Bored ~ KookTae

৷①④৷

⬤

— ¿Q-que es lo que haces aquí?...

— ¿Que acaso no es obvio?, vine a verte, Kim...

— L-lo sé... P-pero...

— ¿Tienes algún problema con eso?... Si no quieres que esté aquí, puedo largarme a otro sitio, por mi no hay problema...

— N-no, sólo me s-sorprende un poco... E-es la primera vez que vi-vienes aquí...

— Si, ok, lo entiendo, y bueno, sabes a lo que vine, ¿no?...

— N-no, pero... ¿T-te quedarás después de lo que quieres-...?

— No me preguntes eso cuando sabes la respuesta...

— ¿N-no puedes quedarte, aunque sea ésta vez?

— Desde luego que no, no por ser la primera vez que vengo a tu habitación quiere decir que me quedaré... No seas ingenuo, Taehyung...

— Oh, yo l-lo siento Bog-

— Mejor calla y ven aquí de una vez, tengo que mostrarte algo que te aseguro y te gustara mucho, Taehyung...

⬤

Abrió los ojos, dándose cuenta de la realidad, todo había sido un terrible sueño, aunque es una lastima que una vez haya sido una realidad para él.

Despertó un poco antes de que la alarma sonara, de nuevo le pareció extraño, apagó este antes de que empezara a sonar.

Talló sus ojos, se sentó en la cama, se levantó de ella, haciendo de nuevo lo habitual, parece que estaba olvidando algo importante, todo por culpa de ese sueño.

Al terminar de arreglarse, nota una sudadera tirada en el suelo de su habitación, era algo grande y estaba un poco sucia, la tomó entre sus manos y percibió un aroma bastante familiar.

— Jungkook... — Susurró, abrazando ésta, finalmente estaba recordando lo que sucedió la noche anterior.

Jungkook había sido tan amable con él, lograron trabajar más de tres horas para su presentación, ya estaban practicando lo que dirían y como empezarían.

Taehyung no tenía algo que ofrecerle por desgracia, como comida o golosinas, más Jungkook sacó de su mochila una botella de agua con un sabor frutal y unas frituras naturales de sal y limón.

Incluso rieron un par de veces mientras trabajaban escuchando música tipicamente con sus audífonos.

Jungkook se fue temprano a su casa, a un momento perfecto antes de que sus padres llegaran, así no notarán al chico que esconde en su habitación, debía de asegurarse de que no lo descubrieran.