Te odio, sabes?

¿Lo que siento en realidad?

Hoy había pasado algo muy extraño... ¿Acaso estaba soñando? No lo tenía claro, pero por más que le daba vueltas en mi mente, todo seguía indicándome que hace tan solo unos minutos Keke y yo estábamos abrazadas, sentadas en el suelo del gimnasio luego de que ella se desmayase. ¿Realmente fue así? ¿No había imaginado todo eso luego de la sorpresa que fue verla desmayada? 

- No... No podría haber imaginado algo como eso cuando lo sentía tan real... - ¿A quién quería engañar? Solo estaba tratando de buscar alguna boba excusa con la que intentar ocultar lo feliz que ahora mismo me sentía -. *sonrisa* Como si eso pudo haber sido un sueño~ 

Hace poco habíamos vuelto luego de comer algo en un puesto de comida que hay cerca del instituto y ahora mismo ella había ido a cambiarse por algo más cómodo para que pudiésemos practicar el baile. Yo ya había venido con mi ropa lista, así que me había quedado sola en el gimnasio, esperándola e intentando relajar mi alocado corazón.

- *risita* ¿Cómo puede ser tan adorable? - me preguntaba a mí misma mientras empezaba a abrazarme, tratando de replicar la calidez de su cuerpo -. ¿¡EHH!? *rubor* E- Espera un segundo... ¿¡Qué diablos estoy diciendo!? So- Solo fue un abrazo, a- además... Ambas solo somos amigas jaja... ... *suspiro* Solo somos amigas...

Al repetir esa última parte, un dolor punzante apareció en mi pecho; de repente era cruel pensar en ese detalle. Una de las razones por las que acepté en su momento actuar como su novia fue para darme cuenta de qué es lo que yo sentía en realidad y ahora, luego de todo el tiempo que ha pasado me he dado cuenta de la cruel verdad.

- Que idiota jaja... - me decía en suspiros mientras llevaba mi mirada al piso -. Al final solo terminé cayendo en mi propio juego ¿No es así? - repentinamente, la felicidad que había sentido hace tan solo unos segundos, ahora se había tornado en melancolía y soledad -. Para ser una "estrella" del mundo del entretenimiento, eres un desastre al caer en los sentimientos de tu propia actuación Sumire... *suspiro* 

Seguramente iba a seguir deprimiéndome y pensando en todo lo que había pasado, hasta que alguien se acercó a mí y llamó mi atención con una voz amistosa. 

- Ya estoy de vuelta jaja~ Vaya vaya, conociéndote pensaba que me retarías por haber tardado un poco - me dice sonriendo mientras me extendía la mano para ayudar a que me levantases -.

- Oh- Bi- Bienvenida de vuelta y cla- ¡Claro que no! Yo no hago esas cosas (Ella está de regreso... Será mejor que regrese mi mente a la realidad) 

- ¡Vamos! Ya es hora de que practiquemos ¿No es así?

- *risita* Si si, vamos. Además, antes estabas toda nerviosa ¿Qué pasa ahora con todo ese entusiasmo?

- ¿¡Eh!? *rubor* E- Es solo que ya salimos a comer algo y ya tengo energías... S- si...

- Claro, claro jaja~ A ver... Aquí estará bien

El gimnasio era bastante alto, mucho más si estábamos ahora mismo solo las dos aquí. Primero le enseñaría lo básico del vals y luego de eso ya practicaríamos con algo de música. Tenía el plan completamente listo desde ayer, pero ahora que el momento había llegado podía sentir como los nervios se iban haciendo más fuertes. 

- El vals no es nada complicado, así que estoy segura de que lo aprenderás rápido *sonrisa* ¿Lista? - le digo mientras veía como ella se paraba frente a mi -.

- Cla- Cla- ¡Claro! ¡Keke está lista! 

- *risita* Vamos, respira un poco primero. Despacio... Como lo hacemos antes de nuestras presentaciones ¿Ok?

- E- Entendido... Creo que puedo hacerlo...

No importaba como lo vieses, podías notar lo nerviosa que estaba. Su respiración era agitada y su postura era de lo más rígida, como cuando ves algo que te asusta de repente. Era algo adorable, pero ahora mismo no teníamos mucho tiempo como para que pudiese molestar un poquito.