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El banquete había terminado, padre y la mayoría de los guerreros se habían ido y solo quedaba Athelstan y los vikingos.

— Dios mío Abigail — Me soltó de las cuerdas que ataban mis manos y cai de rodillas al suelo.

Sollocé sobre su hombro muerta de miedo, vergüenza y dolor.

— Debemos curar el corte en el pecho, puedo hacerlo Athelstan — Lagertha se acercó a mí con amabilidad.

— Ubbe ayúdame — El vikingo se acercó rápido y pasó sus brazos por debajo de mi espalda y piernas para elevarme y llevarme hasta mi habitación.

— En el estudio tengo medicinas y cosas para curar, ahora vuelvo — Athelstan salió corriendo y quedé a solas con Ubbe y Lagertha.

— ¿Cuántos años tienes Abigail? — La pregunta de Lagertha me desconcertó.

— Dieciocho — Susurré, apenas podía hablar.

— No entiendo como su padre pudo hacerle esto Lagertha, parece tan buena y frágil — Dijo Ubbe captando mi atención.

— Ella nos quiso ayudar sin esperar nada a cambio, debemos cuidarla y protegerla — Sonreí aliviada con las palabras de la escudera.

Athelstan apareció con todo en las manos y entramos en mi habitación, me dejaron sobre la cama cuidadosamente y miré a Ubbe avergonzada, debía de verme desnuda de nuevo.

— De limpiarte y coserte la herida del pecho Abigail — Asentí a las palabras de Lagertha.

Con un paño y agua limpio la sangre que no paraba de sangrar y Athelstan le paso una aguja e hilo para coser.

— Esto va a doler, toma, muerde esto, evitará que grites — Athelstan me paso un trozo de madera y lo metí en la boca.

En el momento que Lagertha comenzó a coser la herida el dolor se hizo insoportable y no pude evitar agarrar una mano y apretarla con todas mis fuerzas, casualmente, era la de Ubbe.

— Tranquila — Ubbe se acercó más a mi  y acarició mi mejilla mientras dejaba que apretase su mano.

— Ya casi está — Lagertha me miró con una sonrisa.

— Aguanta — Susurró Ubbe en mi oído.

Cuando Lagertha terminó de comerme me tapo la herida con un vendaje y me ayudaron a darme la vuelta para revisar las heridas en mi espalda causadas por el látigo.

Konungar || Ubbe Lothbrok||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora