OBDA - Mi novio virtual es en realidad un Extraterrestre

106. Besos

Para Stanxing, hoy era como el día de Año Nuevo.

Naturalmente, la gente común estaba ocupada preparándose para las festividades de Año Nuevo, y la familia imperial también estaba ajetreada desde primera hora de la mañana, especialmente el Príncipe Heredero. Tenía que levantarse antes del amanecer para presentar sus respetos a los antepasados y vestirse con pesadas túnicas ceremoniales.

Acostado en la cama, Jian Mei murmuró somnoliento: "Qué temprano".

Lu Xingwang lo arropó y le susurró: "Vuelve a dormir".

Jian Mei quería dormir, y los pasos de Lu Xingwang eran en realidad muy ligeros y no le molestaban. Sin embargo, se despertó al cabo de un rato porque se sentía vacío sin nadie a su lado, y su brazalete de información no dejaba de sonar.

Jian Mei lo abrió y se sorprendió al encontrar un mensaje del joven maestro.

El joven maestro decía:【Meimei, felices fiestas.】

Jian Mei sonrió y contestó: 【Joven maestro, ¡felices fiestas para ti también!】

Hubo un momento de silencio por parte del joven maestro, y contestó: 【He estado esperando a que me enviaras un mensaje. Pensaba que este año volverías por vacaciones. ¿Cómo está la capital? ¿Te va bien?】

Jian Mei no esperaba que el joven maestro lo estuviera esperando.

En su impresión, el joven maestro tenía a toda la familia del alcalde y a un grupo de gente a su alrededor. Debería ser un lugar animado y bullicioso. Ahora que las piernas del joven maestro se habían curado, ya no debería sentirse solo.

Pero Jian Mei aún así respondió: 【Gracias, Joven Maestro. No te preocupes, la capital está bien, y a mí me va bien.】

Sólo entonces respondió el joven maestro: 【Bien, eso está muy bien. Cuando llegue la primavera del año que viene, iré a la capital a estudiar. Estoy deseando verte, Meimei.】

Jian Mei recordó esto de repente. Pero aún así contestó alegremente: 【De acuerdo, Joven Maestro. Yo también estoy deseando verte.】

Entonces abrió otro mensaje de otra persona. El último era de Pingping, que no se olvidó de él durante las vacaciones. 【Meimei, ¡Felices Fiestas! Que tengas unas felices fiestas!】

Jian Mei le respondió: 【¡Pingping, Felices Fiestas!】

Pingping estaba claramente muy feliz.

Jian Mei lo llamó y charló un rato con él y, cuando estaban a punto de terminar la conversación, Pingping preguntó: "Meimei, ¿podemos entregar a otras casas algunos de los medicamentos para bajar la fiebre que nos dejaste?"

Jian Mei se quedó perplejo y preguntó: "¿Qué pasa, Pingping? ¿Ha pasado algo?".

"No muchas cosas", dijo obedientemente Pingping, "Últimamente, bastantes personas aquí han estado teniendo fiebres, y siguen reapareciendo al poco tiempo de haberse curado. No es gran cosa, pero tememos que se propague."

Jian Mei frunció las cejas al oír esto. "¿Hay mucha gente afectada?".

Pingping se rascó la cabeza y respondió: "No... no demasiados. Sabes, cada vez que se acerca esta estación, siempre se produce un brote. El de este año es un poco extraño, pero todo lo demás está bien".

Desde que Pingping lo dijo, Jian Mei aún se sentía algo preocupado. "Por supuesto, puedes ayudar si alguien lo necesita. Sólo sé discreto y no llames la atención".

Pingping asintió. "Entiendo. No te preocupes, Meimei".

Después de terminar la llamada, la somnolencia de Jian Mei desapareció por completo. No sabía por qué, pero siempre sentía una sensación de intranquilidad en su corazón. Todo parecía normal, pero cuanto más normal parecía, más intranquilo se sentía. Tenía la sensación de que se acercaba una tormenta.