𝐈𝐍𝐓𝐈𝐌𝐎 ✧ Minlix

Six⁶

—Yo, tú, él, nosotros, ustedes, ellos.—Minho escribió sobre el cuaderno recitándolo en voz alta mientras la mirada de su estudiante estaba encajada en su mano, quizás sin entender. —Debes aprender esto principalmente, después aprenderás a formular preguntas.

—¿Puedo aprender primero a formular preguntas?— Felix preguntó en chino. Minho se mantuvo en silencio un par de segundos hasta que asintió y cambió de hoja.

Era su tercera clase y Felix apenas había aprendido a como presentarse y a decir un par de palabras sueltas como "diccionario" y "por favor" que eran necesarias para él. Minho tenía un montón de paciencia, no le molestaba perder clases si se suponía que sus faltas estarían justificadas, y confiaba lo suficiente en sí mismo como para poder las asignaturas solo entregando el trabajo final.

—Qué, cómo, cuándo, dónde, por qué, cuál, quién...— Dijo en voz alta anotándolas para el chico. —Cada que necesites preguntar algo estas palabras te ayudaran.

—¿puedes darme ejemplos?

Minho pensó durante varios segundos desviando su mirada a la mano delgada sobre el diccionario, apreciando la tersa piel del chico que ya habia tenido oportunidad de tocar. Recorrió con curiosidad el antebrazo descubierto hasta que decidió detenerse, no era tiempo para ese tipo de distracciones.

—¿Qué sientes cuando me ves?— Preguntó. El niño dio un pequeño salto. —¿puedes responder a eso?

—Sientes...— Felix parecía no entender la palabra.

—Sientes, de sentir, percibir o notar una sensación.— Aunque sería más fácil darle la traducción exacta Minho se tomó el timpo de explicarlo lento. — Puedes sentir una caricia o golpe.

—Oh... Sentir.— Dijo el niño en chino a lo que el mayor asintió. —Yo siento... ¿un buen amigo?

¿Ellos eran amigos? ¿a solo tres días de conocerse? Minho negó. Sí, se tomaron de las manos como dos niños pequeños, pero eso fue porque Felix malinterpretó una pregunta de Minho y la tomó como una orden, pero solo eso. Pensando un poco más en ello se dio cuenta de lo obediente que resultaba el chico, una sonrisa apareció en su rostro al mirarlo a pesar de que el niño mantenía una expresión apenada al haber sido negado por el mayor.

—Tu sientes pena.— Habló Minho estirando su brazo hasta alcanzar la delgada de Felix, acariciando su muñeca y antebrazo con un lento movimiento, la mirada del menor se elevó sorprendida, sonrojada hasta las orejas. —Y también sientes una caricia. Pero no puedes sentir un buen amigo.

Felix no apartó su brazo así que Minho siguió acariciando su antebrazo. Si era todo lo que podía tocar ¿Por qué no disfrutarlo? Cuando decidió que había sido suficiente se reacomodó en la silla y tomó el cuaderno escribiendo algo más bajo la mirada del menor. ¿Lo haría sospechar si lo tocaba de nuevo? Después de todo los chicos de quince años saben lo que es tener sexo, no dudaría si Felix le dijera que había notado sus miradas lascivas antes.

Los capítulos son cortos pero contiene bastantes(⁠ ͝⁠°⁠ ͜⁠ʖ͡⁠°⁠)⁠ᕤ