Llegué por error... (Itanaru)

Capítulo 6

Naruto sobaba su cabeza con dolor -me lleva… el… carajo -giró su mirada algo perdido, ¿cómo llegó a su cama? un flash del peliplata, Ayame y Hana trayéndolo en calidad de bulto llegó a él, rió con diversión, se había divertido demasiado, se levantó tambaleándose hacia la ducha, mientras se bañaba recordaba todo -sabes cachorro, acabó de confirmar que eres bastante gay -Naruto abrió sus ojos demasiado -¿de qué demonios hablas bastardo? -el zorro sonrió -tal vez de cuando bajaste la máscara de tu sensei y lo besuqueaste con bastante descaro -el rubio abrió sus gemas demasiado, los flashes llegaron con velocidad, mientras bailaban lo había hecho, el Hatake lo había arrastrado hasta una esquina, el pequeño se había levantado en puntitas, bajó la máscara, abrió sus ojos bastante al recordar, se detuvo en la pared de la ducha, sintió un enorme mareo -es hermoso tteba… ahhh bastardo, me dolió -esa descarga lo hizo recordar todo, el mejor beso de su maldita vida, se le aguadaron las piernas -¿pero si me gustaba Sakura-chan -kurama volteó los ojos -pues ya no, ahora te gusta el cíclope -Naruto abría y cerraba su boca sin entender, se dejó caer en el suelo sintiendo el agua refrescarlo un poco, negó con diversión, era otro mundo y al parecer, otros gustos -bien, supongo, demonios, es hermoso, ahora entiendo porqué se cubre el desgraciado -Naruto rió con diversión, salió de la ducha después de asearse, se puso ropa bonita aceptando la situación bastante relajado, corrió con velocidad hacia su puesto, abrió con velocidad, sus clones con henge comenzaron a trabajar.

-¿Veo que te divertiste bastante ayer? -Naruto rió con diversión -así es, todos son muy agradables ¿cuántos quieres que te guarde? -Itachi lo vio con cuidado -tres banderillas -el rubio sonrió, anotó con velocidad -cuatro mochis de fresa con crema, tres de chocolate y dos de vainilla, anotado -Itachi sonrió -veo que recuerdas, para ahorita un té caliente para llevar -Naruto asintió -te ví con senpai -el rubio se puso bastante rojo -bue… bueno, es bastante guapo -el Uchiha apretó el ceño, no le había agradado el comentario -pensé que tenías problemas para regresar, ¿pero veo que te llevó a tu casa? -el pequeño asintió -Ayame-nee, Hana y kakashi me llevaron, gracias a kami, no creo haber podido llegar solo a mi casa, nunca había tomado, tal vez no fué buena idea tomar bastante -Itachi levantó una ceja -¿seguro es tu primera vez tomando?, te ví tomar casi dos botellas y aún así seguías bailando, tal vez otra persona no hubiera podido ni pararse -Naruto rió con diversión -tal vez baile bastante y me calmó -el Uchiha asintió -en la noche te veo, se hace tarde -el pequeño sonrió lindo -bien, aquí te espero, no te preocupes -Itachi sonrió ligero, tomó el té, salió del lugar.

-Vaya, eso parecía más un interrogatorio de novio -Hana llegó, Ayame se unió -es verdad -Naruto las vió con duda, giró su rostro con curiosidad -no digan tonterías locas, está casado -Hana negó con su dedo y su cabeza -no, no Naru-chan, el heredero y sexy Uchiha no quitó la mirada de tu lindo cuerpecito en toda la noche -Ayame sonrió divertida -y el sexy Hatake robó la virginidad de tus labios, oh por kami rubio, estás cotizado -Naruto rió con diversión -ya están delirando, tomen un té para despertar par de locas -Hana rió con diversión -llegué temprano para que me contaras el chisme, ¿que tal besa kakashi?, tenía meses sin verlo sin pareja, desde lo de Iruka -Naruto levantó sus cejas con sorpresa, disimuló siendo coqueto -hasta las piernas se me aguadaron chicas, ha confirmado mi sexualidad, definitivamente -soltaron una carcajada las chicas -lo importante rubio, ¿habla?, ¿qué tan guapo es?, el tacaño de Iruka era demasiado celoso, nunca habló -el pequeño puso sus manos en su cadera en una pose soberbia -es… un… maldito… adonisssss, por eso se cubre kyaaaaaaa -los tres gritaron con emoción.

-Naru-chan, yo también quiero escuchar ttebaneeee -Naruto vio a la peliroja llegar con velocidad -Kushina-sama, ¿a qué no sabe con quién estuvo besándose Naru-chan ayer en el bar? -la Namikaze lo vio con sorpresa, el sonrojo en el menor era evidente -el pequeño alumno de su marido es todo un pervertido asaltacunas -Naruto soltó una carcajada, Kushina sonrió con diversión -aprobado Naru-chan, ya decía yo que eres hermoso, por fin decidiste ponerte lindo -el pequeño amaba ver a la pelirroja en el lugar, desde aquel día era constante verla ahí y en el Ichiraku, su marido la acompañaba de vez en cuando -espero no se aproveche, si te lastima le daré un escarmiento ttebaneeee -Naruto lloró con dramatismo -usted es increíble, la adoptaré como mamá, ya tengo hermana, tío y ahora madre -rieron con diversión.

…..

Kakashi veía la pantalla de los exámenes chunin -así que, ¿me bajaste al doncelito desgraciado tuerto? -el peliplata giró sus ojos con fastidio -resígnate Anko -la chica negó con fastidio -es demasiado tierno, te entiendo bastardo -Iruka estaba en la sala escuchando, apretó el ceño con molestia y celos -¿aunque es bastante menor que tú? -Kakashi volteó los ojos -sólo son ocho años, no hagas drama Asuma -kurenai rió -es bastante hermoso en verdad y divertido, tenía toda una fiesta a su alrededor ayer -Izumi también tenía un equipo en el examen, los escuchaba con coraje -a mí no me parece que lo sea, es bastante vulgar -Kakashi negó con fastidio, esa chica era irritante.

Anko se paró frente a la chica con las manos en la cadera -Izumi, para ti todos son vulgares menos los de tu clan, acéptalo, es hermoso, mejor sé clara, estás celosa porque el adonis de Itachi no le quitó la mirada de encima a mi tierno y hermoso doncelito -Kakashi levantó una ceja con sorpresa y algo de molestia -tan inocente y divertido -sonrió con burla sacando su lengua con diversión al verla cabrearse. Izumi apretó el ceño -eres una víbora -Anko soltó una carcajada -una serpiente querida, el barniz que te pones en las uñas no deja que el oxígeno llegue a tu cerebro -Izumi apretó el ceño y sus puños, Anko rió con diversión -vamos, cuéntame Kakashi -el peliplata negó con diversión, era una pesada, pero era amiga de la mayoría, todos sabían de su sinceridad brutal y como defendía a los suyos.