• 17.

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Izuku estaba bien.

Ya había tenido ataques de pánico antes. Mirko le había enseñado cómo controlarlos.
Caminar por la habitación siempre era una buena forma de empezar, hacía que la sangre circulara y su respiración fuera más fácil de regular.

¿El problema?

No puedes caminar si estás suspendido a 300 pies de altura.

Lo que equivale a 91.44 Mt. Izuku vivía en un edificio de 7 plantas, lo que equivale a entre 23 y 24 mt. E Izuku odiaba asomarse a la ventana, pues vivía en el piso 6... En conclusión, Izuku le temia a las alturas.

Es decir, Izuku estaba teniendo un ataque de pánico a una altura monumental, literalmente, la estatua de la libertad mide 93 Mt... Izuku estaba a la altura de la antorcha.

Izuku no podía caminar...

Izuku iba a morir, estaba seguro.

Bueno, casi seguro, hasta que la risa de Katsuki llegó a sus oídos. 

El rubio lo sostenía por debajo de los muslos, y su aliento caliente le hacía cosquillas en el cabello.

"Necesitas confiar más en mí, nerd".
Le dijo con su típico tono de burla. "Y no me refiero solo al hecho de que si te dejo caer, te mueres".

El greenette levantó un poco la cabeza, aún con los ojos cerrados. "Kacchan, decirme que me voy a morir si me sueltas no es la mejor forma de ganarte mi confianza. ¿Estás haciendo esto porque me molesté? Porqué si es así podríamos arreglarlo de otra forma".

Katsuki volvió a sonreír, apretando más fuerte a Izuku contra su cuerpo. "Se me ocurren un par de formas". 

Izuku lo golpeó en el pecho, con cuidado de no moverse demasiado, y hundió más su rostro contra el cuello del rubio para ocultar su rubor.

Luego de un segundo de burlas, Katsuki finalmente habló un poco más serio.

"Muy bien, nerd. Hay dos formas de hacer esto... La primera: me muevo rápido y te llevo a nuestro destino, pero para hacer eso tendrás que confiar mucho en mi. Y la segunda: disfrutas un laaaargo viaje a través del cielo nocturno, pero tal vez te marees un poco".

"¡Quiero la rápida!". Gimió Izuku sin dudar.

Katsuki volvió a sonreír, está vez más afilado.

"Muy bien, solo... No levantes la cabeza". El rubio comenzó a volar en línea recta hacia arriba, subiendo cada vez más alto, y como una ocurrencia de último minuto agregó. "Y sostente fuerte".

Y así como así, cuando habían alcanzado una altura casi inimaginable, Katsuki besó los rizos de Izuku, lo abrazó tan fuerte como pudo... Y se dejó caer.

Bajaron en picada, cabeza abajo, con las alas de Katsuki envolviendo al greenette, que milagrosamente, no había gritado. Y cuando la velocidad era tanta que superaría cualquier marca de velocímetro, dieron un par de giros estáticos, finalmente desapareciendo en el cielo estrellado de Japón.

•••

Izuku iba a morir.

Como, en serio, moriría de un ataque al corazón.

Katsuki estaba bastante seguro de que Izuku se había desmayado a medio camino, pero los pequeños murmullos temblorosos del greenette le decían que seguía en el mismo plano terrenal.

Cuando se paró en tierra firme, el greenette aún seguía aferrado a su cintura y hombros, con la cabeza tan metida en su cuello que a Katsuki no le sorprendía que aún no se hubiera dado cuenta de que ya no estaban volando.

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⏰ Última actualización: Apr 17 ⏰

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