hijas!
Como parecía que no le habían oído se levantó a buscarlas, al instante también limpió su rostro del lloriqueo anterior.
—¡Kasumi! —buscó en el lugar donde casi siempre estaba su primera hija, la cocina.
—¿Que sucede papá? —Preguntó calmadamente mientras prendía una de las hornillas.
—¡Nabiki! —fue a la habitación de la siguiente.
—¿Si? —la chica de cabello marrón corto levantó la mirada de su revista.
—¡Akane! —pero cuando abrió la puerta del cuarto de la menor no la encontró. —¡Akane!...¿Estaría otra vez en el dojo? ―sin pensarlo mucho, envió a Nabiki a buscarla.
...
—Vaya, voy mejorando—Akane observó con una sonrisa los ladrillos que acababa de romper de un solo golpe, mientras secaba el sudor de su frente con uno de sus brazos fue interrumpida.
¡Click!
—¿Eh? —volteó hacia el sonido de la cámara solo para encontrar a su hermana mayor tomándole fotos de nuevo.
—Ya no sigas Akane, ningún chico se va fijar en ti. Debes ser más femenina —bajó el aparato y observó a su hermanita como si no tuviera remedio.
—No es tu asunto, y no me interesa tener novios como a tí —ajustó la cinta de su traje de entrenamiento, un tanto molesta por lo antes dicho —déjame en paz, ¡estoy ocupada!
—Como sea, papá dijo que quiere verte.
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—¿Prometido? ―Kasumi miró descodertada a su padre mientras todas estaban sentadas al otro lado de la mesa.
—Mmm —asintió ante sus hijas —se trata del hijo de mi muy querido amigo, Genma Saotome. Una de ustedes deberá casarse con su hijo, Ranma, para que se haga cargo de dojo, así el futuro de la familia estará asegurado.
—¡Oye, no puedes hacer eso!, ¿como decidir por nosotras? Al menos yo no estoy interesada. —se negó Akane.
—Espera al menos a ver si es apuesto, ¿podrías decir que aspecto tiene, papá? —preguntó la segunda hija de la familia mientras acariciaba su cabello corto.
Para la decepción de todas, ni siquiera su padre conocía al muchacho, y como para que saciarán su curiosidad al instante escucharon a alguien llamar a la puerta. Aun optimista, la segunda hermana y el señor Tendo se apresuraron a la entrada, con Kasumi detrás de ellos.
Inesperadamente, solo vieron a un panda y a su lado el que asumieron era Ranma, en su emoción el señor Tendo le abrazó para recibirlo, pero de un momento a otro apretó un poco su cuerpo repetidas veces, notó que había algo extraño en su futuro yerno. Se separó desconcertado, Nabiki con la obvia repuesta se acercó mirando en el pecho de Ranma, anteriormente Mayumi, y lo tocó haciendo sonrojar a la chica, pero también confirmando sus dudas.
