Luego de divorciarse, Jimin heredó el negocio de su papá y con el tiempo logró impulsarlo aun más, ahora el negocio generaba bastantes ganancias. Así que tenía una buena vida, no se quejaba, no les había echo falta nada a él y a su hijo durante todo ese tiempo.
Las cosas en su embarazo fueron un poco complicadas, pues lo había pasado la mayoría del tiempo solo ya que no podía estar cerca de Yoongi. Decir que no le hacia falta tener a Yoongi cerca de el sería una mentira, pero aunque así lo había deseado no era posible.
—¡Minyin, apúrate, tu papá ya va a llegar! — grito desde la cocina para que su pequeño le escuchara, estaba empacandole la ropita y algunas otras cosas más que se llevaba cada vez que iba con su papá
— Ya voy papi, solo estoy buscando a mi kumamon — dijo el pequeño desde su habitación
Hoy era uno de esos días en el que Minyin debía irse con su papá, como siempre lo hacía.
Para Jimin tener a su bebé era algo muy hermoso. Pero los primeros años le dolía el corazón pues su pequeño se parecía mucho a Yoongi, pero había aprendido a vivir con eso.
Minyin finalmente salió de su habitación y corrió hacia su papi quien ya le tenia lista su mochila, Jimin sonrio al ver al peluche favorito de su pequeño en sus bracitos. Yoongi se lo regalo cuando tenia un año y desde entonces no se separaba de su kumamon solo cuando lo lavaban.
Jimin se agacho y acaricio la carita de su pequeño, le dio un abrazo y un beso en su cabecita.
— Hijo mio, recuerda portarte bien con tu papá. Y no le pidas más juguetes, ya tienes demasiados — dijo con dulzura
— Pero papi, jamás serán suficientes juguetes además papá Yoongi me ha dicho que todo lo que yo quiera el me lo va a comprar
— Ya te dije Minyin, no más juguetes. Si yo veo que traes más juguetes te voy a tener que castigar
— No papi, eso no — negó varias veces con su cabecita
Minyin era un niño muy valiente, nada le daba miedo, o al menos eso decía él. Pero si había algo a lo que le tenía muchísimo miedo era ver a su papi Jimin enojado. Cerró sus ojitos al recordar que una vez, un señor feo quería enamorar a su papi y le regalo una taza en forma de corazón y el como buen niño que era se la había roto, le dijo a su papi que fue un accidente pero en realidad si se la había roto a propósito.
Su papi lo regaño, por haberla roto porque no le creyó qué fue un accidente y lo castigo, todo ese día no pudo ver la televisión. Desde entonces le tiene miedo a su papi cuando se enoja y lo quiere castigar. Además su papi Yoongi también le había dicho que no lo hiciera enojar porque daba miedo enojado.
Unos minutos después tocaron la puerta, Minyin ya sabía que se trataba de su papá así que salió corriendo a abrir. Una vez abierta, Yoongi cargo a su hijo y le dio besitos en sus mejillas. Jimin estaba viéndolos con la mochila del pequeño en manos.
— Hola Jimin, buenos días — saludo Yoongi
— Buenos días Yoongi — le acerco la mochila — aquí esta todo lo que utiliza Minyin y no se te olvide no darle muchos dulces, la vez pasada se enfermo por eso
— No te preocupes, no pasará nada — volteo a ver a su hijo — verdad Minmin
— Si papi Jimin quédate tranquilo — sonrio cómplice de su papá
Yoongi también sonrió, papá e hijo estaban sonriendo con esa característica sonrisa de gomita porque hasta eso le había heredado Minyin a Yoongi. Jimin negó varias veces, no les creía, ya conocía como era su ex esposo, sabía que lo iba a concentir de todas maneras.
— Bueno nos vemos Jimin, te traigo a Minyin el jueves — agarro la mochila y agarro a su hijo de la mano
— Esta bien, adiós bebé — Jimin le dio un beso a su pequeño y se quedó observando como los dos se iban caminando por el pasillo hasta el ascensor, una vez que los vio entrar en el ascensor se entro a su departamento y cerro la puerta
Suspiro un poco cansado, aunque le hablara a Yoongi tan tranquilamente no quería decir que no se pusiera nervioso. Se quedó observando los papeles que estaban en la mesa de la sala, tenia trabajo que hacer pero primero iba a tomar un baño, aveces le dedicaba tanto tiempo a su pequeño que no tenía tiempo para si mismo, hasta que Yoongi se lo llevaba esos tres días podía tener tiempo para el mismo.
Pero no es como si disfrutará de ese tiempo porque se la pasaba trabajando o extrañando mucho a su hijo. Fue a su habitación y tomó una relajante ducha en la tina, se permitió relajarse aunque sea un poco, al salir se seco el cuerpo y se puso ropa cómoda.
Regreso a la sala y agarro los documentos, se puso a leerlos y firmo algunos que debía firmar, también llamó a si secretaria para que le organizará juntas y varias cosas más. Al terminar, varias horas después, se sentó en el sofá y prendió la televisión, iba a ver su drama el cual solo lo veía por las noches cuando su hijo ya estaba dormido y no tenía nada que hacer.
Para ponerse aún más cómodo, fue a prepararse palomitas a la cocina y regreso a sentarse. Minutos después se quedó dormido en el sofá, ser padre y trabajar al mismo tiempo no era nada fácil pero su pequeño bebé hacía que valieran la pena todos y cada uno de sus esfuerzos. Algunas palomitas terminaron regadas en la alfombra y la televisión reproduciendo la serie mientras Jimin estaba profundamente dormido. Confiaba en que Yoongi iba a cuidar bien de su hijo y que nada malo iba a pasar, ¿verdad?.

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YOUNGBLOOD
FanfictionYoongi y Jimin están divorciados desde hace años, lo único que los une es su hijo Minyin - No se permiten adaptaciones -