Mundos distintos.

Mundos Diferentes: 12.

La puerta se abrió y con ello la sirvienta estaba tratando de impedir el paso pero ya era demasiado tarde.

—¿Que haces aquí de nuevo?—le preguntó a su padre.

—Vine a disculparme, ahora de verdad, tu no tenías la culpa de que tu hermano muriera eras muy pequeña además el responsable soy yo, los dejé jugar solos sin supervisión—dijo—Te he presionado todos estos años por que eres igual a mi y en parte eso me molestaba por que me recordaba lo mucho que sufrí para llegar aquí y trataba de no hacerte sufrir pero terminé haciéndote más daño—se disculpó de rodillas.

Su hija se hinco a su altura y tomó sus manos haciendo que la mirará a los ojos.

—Te perdonó. Tu perdóname a mi por ser caprichosa siempre pensé que llevando te la contraria llamaría tu atención y tal vez así me notarías pero fue un error. Pero te agradezco toda la mentira que creaste por que gracias a eso encontré a una persona maravillosa a la cual amo y no le importó ese secreto o tener que esperarme dos años para poder estar de nuevo juntos—le respondió para luego pararse ambos.

—Gracias hija—la abrazo llorando por fin dejó de lado su orgullo.

—Gracias a ti también papá—se quedaron abrazados así un rato más hasta que se soltaron.

—Me voy, tu madre debe de estar preocupada, puedes volver a casa o quedarte con Inuyasha si el lo permite—se acercó al nombrado—Cuídala muchacho no quiero que le causes dolor más de lo que yo hice, Bienvenido yerno—le dió un apretón de manos sonriendo al igual que el oji dorado y se fue.

—Eso fue hermoso—dijeron las dos espectadoras femeninas.

—Lo fue—respondió limpiandose las lágrimas.

El resto de la noche se la pasaron hablando de como eran Inuyasha y Sesshomaru de pequeños y alguna que otra experiencia vergonzosa que así reír a las dos chicas y causaba un sonrojo en los dos hermanos peli platas.

Kagome e Inuyasha regresaron al Departamento pero Inuyasha ya tenía un plan en mente.

⚠Advertencia: contenido 18+⚠

—Ahhh Inu~

Gimió cuando el peli plata empezó a besar su cuello y hombros.

—Después de dos largos años hoy por fin serás mía.

Reclamó de manera posesiva haciendo que la chica se sonrojara.

Siguió unos minutos más con sus besos en aquella zona hasta que con la otra mano empezó a bajar el cierre del vestido tirandolo al piso.

—No~es justo que la única desnuda sea yo.

Dijo con la respiración entre cortada. Sus pequeñas manos desabrochaba uno a uno de los botones de la camisa quitandosela.

El peli plata sonrió complacido guiandola a la cama donde la recosto casi desnuda y el se quitó el resto de ropa que faltaba para luego posicionarse encima de ella.

—La vista es~realmente hermosa~

Sus besos bajaron a la clavícula y luego al inició de los senos haciendo que los gemidos de la chica abajo suyo aumentarán.

—Ahhh~Inu~Inuyasha.

Empezó a chupar un seno y a amasar el otro con una de sus manos. Los gemidos y jadeos aumentaron.

Estaba totalmente excitada y necesitada pues los besos y caricias que el peli plata le daba ya no eran suficientes quería más mucho más. Inuyasha lo notó y empezó a bajar sus dedos a su intimidad acariciando con suavidad y salvajismo su clítoris haciendo que Kagome se arquera del placer y gritara.

—¡Ahhh~!

Era uno luego dos y al final tres dedos los que habían dentro de ella ocasionando que llegará a su orgasmo gritando el nombre del causante de todo.

—¡Inuyasha!

Su esencia estaba en toda la mano del peli plata que sin miedo alguno la tomó toda, remplazó sus dedos por su lengua ocasionando más placer en la azabache y que sus gemidos ahora fueran gritos.

—¡Ahhh~mas~mas rápido!

Pidió gritando a lo que Inuyasha obedeció cuando estaba apuntó de llegar a su segundo orgasmo Inuyasha se detuvo obteniendo un gemido de protesta.

—Ya estas lo suficientemente húmeda para que no te lastime así que prepárate.

Se posicionó en su entrada y la penetró de una. Algunas lágrimas cayeron de la cara de su linda azabache que el limpio con delicadeza.

Espero a que ella le diera el permiso para continuar y empezó con las embestidas suaves pero una vez que notó que el dolor paso sus embestidas fueron salvajes haciendo delirar a la chica.

—Ahhh~Inuu~Mas.

—Como deseé.

Las embestidas eran más rápidas haciendo que llegará a un segundo orgasmo gritando.

Inuyasha salió de ella para posicionarla boca abajo y metiendo su miembro una vez más.

—Ahhhh!

Las embestidas eran salvajes y aceleradas logrando que la chica llegará a un tercer orgasmo.

Inuyasha volvió a salir de ella nuevamente para volver a ponerla boca arriba y subir sus piernas a sus hombros penetrandola una vez más.

—Ahhh~sigue~mas!!

La cuenta de sus orgasmos ya estaba pérdida hasta que ambos llegaron al clímax ya bastante exhaustos.

—Te-Te amo Inu.

Dijo la chica antes de caer dormida en el pecho de su amado.

—Yo también te amo pequeña.

Beso su frente dirmiendose al instante pero ambos muy felices.

{No soy muy buena escribiendo lemon pero se hace el intento, se cuidan}.

¡Sayonara❤✨!.