Cloe Smith nació en un mundo de tinieblas, donde la luz era solo un sueño y un enigma. Nadie sabía de dónde venía, si existía o cómo crearla. Solo se contaban historias de un tiempo lejano, cuando el sol iluminaba el cielo y las estrellas brillaban...
Todo comenzó en el pequeño pero valiente pueblo de Armitael, cuando el deseo de expansión y la búsqueda de otros seres humanos más allá de nuestras fronteras se encendió como una llama en el corazón de la comunidad. Así nació la campaña de exploración más grandiosa jamás emprendida en la historia de nuestro poblado.
Muchos, impulsados por la voz del jefe supremo y el mandato divino, dejaron atrás a sus familias, respondiendo al llamado. Armitael se encontraba en medio de una crisis de recursos, y la promesa de nuevos territorios ofrecía una luz de esperanza. Pero también existía un oscuro entendimiento: si los exploradores no regresaban, su sacrificio significaría que los recursos restantes serían suficientes para los que quedaran en el pueblo.
En esos días, se decía que yo era la chica alegre y llena de vida del pueblo. Por mi carisma y mi entrenamiento físico y mental, fui elegida para liderar el escuadrón más grande de nuestra historia. Como hija de exploradores que nunca regresaron, sentí que no tenía nada que perder.
Anhelaba abandonar aquel lugar, deseando encontrar algún rastro de mis padres en tierras desconocidas. Pero había algo más que me ataba a Armitael, un deseo silencioso de que ella se quedara. Sin embargo, como siempre, no escuchó a nadie, ni siquiera a mí. Aunque han pasado muchos años, mi corazón no puede olvidar.
Con voz temblorosa, le pregunté a Brianda a quién se refería, y con la mirada fija en el suelo, lágrimas cayendo como pesadas gotas de dolor, me respondió: "Esa persona que rompió mi corazón se llama Amada. Ella era la mejor de todos nosotros, la más grande en toda la historia. Una anomalía entre las anomalías, se decía que fue bendecida desde el vientre de su madre por los dioses de la oscuridad. Amada era un ser humano brillante en todos los sentidos, nada menos que una semidiosa. Poseía una fuerza inhumana, una velocidad sin igual, y en su cuerpo no existía el cansancio. Su inteligencia superaba todo lo que la humanidad había conocido. Amada era la esperanza que todos necesitábamos, una verdadera bendecida."
Las palabras de Brianda resonaban en el aire, llenas de tristeza y admiración, mientras la figura de Amada se alzaba como un espectro del pasado, una luz que brilló demasiado fuerte, solo para dejar tras de sí un vacío imposible de llenar.
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Amada se la consideraba un ser humano que realmente estaba fuera de las normas mortales, simplemente era como estar con alguien que podía lograrlo todo, nadie estaba por encima de ella, ni siquiera yo quien dedico su vida prepararme como exploradora y a quien escogieron como líder se igualaba a ella, era más que obvio ella era como una semi diosa, parecía como si los dioses de la oscuridad le seguían bendiciendo ya que siempre nos sorprendía con sus habilidades, ella no fue considerada líder de exploración debido a que aún era muy joven para estar allá afuera, no cabía duda ella era la esperanza de la humanidad, pero aún no estaba lista.
Por otro lado, al ser yo la líder todo el peso cayó sobre mí, pese a estar conectados con el mar muerto, salimos en canoas hacia lo desconocido hasta llegar al desierto, fue ahí donde comenzaron los problemas, Amada salió junto con nosotros de manera ilegal, ella evadió las defensas del poblado y nadie pudo detenerla, ella nos contó que no se iba a perder la exploración más grande de la historia de la humanidad cueste lo que cueste.
