Givin' Up

I. La anomalia

"Muy bien... comencemos desde el principio.
Mi nombre es Mía Stacy, tengo 24 años de edad. Soy una excelente médica en las altas ciudades De New York en Brooklyn. Tras mi viaje de investigación a Nebraska por la posible cura del cancer fui mordida por una araña radiactiva y desde ahí me convertí en la única y verdadera Spiderman."

"Evidentemente no pude salvar a mis padres de ser asesinados por un patentado terrorista así que caí en depresión por bastante... bastante tiempo. Perdí mi trabajo, mi vida, mi pareja... en fin lo perdí todo."

"En un borde de colapse depresivo descubrí que contaba con la habilidad de regresar en el tiempo. Así que todo empezó desde ahí... Me di cuenta que tenía la oportunidad de salvar a mis padres y recuperar mi vida, pero... entre más lo intentaba... más fallaba. Veía a mis padres morir una y otra vez. Se volvió una obsesión para mi hasta que al fin genere un bucle destructivo que ponía en riesgo mi realidad y la de los demás... Fue ahí donde conocí a Spiderman 2099. Trato de detenerme, me encerró, me aisló de mi propia realidad tras ser un alto riesgo para el mundo... y bueno, aquí me encuentro excluida de mi propia realidad encerrada en otra totalmente desconocida."

🕷️

Tumbada en el suelo acompañada de un collarín y brazaletes inhibidores, aprecio fijamente aquella puerta gris futurista.

"En cuestión de minutos... se abrirá exactamente cuando el reloj marque las 12:30 am.".

La habitación se envuelve en un profundo silencio donde él único ruido perceptible son los murmullos de la gente y aquellos carros voladores que se desplazan cerca del edificio. Algo aburrida centro mi atención al reloj holográfico en la pared.

"Faltan 5 minutos para que Miguel entre eufórico a la habitación y comencemos con esta tortura psicológica de mierda".

Suspiro algo cansada ya que está nueva vida se a convertido en un fastidio. Todos los días es lo mismo. Me despierto, tomo una ducha, vuelvo a comer esa materia gris sin sabor y me mantengo postrada en el suelo sin hacer absolutamente nada... solo espero la madrugada para encontrarme con él y bueno... responder sus preguntas.

"Estar encerrada tanto tiempo en verdad me está volviendo loca... extraño a mis padres... mis amigos... ahh los extraño a todos".

Un poco abrumada pensando en mi soledad escucho la puerta abrirse para mirar fijamente a aquel hombre robusto, alto y bien formado entrar al cuartel. Aún caminando en mi dirección su traje va dejando al descubierto su rostro apreciando con claridad esos brillantes ojos carmesí.

— Déjame adivinar— rompo el silencio señalando a Miguel — ¿Como adquirí mi habilidad de viajar en el tiempo?, es lo que me volverás a preguntar ¿No?—dejo escapar un suspiro mientras me levanto del suelo para acercarme a la vitrina.

— No estoy de humor para lidiar contigo — exclama con su voz grave y un poco ronca

"De verdad que este hombre me odia".

Se genera un silencio incómodo siendo capaz de escuchar los murmullos de la gente fuera del cuartel y solo miro a Miguel parado observando las mismas pantallas digitales que están a un costado de mí.
Aburrida camino entre las paredes de cristal hasta colgar del techo viendo todo de cabeza. Trato de mantener mi mirada fija en Miguel pero mi cabello cubre mi rostro por completo obligándome a hacer una coleta para al fin sentarme en el techo y mantener la mirada fija en Miguel.

Suelto un suspiro encogiéndome de brazos — Seré sincera Miguel... — doy una leve pausa para levantar la mirada — No tengo ni idea de cómo adquirí esta habilidad ¿Okay?, viví la misma historia que todos ustedes...— me detengo un instante sintiendo un nudo envolver mi garganta haciéndome imposible controlar mi voz temblorosa — L-Levo 4 meses encerrada... me estoy volviendo loca...