Hermion x tu (chica)/One-shots

No voy a soltarte

Las noches suelen ser el mejor momento para dormir, pero teniendo en cuenta lo mucho que había sufrido y las cosas que tuvo que soportar, tanto físicas como mentales, era entendible que T/N, después de hablar un rato con Sirius, terminara desmayada en el sofá y se quedara dormida por todo el resto del día.

En el momento que despertó, mira como las gotas de lluvia se pegan a la ventana y el ruido que generan le transmite tranquilidad.

Podría haberse vuelto a dormir, a fin de cuentas ahora estaba a salvo en el hogar de su tío, aunque todo eso fue lo de menos cuando miró a la castaña que dormía a su lado sobre su brazo.

Ambas durmieron de costado con sus manos agarradas y seguían sin soltarse.

T/N no recordaba en qué momento se habían puesto es esa posición, pero se siente bien para ella. Por fin estar de nuevo con su compañera. Poder abrazarla, disfrutar de su aroma, leer juntas.... Todo el sufrimiento por el que tuvo que pasar.... por fin había valido la pena.

Una de sus manos suelta delicadamente a la chica dormida, para poder acariciar su cabello sueve, igual que lo recordaba.

Una gran sonrisa se asomó por su rostro al escuchar los quejidos de Hermione por no querer levantarse aún, lo que provocó que la susodicha se hiciera bolita, acercando su espalda más a T/N. Y, sin poder evitarlo, la rubia la rodea con ambas manos al rededor de su torso y unde su rostro en las matas castañas que tanto extrañó ver.

Granger, al sentir como le apretaban en el estómago, abre sus ojos lentamente y mira horrorizada como sus manos no sujetaban a nadie. Realmente se asusta con solo notarlo.

Se levanta con brusquedad, su respiración es irregular y le pican sus ojos. ¿Dónde estaba T/N? ¿Había sido todo un sueño?. Muchas preguntas rondaron por su cabeza en ese segundo, por lo menos hasta que T/N la volvió a abrazar.

- Estoy aquí, Mione- le susurra apoyada en su hombro.

- ¡Serás idiota! No sabes el susto que me dio el no ver nuestras manos juntas- dice girando su rostro con búsquedad y enojo pero escondiéndose en T/N- Todas las mañanas han sido así... Y por un segundo... Pensé que lo de ayer había sido otro sueño... Uno en el que despierto sin tí.

A T/N se le parte el corazón al escuchar su voz tan triste y afectada. Se notaba que Hermione había pasado por el mismo sufrimiento emocional que ella. Y normal, ¿no?. ¿Cómo se puede volver a estar tranquilo después de haber estado todo un año conociéndose y luego de haberse acostumbrado a hacer todo juntas?. Todo el tiempo compartido les enseñó a ser felices entre las dos, y, también, a tenerse cariño. Mucho aprecio se tenían, que nunca imaginarían que, esa necesidad mutua que tenían, sería algo más que un simple amor de amigas. Si es que siquiera se pudieran considerar amigas.

Las amigas no sufren de no tener a la otra persona a su lado como ellas; las amigas no se necesitan las 24h del día como ellas; las amigas no se demuestran afecto como ellas; las amigas no son taaaan felices como ellas cuando están juntas; y, no importa como lo hagan, las amigas nunca se cuidan y preocupan tanto como ellas.

- Mione, estoy aquí. No volverás a perderme, te lo prometo- dice, apoyando su rostro en la cabeza de la castaña.

Las dos deberían haber bajado hace rato a desayunar pero ahí se encontraban, disfrutando un poco más de su reencuentro. Aunque no comprendían porque nadie les había mandado a despertar, pero eso era lo de menos.

Realmente, esa misma mañana antes de que se levantaran, la menor de los Weasley trataba, con todas sus fuerzas, de evitar que su madre despertará a sus amigas.

- ¡Ginevra Weasley! Déjame despertarlas en este momento o sino....- le advierte pero su hija se le adelanta.

- ¡Mamá! Baja la voz. Podrías terminar despertandolas- le susurra.