Maratón 1/5
-¿Quiere... sacudió la cabeza-quieres ir a montar?
Ella lo miró emocionada.
-¿Me vas a acompañar?
-Si quieres.
-Si quiero-asintió contenta.
-Bien-sonrió él-Prepararé a los caballos
entonces, Lucero observó como él sacaba a White de su cuadra y luego agarraba a otro caballo color café. Ella frunció el ceño levemente.
-Manuel-le habló.
-¿Si?-preguntó.
-No estarás pensando que voy a subir a White ¿o si?
Él la miró sobre su hombro y le dedicó una galante sonrisa. Silvia sintió cosquillas en la panza.
-Es tu caballo, enana-dijo divertido, Ella sonrió -Obvio que vas a subirte a él. Además de que ya te dije que no tienes que tenerle miedo.
-¿Y cómo sabes que no va a hacerme daño?-quiso saber.
Manuel les colocó las sillas a los animales.
-Yo mismo lo crié y enseñé todo lo que sabe.
-Así que... ¿debo confiar en tu enseñanza?
-Claro que sí
Terminó de acomodar todo y se giró a verla. Ella lo miró algo nerviosa.
-Creo que olvidé como montar, Manuel
-Tonterías-dijo él y se subió al caballo café-Ven aquí.
Lentamente ella se acercó hasta donde estaba él, Manuel se inclinó un poco y sin el más mínimo esfuerzo la alzó y la colocó sobre White. El caballo protestó un poco y ella se agarró con firmeza del brazo de Mauel, El castaño le habló al caballo y al instante este se quedó quieto, Lucero lo miró sorprendida.
—¿Siempre es así de obediente?-quiso saber
-Solo conmigo
Manuel le dio un leve golpecito a su caballo y este comenzó a galopar. Silvia miró asombrada como se alejaba y salía del establo. Respiró profundamente y tomó las riendas de White. No era que ella había olvidado como hacerlo, no,
Solo le faltaba un poco de práctica. Pateó el costado del caballo y este comenzó a andar a toda velocidadad, Lucero ahogó un gritito y la luz del sol le dio en el rostro cuando salió del establo. Divisó a Manuel a unos cuantos metros, esperándola. El caballo se dirigió hasta él.
Ella lo detuvo cuando estuvo cerca. Manurl la miró realmente divertido. Lucero se aferró con firmeza y lo miró con seguridad.
-Te juego una carrera-le dijo. Él arqueó una ceja
-¿Una carrera?-inquirió.
-Si-sonrió ella-Hasta el viejo roble.
—¿Aun recuerdas dónde queda? —dijo
sorprendido.
-Claro que sí, salvaje.
Él sonrió bobamente, Lucero se acomodó mejor y lo miró, Manuel también se acomodó.
-Nada de trampas, enana.
-Jamás hice trampa-aseguró.
-No lo sé, no lo sé.
Ella rió divertida.
-¿Listo?-él asintió —¡Ya!
White comenzó a tomar ventaja. Sorprendido, Manuel, intentó alcanzarlos. Pero le fue imposible, ese caballo era salvaje.
Ella llegó y detuvo a su caballo. Se bajó y comenzó a festejar divertida. Volvió a abrazar al gran corcel blanco. Parecía ese caballo de los cuentos de hadas, que traían encima al príncipe azul.
-¡Ay que lindo eres, White! Gracias hermoso, gracias por dejarme ganar-le dijo sin soltarlo.
Manuel llegó hasta ellos y se detuvo.
-Tú sigue, White, sigue y voy a contarle a Estrella que le estas coqueteando a la hija del jefe.
Silvia se giró a verlo y sonrió divertida.
—¿Quién es Estrella? —le preguntó.
-Estrella es la novia de White —le contó
Ella se giró a ver al caballo.
-No puedo creer que mi caballo tengo una novia-le dijo divertida, El caballo pateo el suelo unas cuantas veces.
Ambos rieron. Ella volvió a mirar a Manuel
-¡Te gané!
-Eso fue trampa-dijo él.
-¿Trampa? Claro que no-dijo ella sin poder creerlo-Siempre haces lo mismo, eres un mal perdedor.
-¿Yo mal perdedor?, Tú eres una tramposa-le dijo él.
-Ahora por eso recibirás tu castigo.
Él la miró bien y cautelosamente comenzó a caminar.
Lucerl se agachó y buscó lo que estaba buscando.
Barro. Se puso de pie y le arrojó lo que había tomado, Manuel no pudo evitar la maldad de la trigueña, y no llegó a salirse a tiempo de su camino. El frío barro cayó justo en su brazo derecho. Se miró a sí mismo para luego dirigir su mirada a Lucero. Ella rió divertida y volvió a tomar barro. Se acercó a él y comenzó a pasarte barro por la cara.
-Creo que así, te verás muy bien-dijo divertida.
Cuando quitó sus manos de su rostro, Manuel tomó un poco de barro de su cara e imitó su acción.
Lucero cerró los ojos al sentir el asqueroso y frío barro sobre su piel.
-Creo que así, te verás igual de linda que Estrella-le dijo y se alejó de ella para empezar a correr.
Ella abrió los ojos y lo encontró corriendo.
-¡Ven aquí, Manuel! —le dijo fuerte y comenzó a seguirlo.
El rió divertido al verla correr detrás de él. Detuvo sus pasos y la esperó de espalda.
Lucero corrió más rápido al verlo detenido, Cuando lo alcanzó se subió a su fuerte espalda.
Manuel la sujeto con firmeza y comenzó a correr, Ella se empezaba a arrepentir de haber subido.
-¡Ya, Manuel! ¡Bájame! —gritó divertida.
Él no le hizo caso, siguió corriendo. Hasta que a causa del cansancio se dejó caer con ella encima. Ambos rieron divertidos.
-Creo que ya no tenemos 12 y 13 para hacer esto-le dijo agitado.
Ella rió divertida e intentó ponerse de pie, pero sus manos resbalaron en el barro y cayó de lleno sobre él. Lo volvió a mirar a los ojos, Manuel pensó que iba a volverse loco y no podría detenerse si ella seguía mirándolo así. Había tantas cosas en aquella mirada. Su corazón se aceleró aún más.
Lucerl otra vez intentó ponerse de pie, y ésta vez tuvo éxito. Le entregó una mano y lo ayudó a ponerse de pie. Manuel se rascó la nuca, algo nervioso.
-Creo... creo que deberíamos volver.
-Sí, también yo... —asintió ella.
Se subieron a sus respectivos caballos y cabalgaron en el más completo silencio hasta la estancia.
___________
¡Holaaa!, aqui está el primer capitulo de maratón, luego les subo el siguente capitulo antes de irme a la prepa :)
los adoros <3
Olivia
