Todos atienden sus respectivos dolores de cabeza al día siguiente, pero incluso el día después de Navidad Robert tiene que trabajar, por lo que se marcha después del almuerzo, y Pedri desaparece durante el resto del día. No se miran a los ojos durante el breve tiempo que pasan compartiendo la cocina, bebiendo café y compartiendo aspirinas para el dolor, y cuando Lewan regresa esa noche, Gavi lo sobre compensa mostrando su afecto por él, sintiendo una extraña sensación de culpa. Y cuando el rubio lo lleva a su cama y ofrece sexo oral. Pablo se lo permite, a pesar de que no se siente realmente con el ánimo, se obliga llegar al orgasmo gracias a los pensamientos que tiene de unos ojos, una boca, piel y manos que no se parecen en nada a las del polaco, aumentando así la culpabilidad.
Se levanta de la cama más tarde, cuando el mayor se ha dormido, se interna en la oscuridad y el frío de la sala, mira a su alrededor buscando la manta y cuando no la encuentra, se pone la sudadera con capucha que encuentra en su lugar. No es hasta que se envuelve en ella mientras mira la televisión que se da cuenta que le pertenece a Pedri, su olor se filtra en sus sentidos provocando un hormigueo sobre su piel.
Pedri llega un momento más tarde, como siempre, y luce curiosamente tranquilo. Gavi no puede leer su lenguaje corporal, ni siquiera sabe cuánto recuerda de la noche anterior, y cuando Pedri no hace más que dejar las llaves en el mostrador y sonreír brevemente, Gavi pregunta
Gavi: ¿Dónde has estado?
Pedri: Pase el día con Cielo.
Gavi asiente con la cabeza, y espera que sea la verdad y que Pedri no haya estado caminando por las calles todo el día solo, evitandolo.
Gavi: ¿Lo pasaste bien?
Pedri: Fue bueno, sí. - Pedri murmura vagamente. - Voy a poner el agua a hervir. Regresa con dos tazas de té caliente y pone una en manos de Gavi mientras se sienta junto a él
Gavi: Gracias - esto se siente tan irreal y a la vez tan normal que no puede entenderlo.
Pedri asiente señalando el televisor. -¿Con quién estamos hoy?
Gavi: Pablo Alborán - dice el ojimarrón después de tomar un momento para pensar. En realidad no ha estado prestando atención al programa de tv.
Pedri: Por cierto, tengo algo que decirte.
Gavi: Habla - dice el menor sin dejar de mirar la tv.
Pedri: He salido en un episodio de "El Hormiguero", deberías verlo algún día con Robert.
La mención de Lewan es deliberada, con eso lo ha traído aquí, poniéndolo entre ellos como una barrera. Un recordatorio de por qué anoche fue un error, y no el tipo de noche de la cual Gavi todavía puede recordar cada detalle, sentir cada toque.
Traga saliva.
Gavi: Mira, lo que pasó anoche...
Pedri lo mira y con tal mirada le pide que calle. - ¿De verdad quieres hablar de eso?
Gavi: Fue solo que - dice el menor, pero sí, lo quiere, de verdad - bebimos mucho, las cosas se pusieron un poco raras...
Pedri: Está bien - dice el canario, con tono ligeramente molesto.
Gavi contiene la respiración, mira el costado de la cara del rizado.
Gavi: Me voy a casar con tu mejor amigo - pero lo está diciendo por las razones equivocadas y lo sabe. No está diciéndolo para recordarle a Pedri por qué lo que pasó la noche anterior estuvo mal, lo dice por qué lo que está sintiendo es peligroso y masivamente inapropiado.
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Su Padrino (Gavi & Pedri)
FanfictionGavi está a punto de casarse tras un romance con un hombre que conoció una noche en un bar, Pero entonces conoció al mejor amigo de su prometido. El que iba a ser Su Padrino. La quimica que comparten Gavi y él es imposible de ignorar, pero el menor...