TARÁNTULA #7 [Disponible en físico]

SEIS

Antes de leer:

Este capítulo contiene escenas delicadas, hay todo tipo de violencia. Siento mucho si alguien se siente mal leyendo este capítulo, así que, te pido que no sigas leyendo o saltes esas partes. Las escenas no son explícitas, se describirán ciertos actos que pueden hacer sentir incómodas a otras personas. Procedan con cuidado y comenten con respeto.

Jake.

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Luca

Está hecho. Enzo llora bajo las mantas de su cama. Mis padres y la nonna han ido al hospital, Alessio y Massimo han salido a comprar comida del restaurante que tanto le gusta a Enzo. Era mi oportunidad y la he aprovechado. Me abrocho los pantalones y me inclino hacia adelante, destapo la cabeza del mocoso.

-Ya sabes lo que te he dicho, si dices algo a alguien mataré a todos.

-No- solloza.

-Entonces mantente callado, nadie debe saber esto nunca, mocos de mierda.

Lo tomo en brazos para llevarlo al baño, tengo que limpiarlo y curarle el culo antes de que nuestros padres lleguen. Enzo patalea.

-¡Quédate quieto o te vuelvo a follar!- le grito.

Da un grito llorando. Lo meto en la ducha y abro el grifo del agua fría. Se queja más que antes, el agua está congelada.

-Cálmate, maldita sea. El agua fría te ayudará con el dolor.

-¡Déjame!- me grita.

Le doy una bofetada en la cara.

-Te daré otra si no te calmas- lo amenazo.

Lo inclino hacia adelante, el agua cae directamente en su culo. Lo tiene rojo y con sangre. Lo limpio bien, aún tiene mi semen dentro de él.

-Me duele- solloza.

-Ahora te daré medicación para el dolor.

-Se lo diré a mami.

-Hazlo y la mato, Enzo, no estoy jugando.

Le lavo el pelo y el cuerpo con jabón. Después de ducharlo, lo dejo en el suelo y enrollo su cuerpo en una toalla. Sigue sollozando, pero no habla ni hace ningún ruido. Lo tomo por la mandíbula para examinar su cara, me he pasado de fuerza al darle la bofetada, se le esta poniendo rojo.

-Si alguien te pregunta qué te ha pasado en la cara le dices que te has caído.

-No.

Le doy un tirón del pelo.

-¡¿Es que quieres que vuelva a follarte el culo?!

Vuelve a llorar desconsolado.

-¡Cállate!- le grito- Esta noche voy a matar a Massimo.

-¡No!- grita llorando- No voy a decir nada, por favor.

-Buen chico.

Le limpio las lágrimas con las toallas, agarro el botiquín del cajón del lavabo. Saco una jeringuilla y un bote de calmante.

-Date la vuelta- le digo.

Obedece inmediatamente, levanto la toalla y lo pincho en la nalga. Se queja un poco.

-Te dejará de doler en unos minutos- le digo.

Lo visto rápidamente para poder llevarlo al salón y que nadie sospeche nada. Mis otros hermanos deben estar a punto de llegar con la cena. Dejo a Enzo en el sofá justo cuando escucho la puerta de casa abrirse.