Esa misma noche, al caer las doce, esperas a Arthur sentada en el muelle con los pies dentro del agua.
Estás pensando en tus cosas cuando oyes pasos acelerados, era tu "cita" de la noche.
-¿Llego tarde?
-No.
Te levantas y lo miras de pies a cabeza, tenía un aspecto deplorable.
-Lo sé, estoy horrible.
-Tienes el típico aspecto de un adicto que intenta dejarlo, eso es bueno.
-¿Bueno?
-Es señal de que no has tomado nada durante toda la tarde.
-Me ha costado lo mío.
-Y conforme vayan pasando los días te costará más. Bien, quitate la ropa.
-¿Perdon?
-¿Sabes nadar?
-Hay mejores excusas para verme desnudo, sabes?
-El agua y el aire están lo suficientemente frios como para despertar tus músculos, y con un poco de suerte tus neuronas, si es que te queda alguna.
El hombre te mira con clara molestia.
-Quitate la ropa y empieza a nadar.Arthur comienza a quitarse la ropa mientras maldice por lo bajo, una vez desnudo de todo empieza a replantearse tu orden. Te acercas a él. -¿Qué pasa? ¿Tienes miedo?
Él retrocede. -Pues claro que no.
-¿No sabes nadar?
Te sigues acercando y él sigue retrocediendo.
-¿Por quién me tomas?
-¿Te molesta el frío, princesa?
Sigues haciendo que retroceda.
-No es que me entusiasme el frío pero no soy ninguna princesa.
-¿Entonces cual es el problema?
-¿Para que quieres que nade en pelotas en el muelle del puto Londres?
Sigues acercándote.
-Si vamos a hacer esto juntos debes tener algo claro, no cuestiones mis órdenes, simplemente obedece.
-Yo no sigo las ordenes de nadie.
-¿Ni de Thommy? -preguntas con una voz pícara.
Él hombre te mira mal, te sigues acercando hasta que se cae al agua.
Cuando emerge a la superficie hablas con una sonrisa. -No era tan difícil, verdad?
-Muy graciosa.
Señalas a una boya que había en el agua. -En esa boya de allí hay una bolsa, traemela.
Durante un momento de duda, el hombre decide seguir tus instrucciones.Observas a Arthur nadar desde el muelle, sentada mientras comes una manzana. Estabas dispuesta a ayudarle, no era la primera vez que veías a un hombre en este estado, era el día a día de los boxeadores.
Ves volver al hombre y te pones de pie, él deja la bolsa en la estructura de madera vieja y te mira cansado. -¿Feliz?
-Sí. -sale de agua y se sienta en el borde del muelle. - Abre la bolsa, es tu premio.
-¿Qué soy un perro? -te pregunta mientras coge la bolsa.
-Eres igual de rabioso.
El hombre abre la bolsa. -¿Esto es una coña? Una puta manzana, ¿en serio?
-Consideralo un antídoto, cada vez que sientas el mono come algo, así a lo mejor te distraes.
Arthur, frustrado, le da un mordisco a la manzana. -He nadado en pelotas, por la noche, congelado, por una puta manzana.
Le posas una toalla sobre sus hombros y le secas un poco. -Mira el lado bueno, estás haciendo ejercicio. Y dicen que el agua fría viene muy bien para los señores mayores.
Te mira. -¿Perdona? Tengo un par de años más que tú.
-Pues te han sentado fatal.
Te sientas a su lado.
-A veces, eres frustrante.
-Forma parte de mi encanto.
Dices para mirarlo con una sonrisa.
Él solo se ríe.
Te enciendes un cigarro y te lo llevas a los labios. -Mientras nadabas....en qué pensabas?
-En tu puta madre, sinceramente.
-Eso es bueno. - Te levantas. -Viste te, antes de que te de una hipotermia.
Comienzas ha andar.
-¿A dónde vas?
-A mi casa, nos vemos mañana por la mañana en el gimnasio. Y no me hagas ir a por ti.Avanzas con paso ligero hasta llegar a tu casa. Al entrar ves a tus hermanos y a Francis abranzándose.
-Cuanta alegría, no?
-T/N, tenemos algo que contarte.
-Estoy embarazada. -Anuncia tu cuñada.
-¿QUÉ? ¿En serio?
Los chicos asienten.
Con lágrimas de alegría en los ojos te lanzas hacia la pareja para abrazarles mientras saltas de alegría.
Os pasáis toda la noche celebrando y hablando del embarazo de Francis y de los últimos detalles de la boda, que sería la semana que viene, y justo después, antes de la luna de miel, la gran apertura del club de Arthur.A la mañana siguiente te levantas con alegría de la cama. Después de una ducha te vistes con una camisa blanca y unos pantalones de hombre. Te atas las botas de cuero y sales de la casa. Esperas de pie a algunos de tus boxeadores novatos para ir al club de lucha de Arthur.
Finalmente llegan en un coche negro y uno de ellos conduce hasta el local. Al entrar ves a Arthur supervisando un entrenamiento.
-Buenos días Shelbey.
-Buenos días T/N. ¿Y estos niños?
-Son algunos de mis boxeadores más novatos, nos van a ayudar con tu entrenamiento de hoy.
-¿En serio? -dice con una sonrisa esceptica mientras los observa. -¿Cómo?
-Hoy vas a ser su saco de boxeo.
En boxeo es habitual que los boxeadores entrenen golpeando a una persona con protecciones. La diferencia es que Arthur no llevaría ninguna. Al principio el hombre se niega en rotundo, pero logras convencerle recordándole que te prometió obedecerte.Atais a Arthur a una esquina de uno de los rings, porque sabías que iba a ser incapaz de soportar los golpes sin dar ninguno. Por si acaso, dos de los boxeadores mas fuertes estaban detrás de él por si lograba soltarse de sus ataduras. Y razón no te falta, el hombre se vuelve loco e intenta soltarse para enfrentarse al joven que lo esta golpeando, el cual se gira asustado hacia ti, tú solo asientes con la cabeza como señal de que siga. El chico entiende tu señal y vuelve a ensañarse con Arthur, el cual consigue desatarse. Afortunadamente los otros hombres lo agarran. Das la orden de que sigan con el entrenamiento y así sucede.
Al finalizar acompañas a Arthur al vestuario, ya que había recibido muchos golpes y lo habían dejado un poco mareado. Lo metes en una de las duchas y enciendes el agua.
-¡Joder! -se queja- Está helada.
-¿Cómo te sientes?
-Furioso. -dice mirándote con rabia. ¿Se puede saber en qué me va ayudar que me deje pegar por tus inútiles?
-Este entrenamiento te servirá para aprender a controlar la ira, a gestionarla. No puedes perder los nervios en una pelea. Tienes que aprender a recibir golpes y a darlos sin ceder a la ira.
-Ya.
-Termina de ducharte y descansa un rato, tengo cosas que hacer, pero esta tarde nos vemos aquí para seguir entrenando. Esta vez entrenaremos tus golpes. Hasta entonces no te metas en lios.
Te das la vuelta para marcharte pero una de las manos de Arthur te retiene y te empuja hacia el interior de la ducha.
ESTÁS LEYENDO
ANIMALES {Arthur Shelby y tú} {Peaky blinders}
FanfictionT/N Kray, la hermana pequeña de los gemelos Krey, dos mafiosos líderes de la mafia The Firm. Los tres reinabáis en Londres, hasta que llegaron los Peaky Blinders, una organización criminal de Birmingham, quienes serán enemigos y aliados, y entre dis...