Si no eres tú, soy yo... ( XO, Kitty )

CAPITULO 1. SEGUNDAS OPORTUNIDADES

Las vacaciones llegaban a su fin, aunque eso poco significaba para Kitty, ya que su experiencia en KISS se había acabado hace mucho. Atrás quedaron muchas dudas por resolver, muchas preguntas por hacer, muchas experiencias nuevas por vivir, muchas cosas por decir...
Ya no habría ocasión de hacer ninguna de esas cosas, y aunque por una parte le alegraba estar en casa con su padre y sus antiguos amigos, algo en ella se había roto.
Seguía absorta en sus pensamientos cuando el tono de su teléfono la despertó de sus pensamientos...

-Min Ho...- dijo en voz baja al leer la pantalla del teléfono.
-¿Si? Sí....claro, por supuesto....nos vemos allí...- dijo tratando sonar alegre tras contestar la llamada.

Min Ho la había llamado para quedar con ella, y despedirse, ya que él debía volver a Seoul para comenzar el segundo semestre. Al pensarlo, algo se revolvió en su interior. Desde que Min Ho le confesó que estaba un poquito (o muy) enamorado de ella, no habían vuelto a hablar del tema. Lo cierto es que habían quedado durante las vacaciones, habían salido con otros amigos, habían ido a comer juntos, pero ella nunca se atrevió a sacar el tema y Min Ho tampoco volvió a decir nada...A lo mejor ya se le había pasado, quizás estaba confuso...pero le encantó que sacará hueco en su visita a su madre para pasar tiempo con ella.

La verdad es que había tenido unas vacaciones maravillosas; y en parte, estaba agradecida de que el tema no hubiera salido a relucir, ya que había disfrutado de muy buenos momentos con Min Ho en total normalidad, sin tener que pensar en dramas amorosos. Sólo un par de amigos divirtiéndose, sin más...pero ahora, que sabía que tenía que decir adiós y que quizás no volviera a verlo en mucho tiempo...o quizás nunca, una tristeza inmensa la invadió. Aquel momento que vivió en el avión cuando volaron juntos a casa, se coló en su cabeza...y al mismo momento apareció la imagen de Yuri recibiendo a Juliana en el aeropuerto. Menuda sensación de vacío... iba a perder tantas cosas tan especiales...

Por una parte no quería despedirse de Min Ho, pero debía hacerlo, se lo debía. Además, él era el eslabón que aún la conectaba con KISS y con Seoul. Excepto por Q, apenas había mantenido contacto con los demás. Yuri la había llamado alguna vez pero no le contestó y después no quiso devolverle la llamada por no interrumpirla en sus vacaciones con su recién llegada novia. No volvió a recibir una llamada suya...
Y Dae...ni él la contactó, ni ella tuvo el valor de llamarlo o escribirle ni una sola vez...y aunque a veces echaba de menos hablar con él, en el fondo pensaba que ese tiempo de silencio entre ambos, era lo mejor.

Terminó de vestirse para ir al aeropuerto encontrarse con Min Ho. Habían quedado en una cafetería cercana para tomar algo antes de que cogiera su vuelo. De repente su teléfono volvió a sonar, una y otra vez...

-Ya voy de camino Min Ho, que pesado....bueno, casi de camino, en cuanto me ponga el otro zapato y salga por la puerta....y atraviese la ciudad...- miró la pantalla del teléfono y vio un número muy extraño. No era Min Ho.

-¿Quién podrá ser?- se dijo a si misma a la vez que descolgaba el teléfono y se lo llevaba a la oreja.

-Buenos días, ¿Hablamos con la señorita Song Covey?- preguntó una mujer con un acento ya conocido por ella.

-Sí, soy yo, ¿De qué se trata?- preguntó confundida.

-Verá, le llamamos de la secretaría de la Escuela Internacional Coreana de Seoul (KISS), para confirmar si usted asistirá el próximo semestre, aún no se ha actualizado la documentación...- le dijeron.

-Oh ya....si...debe haber algún error, quizás no se ha notificado, pero fui expulsada el semestre anterior y yo no....-estaba excusandose cuando la interrumpieron.

-Si, estamos al tanto. Pero ha sido readmitida, su plaza sigue reservada para usted en cuanto mande el formulario de readmisión y firme el contrato que se le ha enviado por correo electrónico. Aún no hemos recibido nada y queríamos confirmar si va a volver o no....- le explicaron.

¿Perdona? ¿Estaba escuchando bien? ¿De qué iba todo esto?

-No he mirado el correo hace unos días, lo siento...pero ¿Esta usted segura que no hay ningún error? Me dejaron muy claro que no podría volver a la escuela...- dijo Kitty.

-Si, estamos completamente seguros, la directora en persona nos ha ordenado que nos aseguremos de que haya recibido la documentación y de contactar para confirmar si asistirá o no el próximo semestre....-le explicó.

-Vaya...no tenía ni idea, pero, ¡Claro que si! ¡Volveré! Voy a mirar el correo y enseguida le remito la documentación. - colgó el teléfono algo histérica y rápidamente ojeó los correos electrónicos. Allí estaba. ¡Qué emoción! ¿Cómo no lo había visto?

-Documento de readmisión, confirmación para la residencia de estudiantes, contrato.... ¿contrato? - abrió el documento y lo leyó por encima. Estaba asombrada y maravillada al mismo tiempo. No podía ser más feliz.

Según el contrato debía acompañar a una nueva estudiante, y ser su sombra. Estaría obligada a formar pareja de estudio con ella, a compartir habitación con ella. Debía enseñarle la escuela...
Ella tenía don de gentes, todo el mundo lo sabía....incluso la directora. ¡Eso estaba chupado! Y tenía que llegar a unos mínimos de rendimiento con sus notas....vale, eso sería más difícil, pero esta vez se esforzaría al máximo... ¡Si tendría una compañera estadounidense con quien estudiar! ¿Qué podría salir mal?

Terminó de leer las condiciones...
Debía volar con ella desde Estados Unidos... ¡Ese mismo día! ¡¿Qué?! Desde luego...las segundas oportunidades existían, ¡y vaya forma de aparecer!

-Muy bien, será mejor que me de prisa...-dijo sacando la maleta vacía del armario y tirándola sobre la cama.

**Basado en los personajes y trama inicial de la primera temporada de "XO, Kitty" de Jenny Han. La trama de esta historia es completamente invención mía, y no permito su reproducción, copia o distribución sin mi previo consentimiento. Obviamente los personajes base que aparecen en la serie y en esta historia, son creación original de la escritora Jenny Han, y no de mi invención. Espero lo disfruten y vuelvan para leer la continuación.