the pain of love- tom kaulitz

Capitulo 4

Abrí mis ojos encontrándome aquel lindo chico acostado en mi pecho durmiendo tranquilamente, intente moverme un poco pues hoy tenía que asistir a la escuela por lo tanto se haría tarde...

-buenos días linda-decía el mayor un poco cansado

-¿como dormiste tom?-pregunte

-dormí de ptm, estar acostado en el pecho de mi chica me hace relajarme bastante-dijo victorioso

¿Acaso me llamo, "mi chica"? Pense

-y si mejor ya te vas levantando tom, hoy hay escuela yy no queremos llegar tarde-reí

-lo que diga la princesa-se levantó rápidamente de la cama poniéndose su playera

Me cambie en el baño pues obviamente no me cambiaría enfrente de tom. Cuando acabe nos dirijimos hacia su coche el cual se dirijio a la escuela.

Entramos agarrados de la mano, veía como varias chicas me mirabas con furia y otras bastante celosas lo cual me hacia sentir victoriosa.

Nos adentramos a aquel salón en donde ya habían comenzado las clases.

-es verdad, desde hace rato ya empezaron las clases?!-dijo el profesor bastante molesto.

-de verdad lo siento profesor schdmit-baje la mirada

-nada de lo siento, se me salen, no van a entrar a esta clase y, porfavor, vayan a detención-comenzó a empujarnos fuera de el aula

Sin más, caminamos hacia el salón de dentecion en donde nos sentamos juntos, no podíamos hablar pero si ver el celular, pues, la maestra que nos vigilaba siempre estaba metida en sus libros o durmiendo.

Conversación*

-Dios, como odio a ese profesor

-linda, pero si tu lo amabas, decías que era tu profesor favorito

-si pero solo por 2 minutos tarde nos mando a detención

-ya me acostumbre a estar aquí, así que, por mi no hay problema

-Dios tom, de verdad eres un problemático

Decidimos que cuidadosamente saldríamos del aula para luego dirijirnos al parque y estar ahí un rato, no tuvimos en cuenta que ya era la hora de descanso por lo que los amigos de tom ya estarían allí afuera.

-oye linda, necesito ir al aula por unas cosas que deje, esperame aquí ¿si?

-si lindo, aquí te espero-sonreí

En cuanto se fue, Andreas y zelig se me acercaron lo cual era bastante raro

-am, astrid, ¿podemos hablar contigo? Es sobre tom-los nervios se podrían notar a kilómetros de distancia

-amm si?- mi cara feliz cambio totalmente a una bastante seria

-bien, se supone que tu eres como la novia de tom-

-ajá-respondi

-todo es una maldita apuesta, tu no eres más que una simple apuesta,todo lo que dice sentir por ti es mas que falso todos sus comportamientos son falsos, el no te ama y nunca lo hará, tan solo mirate alguien popular y guapo nunca andaría con alguien como tú una simple rarita, tom y yo hicimos una apuesta en donde el tenía que ilucionarte y al parecer creo que va muy bien-una risa salió de sus labios

Sentí mis Ojos llenarse de lágrimas, pues, yo ya me había encariñado bastante con tom y enterarme de esto repentinamente cuando el y yo íbamos bastante bien...

-d-de verdad?-lágrimas caían por mis mejillas

-de verdad, linda-una sonrisa se formó en el rostro de zelig

Sin más los dos chicos se fueron, a lo lejos vi a tom por lo que me limpie las lágrimas, me levante de mi lugar y me acerque a él para abrazarlo fuertemente

-te amo, tom-susurre

-y yo a ti linda-susurro de forma que solo el y yo pudiéramos escucharlo

Lo abraze pero esta vez aun más fuerte

-todo bien?-preguntó confundido

-S-si, todo bien.- respondi entre sollozos

Tom me noto mal por lo que decidió dejar de lado las clases y llevarme a casa

-quieres que esté contigo linda-pregunto

-no tom, quiero estar sola-le di la espalda al chico abriendo mi puerta y adentrándome en mi enorme casa

Cerre cuidadosamente la puerta, seguido de eso me tire al suelo de rodillas mientras me preguntaba

-por que, por que, por que yo?-

Subí a mi habitación, me tire en la cama llorando desconsoladamente quedándome así profundamente dormida.

Desperté, era ya de madrugada, fui al baño en donde me vi al espejo, me veía bastante mal, volví a mi cama esta vez sentandome en ella.

No se como ni de que forma un sentimiento de venganza se formó dentro de mi. Me lavente de la cama, esta vez, tomando un cigarrillo el cual ya hacía tiempo que no fumaba, me diriji a mi balcón sentandome sintiendo el frío suelo y el aire en mi rostro, prendí el cigarrillo seguido de eso le di una calada.

"Tengo que vengarme de el" pensé

No sabía cómo ni de que forma, pero tenía que hacerlo...