Pasaron cuatro semanas más desde aquella suerte de reunión entre los cuatro, en la cual todos habían dejado implícito que la única forma de ponerle fin a sus desgracias era terminar con la banda. Cuatro semanas más en las que Louis había tenido que comenzar a salir en citas con Danielle nuevamente. Cuatro semanas más en las que seguía ocultando su embarazo y el lazo con su alfa. Cuatro semanas más en las que Harry intentaba evitar presionar a sus compañeros de banda para dar el paso que indefectiblemente iban a tener que dar. Cuatro semanas más en las que seguían sufriendo.
Se acercaba la medianoche y Louis reposaba sobre su lado de la cama, recién bañado y con el cabello húmedo, acurrucado y esperando a que su alfa terminara de ducharse para dormir juntos. Cada día se le hacía más difícil permanecer despierto hasta altas horas de la noche. Con ocho semanas de embarazo, los vómitos matutinos habían comenzado a ceder, dándole paso a un cansancio constante que le dificultaba cada vez más llegar al final del día, sobre todo después de dar un concierto como el que habían dado aquella noche.
Aunque era una realidad que no podían sentirse libres sobre el escenario, sin poder besarse, ni tocarse, casi sin siquiera mirarse, Louis y el resto de los chicos estaban haciendo un esfuerzo extra para disfrutar un poco más de la adrenalina que les daba cada show, para recargarse del amor que les daban sus fans y que tanto iban a extrañar. Tan solo quedaba un concierto más en la parte del tour destinada a Norteamérica, y aunque nadie hablaba al respecto, todos sabían que ese sería el último.
Louis hacía zapping en la televisión de la habitación del hotel en la que se estaban hospedando, en un intento por no dormirse y por no pensar en el futuro, cuando un par de golpes sobre la puerta lo sacaron de sus pensamientos abruptamente. Se levantó y caminó descalzo, solo con las medias de algodón algo desgastadas que solía usar para dormir, y se acercó lleno de desconfianza a la entrada. ¿Quién se atrevía a perturbarlos a esas horas de la noche?
"¿Quién es?" habló con el rostro pegado a la puerta.
"Soy yo, Niall. ¿Podría pasar tan solo unos minutos?"
"Por supuesto Ni, eres siempre bienvenido" respondió el castaño mientras le abría la puerta.
"Perdón por molestarlos tan tarde, iba a venir mañana, pero no aguanté la ansiedad" se rio, mostrándose alegre y con un brillo en los ojos que hacía tiempo ninguno de los cuatro tenía.
"No hay problema Ni" se rio Louis mientras le ponía seguro a la puerta. "¿Se puede saber qué te tiene tan ansioso? No te veía así de entusiasmado desde que nos dijeron que íbamos a probar el asado de Argentina"
"No es precisamente comida" sonrió cómplice, sacando una bolsa que llevaba oculta detrás de la espalda. "¿Está Harry?"
"Se está terminando de duchar, ya le debe faltar poco. Pero me estás dando ansiedad a mí también, ¿qué hay en esa bolsa?"
"Mmm... no lo sé, tal vez deberíamos esperar a tu majestuoso Alfa para abrirlo. No quiero que me gruña y eche de la habitación por darte un regalo"
"¡Heyyy! ¡Harry no es tan celoso!"
"Dijo nunca nadie" se rió el irlandés.
Louis tan solo puso los ojos en blanco. En ese preciso momento Harry salió del baño con una toalla en la cintura y su cabello húmedo goteando sobre sus hombros. El omega se volteó a mirarlo y tuvo que contenerse para no mojar sus pantalones en frente de su amigo.
"¿Qué hace Niall en nuestra habitación?" exclamó el más alto con un gruñido.
"¿Ahora sí me darás la razón?" el rubio se dirigió a Louis con una mirada llena de autosuficiencia.
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"Betas" - Larry Stylinson - Alfa/Beta/Omega
FanfictionSer una banda formada enteramente por betas les daba estabilidad. Nadie pensó que en solamente un día, esa estabilidad se podía derrumbar completamente. ADVERTENCIA: Contenido sexual explícito. HISTORIA ORIGINAL Edit de portada: @xIndomitablex