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Para YoonGi trabajar con embarazadas era como su colmo. Ver a parejas felizmente casados, juntados o simplemente asistiendo a las citas emocionados por la pequeña personita que se iba creando a causa de su amor le daba jaqueca.

Si, el también en algún momento quiso vivir algo así pero ahora solo ver o imaginar se a él mismo siendo quien con emoción asista a un consultorio, le daban escalofríos.

Iniciando por qué a la temprana edad de quince años tuvo que cuidar a su hermano quien al terminar su carrera había desaparecido como si su esfuerzo cuidando lo no hubiera sido nada para él, después pasando por la chica que había jugado de una vil manera con sus sentimientos y reduciendo los a nada ,hasta lo último ver cómo sus padres se odiaban con cada respiro que daban, en definitiva el amor no era para y menos le rodeaba.

—Todo va muy bien...a este paso la fecha será la planeada.

—Muchas gracias doctor Min, sin su ayuda no hubiéramos tenido está oportunidad.

—No es nada...con los procedimientos correctos fue que se les dió.

Una pareja casada que después de varios intentos iban a tener un hijo, le agradecian con lágrimas en sus ojos.

—Bien, está será la última vez que nos veremos, les deseo una feliz y que su bebé sea sano.

—Nuevamente muchas gracias.

La pareja abandono su consultorio, YoonGi soltó un suspiro cansado,reposo su espalda en la silla y cerró sus ojos.

Ya era tarde, tanto que era hora de irse pero como siempre él se quedaba unos minutos antes de levantar se e ir a casa, ese momento era como su recuperación de energía pues siempre terminaba cansado de convivir con varias personas en el día.

Sobó su cuello y hombros, con un esfuerzo se levantó, dejo su bata y los instrumentos que siempre portaba en el lugar correspondiente y salió de su consultorio.

Iba por los pasillos centrando su vista en el piso, cuando escucho a unas personas gritando,no se acercó al lugar simplemente las miro de lejos.

—¡KwanSeung!No miento, este niño es tu hijo.

—Callate SunHee...¿crees que voy a creerte? Por dios estuvimos juntos una semana y no siquiera me corrí dentro tuyo, ese niño no es mío...solo lo dices por qué MiJoon te dejo sin empleo.

MiJoon... ¿De dónde conocía ese nombre?

—Esa idiota no tiene nada que ver en esto.

—¿Ah no? Entonces por qué fuiste de chismosa, si me enteré que tú fuiste la que le envío las fotos.

—Ella se iba a enterar.

—No lo iba a hacer...

No se quedó a escuchar más pues nuevamente su energía ya estaba demasiado agotada.

Al llegar a su hogar ,se quitó su ropa quedando únicamente en boxers, busco entre su ropero un pantalón holgado y cómodo, se lo coloco dejando sin cubrir solo la parte superior de su cuerpo.

Tomo su pecho sintiendo relieves en este. Cómo era costumbre,los días en dónde su energía se agotaba por completo se miraba al espejo.

Vio su pecho desnudo, adornado de su tatuaje en dónde cubría aquel duro pasado que casi termina con su vida.

Las lineas que ahora casi invisibles por la tinta aún se sentían. Delineaba la más grande y gruesa mientras que con su mirada en el espejo seguia sus movimientos.

—Crei que me amabas...

—Ese es tu problema, ¿Por qué estaría un niño inmaduro?

Él lloraba en el suelo mientras cubría su pecho, su error había sido aceptar esa salida, pero ahora no podía regresar el tiempo.

—¿Que fue lo que te hice?

—Haber nacido es lo que me hiciste...tu simplemente existencia me molesta.

Los amigos de ella se reían ante la lamentable actuación de él.

—Ya hay que acabar, tengo un paquete de cinco kilos esperando nos.

—Gwen...por favor perdóname...no se cómo arreglar todo pero te juro que me volveré un mejor hombre.

Cuánto era lo que había sufrido para que pensará que era su culpa. Min YoonGi había sido manipulado y Gwen había aprovechado la vulnerabilidad de este. Pero y aún que ella los elegía así ,ya estaba cansada de eso, de él, un niño lastimado que no hacía más que culparse había acabado con su paciencia.

—Ese es tu problema Min...ni aún que volvieras a nacer me harías tuya como tanto lo deseas...no estoy para ti, no soy para ti y nunca en lo que queda de tu miserable vida aceptaré estar con alguien tan desagradable como tú...dejen lo ahí.

YoonGi sacudió su cabeza tratando de olvidar ese recuerdo.

Se alejó del espejo y se fue a recostar, lo mejor que podía hacer era dormir un poco antes de que cometiera una estupidez.

Se recostó cubriendo su cuerpo,tomo una almohada y durmió abrasado a ella en posición fetal. Se sentía cómodo así aún que en esos momentos le gustaría estar acompañado de alguien,sin hablar solo sentir su presencia junto a él.

Sabiendo que nadie llegaría cerró sus ojos con fuerza la misma que ejerció en la almohada al apretarla más a su cuerpo, se repetía que todo estaba bien y dejo de pensar para que a los minutos siguientes Morfeo lo recibiera con sueños anhelantes.

I'm not yours.      •||MYG||•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora