Mundos diferentes: 2.

56 9 0
                                    

Desempaco todo para luego acomodar algunos muebles y sacar su libros, un golpe en la puerta la distraigo y fue a abrir.

—Toma es el horario, mañana a las 7:00am te quiero lista y toma son los apuntes para que no estés tan perdida—le dió sus libretas.

—Gracias—cerró la puerta para dejar las libretas en el escritorio y suspirar—Ojalá estés aquí—susurro a una foto.

Terminó de escombrar y su padre le mandó un mensaje de texto.

Chat: Papá.
En línea....

Papá: Kagome el director ya está avisado, podrás iniciar mañana por favor no le causes problemas al jóven Taisho.

Si papá, gracias, adiós y dile a mamá que la quiero cuídense.

Última vez: hace un minuto.

Sacó sus auriculares y los conectó a su teléfono para empezar a pasar los apuntes pero recordó una pequeña cosa.......¡Tenia que comprar cosas nuevas!.

—Kagome, más estúpida no podías ser—llamó al chofer—Martín por favor podrías traerme una cajita azul de madera que esta en mi habitación?, si mi padre pregunta dile que la olvidé—pidió.

Si Señorita—colgó.

Salió de la habitación para encontrase que Inuyasha estaba haciendo algo para comer pero sólo para él.

—¿Paso algo?—volteó a verla.

—No—empezó a dar vueltas—Una pregunta, ¿Aquí hay una tienda cerca?—detuvo sus ansiosos movimientos para verlo a los ojos.

—Si te llevó—terminó de cocinar.

—Tu...comida—dijo. Pues no quería queque su comida se enfriara.

—Tranquila, pero....cambiate tu ropa llama la atención—miro las prendas de marca, Gucci y Prada.

—Ah—se fue a su cuarto.

Su madre siempre le hacía comprar ropa cara pero también algo que no llamará la atención ropa más cómoda, barata y común.

Se hizo una coleta y terminó de vestirse cuando el grito de Inuyasha la interrumpió.

Ropa:

—¡Niña bonita!—ese era el apodo que le había dado y no como un halago si no haciendo referencia a su ex estatus social

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Niña bonita!—ese era el apodo que le había dado y no como un halago si no haciendo referencia a su ex estatus social.

—¿Que pasa?—salió y vió a Martín—Gracias Martín, puedes irte—sonrió y Martín hizo una reverencia y se fue.

—¿Era tu chofer?—pregunto mirando la Caja en sus manos.

—Si, supongo que mi padre lo despedirá—susurro con tristeza.

Destapó la Caja y encontró varios rollos de billetes y algunas monedas.

—Lo sabía—saco un rollo de billetes y le puso un cansado a la caja para luego dejarla en su cuarto y regresar a la sala—Vamos—guardo el dinero en su pequeña bolsita.

Inuyasha tomó las llaves y salió poniéndole seguro para luego caminar a lado de esa niñita que tenía puesto sus auriculares y su sonriente e ingenua se convirtió en una mirada seria para que por fin llegarán a la tiendita.

Al entrar fueron a la sesión de papelería y tomó lo necesario al igual que a la sección de comida e Inuyasha arrugó el ceño.

—Hice comida—reprochó quitándole el producto.

—Pensé....que solo era para ti—dijo.

—Que haya dicho que no te doy a mantener no significa que no te voy a alimentar—corrigió.

—Esta bien gracias—sonrió.

—Vamos debemos de darte una copia de la llave cuando no pueda acompañarte a casa—ella asintió.

Fueron a la caja y pagaron para luego guardar las cosas en su mochila para ir al lugar pasando unos quince minutos para que le entregarán la llave y ella las pusiera con un llavero algo infantil:

Fueron a la caja y pagaron para luego guardar las cosas en su mochila para ir al lugar pasando unos quince minutos para que le entregarán la llave y ella las pusiera con un llavero algo infantil:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Eres rara—dijo pero ella se encogió de hombros.

Llegaron otra vez al Departamento, comieron y se bañaron (por separado) para que luego Kagome se encerrara para pasar los apuntes a sus nuevas libretas y pensaba que debía llevar uniforme pero no, al ser Universidad no era necesario.

1:30am.

Se levantó por un vaso de agua cuando vió luz proveniente del cuarto de la chica azabache por lo cual entró y la encontró dormida en el escritorio pero para su sorpresa ya había terminado de pasar todos los apuntes solo faltaba meter las libretas en la mochila Rosa.

Así lo hizo. Luego de meter las libretas la cargo a ella estilo princesa y la recostó en la cama tapandola y apagó la pequeña lámpara para estudiar y salió del cuarto con dirección al suyo.

Mundos distintos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora